Subir y besar la luna,
subir y besarte.
Varias veces llegué a depositar cartas a tu nombre en mi buzón de mensajes,
pero una tarde se me acercó Olivero,
me dijo que no veía que a mi lado sufrías…
¡Y era cierto!
Porque ahora te noto muy risueña en las fotos del telediario,
y me lo asegura el mensaje de afirmación que siempre dejas.
Qué lástima que sea yo solo un simple bache,
uno que esquivaste a tiempo.
Ya no me queda tiempo,
no tiene sentido buscarte para hacerte sufrir,
cuando sin eso ya eres feliz.
Así como tampoco tiene sentido escribirte una nota…
para luego guardarla.