Ya tenía toda la información, estuve investigando con la policía, Jimin también consiguió algo de información y lo único que faltaba era ¿porque mamá escogió septiembre?
Manejaba directo a casa, había ido a comprar un regalo para Jungkook, acaba de iniciar septiembre y hoy es su cumpleaños, los chicos fingieron olvidar su cumpleaños para poder hacerle una fiesta sorpresa, también estaba pensando en declararme y por fin pedirle que seamos novios, debo dar el siguiente paso, si no ¿quién lo hará?
—Ya llegue— dije poniendo las cosas sobre la mesa, en la cocina— ¿alguien sabe en dónde está, Jungkook?
—Lo mandé a comprar muchas cosas, pero aún no regresa, eso es bueno, ya pronto terminaremos— dijo Tae.
—¿Vendrán Min Ho y Nam?— pregunto Hobi y asentí repetidas veces.
—El señor Bae dijo que lo dejaría venir.
—Eso es genial.
Todos comenzaban a terminar cada una de las cosas que tenían que hacer, solo faltabamos Yoon, Jin y yo, los chicos la comida y yo la botana.
El sonido de la puerta abriéndose hizo que volteamos a ver quien estaba apunto de entrar.
Que no sea Jungkook, que no se, no, no, no.
Creo que todos suspiramos de alivio al ver que no, pero corrimos a abrazar a los recién llegados, eran mi hermano y Nam.
—¿Por qué están tan asustados?— preguntó Nam.
—Creímos que era Jungkook, por cierto T/n mandale un mensaje para que venga pronto serán más de las 5 de la tarde— dijo Hoseok.
—Si, señor—reí separándome de mi hermano y tomé mi celular.
Gukie.
Hola!!
Te espero en casa en 30 minutos.
Necesito tu ayuda en algo, ven lo más rápido que puedas.
Con cuidado.
No olvides las cosas que te encargaron los chicos.
Ya voy para allá, es solo que los chicos pidieron muchas cosas que apenas caben en mi auto.
¿Quieres que vaya y te ayude?
No, está bien, yo puedo llegar lo más rápido que pueda.
¿No olvidas algo?
¿Qué cosa?
No, nada olvídalo, nos vemos en casa.
Okay, bye.
—Gukie debe estar triste— dije haciendo un puchero.
—Nadie estaría feliz si las personas que más quieres olvidaran tu cumpleaños— dijo Jin.
—Valdrá la pena la sorpresa, ha puesto a que va a llorar— dijo Tae.
—Me alegra que estén aquí ¿Que tal las cosas en casa?— pregunté a Min Ho y Nam.
—Relajadas aunque el señor Bae parece estresado.
—Lo bueno es que no está bebiendo demasiado— dijo Minho y lo mire con una ceja arriba.
—¿El señor Bae está tomando?— ambos asintieron.
Ese señor no aprende, lo bueno que Nam siempre está ahí.
—¿Les ayudamos en algo?— preguntó Min Ho.
—Ya terminamos— dijo Jin saliendo de la cocina junto con Yoongi.
Los chicos se la pasaron haciéndole preguntas a Nam y a mi hermano.
Pasaron una hora y Jungkook aun no llegaba.
Trate de no pensar lo peor como la última vez, pero fue imposible, así que le mande un mensaje, espere unos minutos y no respondia asi que deje varios, ópte por la mejor opción que era llamarlo, pero me mandaba buzón, juro que trato de no pensar nada malo, pero simplemente no puedo hacerlo.
—¿No contesta?— se acercó Nam y negué volviendo a marcar.
—No te preocupes, seguro hay tráfico o se le acabó la pila.
—Pero Jungkook siempre carga al 100% la pila de su celular cuando va a salir.
—Entonces esperemos 30 minutos más, si no llega o no contesta la buscaremos.
—Claro que no, lo mismo pasó la última vez y terminó mal— entre y todos estaban en la sala.
—¿Ya viene?— preguntaron poniéndose de pie con las bombas de confeti en las manos, Jin iba a tomar el pastel pero lo detuve.
—¿Hasta dónde lo mandaste?— le pregunté a Tae.
—No fue tan lejos, lo mandé al centro comercial— respondió Tae.
—¿Cuál de todos?
—El que está cerca de la carpintería a unos 20 minutos de aquí ¿por qué?
—¡Mierda! ¿porque hasta allá? ese lugar tiene mala fama, está lleno de vagos y delincuentes— tome mis llaves y sali.
—¿A dónde vas?— preguntó Nam.
—¿A dónde más iría? iré a buscar a Jungkook, no puedo dejar que nada le pase— subí al auto.
—Yo te acompaño— dijo.
—No, tu quédate a cuidar a mi hermano, recuerda que tenemos otra amenaza, Yoon, Hobi vámonos— dije subieron al auto.
—Yo también voy— dijo Jimin entrando.
—Está bien, si llega te mando un mensaje— dijo Nam dándole mi celular a uno delos chicos después de eso conduje lo más rápido posible.
Con cada minuto que pasaba una nueva inseguridad llegaba a mi cabeza y me estaba muriendo de los nervios.
Si algo le pasa a Jungkook no me lo voy a perdonar, jure siempre protegerlo físicamente.
—¡Maldito tráfico!— grité apretando el claxón.
—Tranquilízate— dijo Hobi y mi teléfono comenzó a sonar.
—Es Jungkook— dijo Yoon que estaba adelante.
Me orille lo más rápido posible, pero el celular dejó de sonar, estaba apunto de volver a marcar pero volvió a sonar, solo que esta vez era una videollamada y conteste.
—Jungkook ¿dónde estás?
—T/N, yo…- suspire de alivio al escucharlo.
—Maldita sea Jungkook, tienes que contestar mis mensajes, te juro que creí lo peor, no me vuelvas a asustar de esa manera, ¿como se te ocurre? ¿sabes lo preocupada que estaba por ti? te juro que cuando llegues a casa te matare— suspiré tranquilizandome— ¿porque haces una videollamada si no te ves? olvídalo, dime ¿donde estas? voy por ti.