Era la primer noche en la que me encontraba verdaderamente sola, me tome un té antes de acostarme. Sentada mientras veía el vapor que emanaba el agua caliente que se encontraba en la taza, pensaba “¿los momentos se desvanecerán tan rápido como el vapor que se une con el aire que todos respiramos? Espero que no sea este el caso, no quiero que en algún momento todo se acabe, pero es algo imposible de evitar, la existencia del ser humano en el mundo es tan fugaz que hasta me aterra reconocerlo, odio darme cuenta de que todo puede terminar en un abrir y cerrar de ojos, los momentos, las vidas, el mundo”
Mientras disfrutaba mi té comencé a escribir en mi diario.
“Esto termino siendo más un diario íntimo que un diario de viajes, es increíble como cada papel que encuentro lo plasmo de ideas confusas con la simple esperanza de que estas en algún momento se organicen mágicamente en el papel, es tonto notar que espero que se acomoden solas como si tuvieran vida propia. Es increíble como en tan poco tiempo mi vida y mis relaciones con los demás cambiaron tanto, me siento confundida porque no sé cuál fue el preciso momento en el que todo se dio vuelta”
Suena el celular…
Morenita:_ Hola ¿Cómo estás?
Ambar:_ Bien ¿vos?
Morenita:_ Me alegro, bien. Llamaba para disculparme creo que fue muy duro como te trate, no es tu culpa que no tuvieras conocimientos sobre ciertas cosas, comprendo que estabas confundida e imagino que habrá sido terrible para vos, fui egoísta y me centre exclusivamente en lo que yo creía y sentida, espero que sepas disculpar mi atropello de ira. Yo solo quiero que estés bien, espero que hayas podido hablar con ella y que todo se solucione.
Ambar:_ Esta bien, como vos me entendes a mí, yo también te entiendo a vos. Quedate tranquila que esta todo más que bien.
Morenita:_ Espero no haber interrumpido ninguna charla importante.
Ambar:_ No creo que pueda tener ninguna charla con nadie, a menos que sea una conmigo misma.
Morenita:_ ¿Estás sola?
Ambar:_ Sí (solloza)
Morenita:_ ¿Qué paso ahora?
Ambar:_ Renata se fue a vivir por un tiempo con el Rubio.
Morenita:_ ¿Me estas jodiendo?
Ambar:_ Vos te pensas que te haría una joda llorando estúpida.
Morenita:_ De pronto esos dos viven juntos, eso sí que no me lo esperaba ¿Y vos como te sentís?
Ambar:_ Me siento sola y estúpida por sentirme sola, sé que no tengo 3 años pero me siento así.
Morenita:_ Quedate tranquila, es normal. Pasaste de vivir con tu familia a convivir con tu amiga, por lo que veo nunca estuviste sola, es una sensación nueva para vos, pero ya te vas a acostumbrar y con el tiempo lo vas a terminar disfrutando.
Ambar:_ ¿Vos decís?
Morenita:_ Sí esto muy segura.
Ambar:_ ¿Te puedo preguntar algo?
Morenita:_ Sí.
Ambar:_ ¿Queres quedarte a dormir en casa hoy?
Morenita:_ Mira está todo bien entre nosotras dos, pero es muy rápido, solucionamos las cosas hoy y prefiero esperar un par de días para verte, no te lo tomes a mal.
Ambar:_ Esta bien no pasa nada, mañana te escribo nos vemos.
Morenita:_ Esta bien, que descanses.
Corte la llamada y me recosté, mientras me encontraba en la cama, en mi mente retumba la frase “sos una estúpida, más rogona no podes ser ¿no? Me faltaba arrodillarme y suplicarle. Dudo que exista algo más miserable que mi poca autoestima” respire me calme y seguí pensando “Quizas ella tenga razón seguro lo estoy exagerando como siempre, no podemos hacer de cuenta que nada paso, lo importante es tratar de volver a construir ese pilar de confianza que por un malentendido se vino abajo”