Mi dulce y extraño amor

Presentación

Su rutina cambio un poco, ahora en vez de ir directamente a casa o desviarse para ir con Derek a su casa para comer algo le acompañaba a recoger a la chica, no tenía ni la menor idea de quien rayos era, ni siquiera sabía si ya tenían algo pues su atención se la llevaba cierta chica y no entendía esa razón.

Estando ya en el lugar se dio cuenta de que un par de chicos estaban parados donde acostumbraban estar, no haría un pleito por un simple lugar, así que tuvieron que estar más cerca de la puerta de salida, con ello un ataque de nervios, ¿Por qué rayos estaba tan nerviosa? Ni que fuese a hablar con ella, ni en sus sueños lo haría, eran solo desconocidas y amaba esa palabra.

Los chicos no tardaron en salir, se tambaleo un poco al ser empujada por todos los estudiantes que salieron casi corriendo, “Que animales”, solo pudo pensar mientras su mirada vagaba en Derek, lo notaba nervioso, tal vez molestarlo un poco la sacaría de su ensoñación.

- ¿Ansioso?

- Un poco, he esperado bastante por esto, ya sabes no soy el tipo del que enamorarías.

 - Nop, ni un poco.

- Los chicos de los libros no cuentan, esos solo te los imaginas y no son reales – se llevó una mano para dejarla sobre su pecho viéndolo con diversión.

- Golpe bajo, dañas mis sentimientos.

- ¿Si quiera tienes?.

Podía escuchar su risa mas no le prestó atención a las palabras que salieron de su boca, claro que tenía, había llorado la última vez con ese libro sobre la chica pez, no lo recordaba con claridad, pero, vamos, no supero esos por al menos dos semanas, Haydée la odio por ser sobre protectora ese tiempo y sus padres la amaron muchísimo más, así que si, tenía hermosos sentimientos.

Dejo eso de lado, no quería meterse en la cabeza un comentario sin mala intención, estaban jugando, solo pudo sonreírle divertida esperando a lo que creía era la futura novia de Derek y vaya que esperaba eso, tenía miles de bromas que deseaba hacerle desde hace mucho y al fin llegaba el momento de ello.

Rodo los ojos al ver como ambos se abrazaban, era incomodo verlos en su burbuja romántica, tratando de ser discreta miro al mismo grupo de chicas, solo que se llevó una pequeña decepción, ella no estaba con el resto, supo que si tan solo fuese un poco más valiente se habría acercado a preguntar por qué no estaba, pero, no era su asunto y su amigo no le pondría más atención así que era momento de irse.

Dio un par de pasos atrás hasta sentir como pisaba a alguien, intento voltear ocasionando que casi cayera de no haberse sujeta al tubo de la puerta, sintió su alma volver a su cuerpo tras aquella vergonzosa escena, estaba decidido, no volvería de nuevo ahí.

- ¿Estás bien?

- Sí, yo solo, gracias por preguntar.

- Doli, es mi nombre.

- Lamento lo de antes, fue un accidente Doli.

- No importa, solo ten cuidado.

- Mel, de hecho es Melissa pero prefiero la versión corta.

- Entiendo, uhmm, debo irme esperan por mí, tal vez nos veamos mañana, claro que sin el accidente de hoy.

- Si tenlo por seguro, nos vemos.

Sacudió su mano para despedirse de la chica y una pequeña sonrisa adorno su rostro, tal vez reconsideraría la idea de no volver al lugar.




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