Mi Fiel Theo

CAPÍTULO 1

Era de mañana aquel perro callejero estaba en la esquina, de la casa de la chica más hermosa que había visto esperaba atento hasta que aquella chica saliera de su casa para ir a correr como lo hacía todas las mañanas y la seguía a la distancia sin que ella se diera cuenta. El perro espera en la esquina con la vista atenta a la entrada, sus orejas se movieron cuando escucho el crujir de la puerta de la casa abrirse.

Contento comenzó a sacudir la cola, con mucha alegría y la movió con más fuerza cuando la chica salió a la calle. Vestida con un short para correr negro, al igual que sus tenis, su camiseta de un color celeste con tirantes. Su cabello castaño atado en una cola de caballo, empezó estirar las piernas haciendo unas sentadillas para entrar en calor. El perro la quedo mirando atento, recostándose sobre el camino colocando su hocico sobre sus patas delanteras moviendo la cola, muy contento.

La chica empezó a correr en su dirección y el perro se escondió rápido en las sombras de la noche, evitando que la chica lo viera al pasar la esquina donde estaba salió nuevamente y la miro a la distancia comenzando a un paso moderado, en el camino la chica se topó con otras personas que también salían a correr a esa hora de la mañana. Después de cuarenta minutos la chica volvió a su casa, sin percatarse de la presencia del perro que llegaba agotado a la misma esquina donde la esperaba.

Agotado y sin fuerzas se recostó sobre, el camino esperando a que la chica volviera a salir. Más adelante la chica volvió a salir de su casa iba vestida con una ropa casual un pantalón jean ajustado a sus piernas con unos cortes en las rodillas, un buzo blanco con una chaqueta sin mangas marrón y un bolso. Esperaba en la puerta de su casa, para que el carro de sus amigas, vinieran a llevarla a la universidad. En eso apareció un auto rojo y la chica entro y se marchó con ellas.

El perro nuevamente emprendió el viaje, persiguiendo el carro rojo sin importarle lo cansado que estaba lo siguió todo el trayecto hasta llegar a la universidad de la chica. Agotado tomo asiento jadeando, el auto también se había detenido en la prevención al ingresar, el también entro por el camino de los estudiantes que ingresaban caminando siguió el auto hasta el estacionamiento y a la distancia vio a la chica y sus amigas bajar del auto haciendo sonar la alarma del vehículo.

Continúo siguiéndola hasta que ella entro a su edificio, y el perro se quedó afuera pues no podía ingresar debido al guardia que se encontraba ahí, a lo mucho podía ingresar dentro del edificio, pero subir más arriba.

Con hambre comenzó a caminar por las calles de la universidad, buscando algo para comer llego hasta un quiosco donde vendían alimentos se sentó mirando, atento a los estudiantes que compraban papas con pollo mirándolos atentamente y poniendo sus ojitos especiales a trabajar lograba hacer que los estudiantes le soltaron unos huesos, con algunas papas que devoraba con gusto.

Empezó a ladrar, pero no de forma amenazadora más bien era una forma de decirles que le dieran más. Algunos le daban, otros lo querían ahuyentar incluido el dueño del quiosco sin lograr éxito pues siempre que lo hacían correr el regresaba. satisfecho con lo poco que había logrado hacer que, su estómago se llenara volvió para ver a la chica a la que siempre cuidaba. A las afueras del edificio espero acostado a que ella apareciera.

Su nariz se movió ligeramente, el aroma de la chica llego hasta su nariz rápido se levantó y se escondió tras los arbustos. Ella salió junto a sus amigas, noto que una de las amigas de la chica sostenía una botella de agua había comido, pero saciado su sed. Empezó a jadear, todas ellas subieron al auto para irse y nuevamente volvió a perseguir el auto hasta llegar a la casa de aquella chica, que se despedía de sus amigas.

Viendo que ella había llegado a salvo a su casa rondo por las calles buscando un lugar, con agua para beber en eso otros perros, cruzaba a su lado y se acercaban a él enseñando los dientes a lo que él también les respondía de la misma manera. Llego al parque donde se encontraba una pila de agua subió hasta arriba y empezó a beber. Siguió caminando por las calles metiéndose en los basureros, rompiendo las bolsas de basura buscando algo de comer. Las personas lo correteaban, al verlo destrozar las bolsas de basura.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.