Ellas no están.
P.O.V. NETHAN SCOTT
Mi cabeza duele demasiado, intento abrir los ojos pero me resulta difícil, batalla unos segundos hasta que los abro, mareado miro a mi alrededor hasta que mi mamá se acerca a mí.
-- Nethan, cariño -- me pasa una mano en mi cabello -- ¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo?
Intento sentarme en la cama pero me siento débil y ella me ayuda.
-- M-me duele la cabeza -- le digo y es entonces cuando algo, más bien alguien viene a mi recuerdos -- ¿Y Joseline? -- mi mamá traga saliva.
-- Se la llevaron, Nethan, también se llevaron a Emely -- responde con la cabeza baja.
-- Se la llevaron, no la pude alcanzar.
-- No, Nethan, hiciste hasta pudiste, y ella lo sabe, pero no ibas a llegar a mucho con las balas en tu sistema, cariño.
-- ¿Y papá y Chris? -- pregunto intentando ignorar el dolor que siento en mi pecho
-- Ellos están bien, tu padre está haciendo todo para encontrar a Emely y a Joseline.
-- ¿Cuánto llevo aquí? -- pregunto por qué está claro que estamos en el hospital.
-- Solo un día, te sacaron las balas fue difícil ya que era plata por eso estuviste dormido todo el día.
Intento levantarme de la camilla.pero mi madre me empuja de nuevo.
-- Oh, no cariño, se que la quiere buscar pero primero tienes que recuperarte, llamar a tu papá y hermano.
Se levanta de la camilla pero antes la tomó de la mano. -- Mamá ¿Estás bien?
-- No… pero.no quiero preocuparte más cariño.
-- Mamá, Emely es mi hermana -- sonrió y ella ríe -- y tú, mi madre, así que todo lo que tenga que ver con ustedes me preocupa, incluso cuando estés triste porque Emely está en peligro.
Comienza a sollozar, como puedo me siento en la orilla de la cama y la abrazo, ella me rodea con un poco de fuerza, se que ella la debe de este pasado mal, a mí también me duele pero para mi madre es la segunda vez que la aleja de Emely y ninguna madre quiere eso.
La puerta se abre y como puedo miro hacia ella, papá mira preocupada a mi madre, se acerca a nosotros y nos abraza a ambos, deja un beso en la cabeza de mamá.
-- No quiero que le suceda nada -- dice mamá.
-- Y no le pasará nada Lexie, la encontraré, te lo prometo.
-- ¿Por qué debe ser tan buena persona y ayudar a los demás? ¿Por qué no fue egoísta por un día?
-- Porque sabes que Emely no es así, ella siempre podrá a los demás antes que a ella, incluso si eso significa ponerse en peligro. -- le respondo.
Mamá se aleja un poco y se limpia las mejillas, quitando el rastro de lágrimas.
-- Llamaré al doctor para que te revise, tienes que estar bien para partirle la cara a ese malnacido -- sale de la habitación cerrando la puerta tras ella.
Papá se sienta junto a mí y me rodea los hombros con su brazo.
-- ¿Está bien?
-- No, ella no está y mi hermana tampoco.
-- Lo sé, sé que te va a doler pero no dejes que el enojo te consuma, eso te llevará a cometer una locura, además conociendo a tu mate primero los va a maldecir. -- sonrió. -- las encontraremos, siempre lo voy hacer.
-- ¿Y tú estás bien?
-- No pero debo de ser fuerte ¿No? Tengo que darle fuerza a tu madre por que ya sabes lo sentimental que es y no la quiero preocupar más de la ya está.
-- Ya no tenemos diez años papá.
-- Eso lo sé de sobra.
-- ¿Y Chris?
-- Ya hablé con él, conociendo a tu madre, hará que te dé de alta ya para tenerte en casa. Chris está buscando la manera de encontrarlas. -- asiento con la cabeza.
-- Papá, es el mismo hombre que la vez pasada.
-- ¿Qué?
-- La misma persona de hace años, quiere venganza.
***
-- ¡Hermano! -- al pasar el umbral de la puerta los brazos de Chris me rodean -- Diosa Luna, me preocupaste mucho.
-- Estoy bien, cabeza hueca. -- le respondo.
-- Al parecer ya estás mejor -- sonríe triste, iba a responder a eso pero el freno de un carro nos hace ver hacia la puerta que todavía está abierta, se oye un portazo y luego por fin lo vemos, a Félix.
Él es algo, su cabello sigue igual que la última vez, lleva puesto una sudadera negra y un pantalón del mismo color, sus ojos celeste se ve diferente.
-- ¿En dónde está? -- mamá mira a papá con miedo.
Mi papá da un par de pasos protegiendo a mi madre -- Debes de calmarte Félix. Sabes muy bien que estar así puede hacerte mal.
-- ¿En dónde está? -- vuelve a repetir con sus ojos rojos.
-- Te ordenó que te calmes -- como es una orden de alguien superior a él, lo hace, se calma de mala manera.
-- ¿Dónde está? -- pregunta de nuevo.
-- Lexie ve adentro -- mi mamá asiente y entra a la mansión. -- Félix, debes de estar calmado, sabes muy bien cómo es tu condición actual, así que te calmas de una buena vez o vete. -- Félix lo mira enojado, suspira y asiente.
¿Condición actual? ¿Qué le pasa? ¿Y por qué no me dijeron nada? Además Feli se ve muy distinto, bueno, quién no lo estaría después de estar años secuestrado, aunque papá dijo que no hablaba solo lo hacía con Emely.
-- Félix solo está alterado -- excusa Óscar, el beta de Félix -- también daremos nuestros apoyo y Félix quiere la información completa.
¿Por qué no lo dice él?
-- Está bien, pero si no haces lo que digo te encerrar en el calabozo -- Félix asiente, papá suspirar -- al despacho, ahora -- entra a la mansión, Chris y yo nos acercamos a Félix.
-- Nos alegra verte de nuevo Félix -- dice Chris, Félix mira a Óscar y este responde.
-- Él también se alegra.
-- ¿Por qué no habla? -- pregunto yo, se vuelve a mirar y Félix asiente.
-- Solo habla cuando está enojado, es un trauma, solo con personas de confianza habla, es decir, solo conmigo y Emely -- Félix gruñe -- pero sigue de gruñón -- sonrió.
-- Algunas cosas no cambian -- vuelve a gruñir y reímos -- hay que ir adentro.