Mi frágil y hermosa humana (trilogía trillizos, Libro #1)

Capítulo 36 (Último capítulo)

Nuestro viaje comienza.

P.O.V. NETHAN SCOTT. 

-- No se que se llevó para serte sincera -- dice Joseline con las manos en la cadera.

-- ¿Qué no empacaste tú? -- preguntó con los brazos cruzados.

-- Yo apenas y se que es una camiseta, Nethan -- se tira a la cama y yo río -- Emely se ofreció y no me negué, al menos eso la distrajo.

-- ¿Y no te dijo que había metido?

-- Dijo que sudaderas por que sabe que eso me pongo más seguido, traje de baño que no se de donde los saco, pantalones, shorts que me dio.

-- ¿Trajes de baños?

-- ¿De todo lo que dije solo eso te importa? -- rio y me acuesto a un lado de ella en la cama, me abrazo a ella y escondo mi rostro en su cuello.

-- Sólo es algo que me gustará ver -- ella rie y me da un manotazo en la cabeza..

-- Estarás loco, aunque ya nada me sorprende.

-- ¿Sabes algo? Ya no te sangra la nariz.

-- Porque no he tenido noticias fuertes como la que el chico que me gusta es un lobo -- río.

-- Soy único, lo sé.

-- Serás baboso.

Levantó mi cabeza -- que cariñosa eres siempre.

-- Soy única, lo sé -- sonríe y me da un beso en la mejilla -- ahora termina de empacar tu maleta mientras yo iré a distraer a Emely, está a poco de llorar.

-- Ella es muy sensible -- le digo.

-- Eso lo se, lo supe cuando vimos la película Marley y yo.

-- Esa película es triste, así que se cale llorar -- defiendo la película y ella sonríe.

-- Bien señor sentimental, termina de empacar que ya falta poco -- me empuja a un lado y se levanta de la cama.

-- Dos días -- levantó dos dedos y ella rie.

Escucho como sale de la habitación y cierra la puerta, me levanto de mala gana, la cama estaba muy cómoda y mejor si ella estaba conmigo.

Entro al closet, comienzo a sacar ropa y tirarla a la cama, una hora después sólo he hecho una maleta que a diferencia de Joseline tiene dos.

Suspiro y salgo de la habitación pero chocó con Joseline al abrir la puerta.

-- ¿Por qué tienes un fuerte pecho? -- pregunta mientra se soba la nariz.

-- Perdón.

-- Ya que. Te venía a llamar para que bajaras a comer, Chris y Emely te están esperando.

-- A eso iba.

Ella comienza a caminar y yo la sigo, quedando siempre detrás de ella.

-- ¿Dónde iremos después de Hawai?

-- No sé.

-- ¿Podemos ir a otro lugar que tenga playa?

-- Si tu quieres, yo ya elegí Hawai -- ella ríe, se detiene y da media vuelta para verme.

-- Bien, iremos a México, Acapulco. Una vez vi un folleto sobre eso y me dio mucha curiosidad.

Sonrió -- No es una mala idea.

-- Ves, soy única -- me saca la lengua y sigue caminando, sonrió y la sigo nuevamente. 

***

-- ¡Levántate, es un gran día! -- grita Joseline y salta en la cama en cambio yo sólo me enrollo más con la cobija.

-- El vuelo es a la tres de la tarde, se buena y déjame dormir -- digo mientras cierro nuevamente los ojos y  me abrazo a la almohada ya que ella está saltando.

-- ¡Son las once de la mañana! -- sigue saltado y yo gruño.

La escucho reír, para de saltar y se deja caer a un lado de mi para después abrazarse a mi de brazos y piernas, algo que no me molesta por cierto.

-- Tiene que levantarte.

-- Que pereza…

Ella vuelve a reír -- Vamos Nethan, hoy es un día fabuloso.

-- Ojalá así hubieras estado cuando te dije que era un lobo.

-- Tengo que decir que no fuiste el mejor dando esa noticia ¿Además que esperabas? Estaba diciendo que te podrías convertir en un perro gigante y no cualquier chico me a dicho eso, ere el primero en decirlo. 

Como puedo me doy la vuelta y también la abrazo, pasado me un brazo por la cintura y ella aún mantiene su brazo en mi cuello y su pierna en mi cintura.

-- Esperaba que lo aceptará y ya, no que te sagrada la nariz y que mi tío pensará que te golpe.

Ella rie -- Lo hiciste bien  por que sino no estaría aquí -- me da un beso en la frente.

Vale, está cariñosa, que es algo raro en ella aunque no me quejo, hay que disfrutar.

-- ¿Ya te levantarás? -- niego con la cabeza -- Vamos Nethan, comenzamos nuestro viaje juntos ¿No te emociona eso? Pensé que de los dos yo era la fría.

Sonrio -- estoy emocionado pero también tengo sueño.

-- Desde que te conozco siempre tienes sueño.

Sonrió inocentemente -- Es un don -- ella rie.

-- Si no te levantas te echaré agua helada.

-- Aún así dudo levantarme.

-- ¿Sabes? Me es más difícil hacer que te levantes que yo elegido que camisa ponerme -- rio. 

-- Pero así me amas.

-- Serás bobo.

-- Un bobo que amas -- ella rueda los ojos con una sonrisa -- Dilo -- pido y sé que ella sabe que cosa.

-- Lo diré si te levantas.

-- Me levanté de un buen ánimo si lo dices

--¿No deberías despertar ya de un buen ánimo sabiendo que vamos a ir a Hawai?

-- Eso es suficiente pero sería más si lo dices. Lo quiero escuchar -- pido otra vez, ella rueda los ojos.

Ella deja un beso en mi mejilla -- Te amo -- murmura en mi oído y se levanta rápido de la cama para salir corriendo fuera de la habitación.

Rio a carcajadas y me levanto de la cama, me ducho rápido y me pongo un pantalón negro y una camiseta roja, salgo de la habitación, bajo las escaleras y camino a la cocina.

-- Ya era hora que te despertará -- dice Chris al verme entrar -- por que sino mal recuerdo tiene un vuelo hoy y normalmente las personas se levanta temprano para llegar a tiempo y con sobra.

-- Hubiera seguido durmiendo pero Joseline me despertó mientras saltaba en la cama.

-- ¿Y por eso la gran sonrisa?

-- Hay muchos motivos para una gran sonrisa.

Él rueda los ojos -- Ya vete mejor, por cierto, no te se lo he dicho a nadie -- me siento en un taburete -- pero encontré a mi beta.




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