Capítulo 26

Daniel: eso siempre lo tendrá. El obsequio que te pienso dar es una pulsera que está grabada con tu nombre, así que está diseñada para que la tengas, además también es única como tú.

Amelia: seguramente debe de estar hermosa mi pulsera. Ahora solo falta que me la des y sobre todo quiero que me la pongas, por favor.

Daniel: debes de esperar a que saque el estuche de mi bolsillo para hacerlo. Nada más que antes de ponértela, necesito decirte unas palabras de mi parte.

Amelia: entonces escuchare tus palabras. Seguramente será una hermosa declaración de amor y este momento sería el ideal para volver a escuchar que me amas.

Daniel: tienes razón, mi hermosa princesa. Llego el momento de declararme ante ti de una manera más correcta como te la mereces, porque me enamore de ti verdaderamente. Solo que para el amor no existe ninguna explicación, pero para mí si la hay. Este amor que siento por ti es único, así que necesito volver a decirte que te amo y que mi amor por ti será eterno.

Amelia: fueron muy bonitas tus palabras. Esta primera cita será muy importante para mí, porque siempre recordare esta fecha especial donde al fin aceptamos nuestros sentimientos, eso quiere decir que yo también te amo.

Ella se le queda viendo, Daniel saca de su bolsillo su hermoso obsequio para después ponérselo y cuando lo hace, el besa su palma de la mano para posteriormente pedir su comida. Ellos siguieron en su cita y así el tiempo paso hasta llegar el día de la boda, el único problema de esto es que él no tenía permitido ver a su prometida, ya que esa era la costumbre de su familia y la tenía que respetar

Amelia: no puedo creer que sea el día de mi boda, nana. Además, me siento muy nerviosa, porque seré el centro de atención de las demás personas.

Nana: la única manera de no sentirte nerviosa es que hagas de cuentas que nadie está a tú alrededor y únicamente debes de concentrarte en tú futuro esposo.

Amelia: tienes razón, pero seguramente mi familia también debe de estar en la iglesia esperando por mí. Ahora necesito pensar en flores amarillas para sentirme en paz conmigo misma, pero no puedo evitar ver mi reflejo en el espejo y en mi mirada se refleja la felicidad.

Nana: es que esta es la primera vez eres feliz y empezaras una vida donde ya no existirá nunca más tristeza para ti. Recuerda que debes de sonreír en tu boda.

Ellas salen de su recámara para después bajar las escaleras y a los pocos minutos salen de la casa. El chofer las ayuda a subir al auto para hacerlo el también y de esta manera ellos se dirigen rumbo a la iglesia

En la Iglesia

Daniel: porqué todavía no llega. Será mejor que llamé al chofer para saber el motivo de su tardanza y ahora mismo lo pienso hacer.

Humberto: no vas a llamar a nadie, hermano. Seguramente ella ya viene en camino y solo debes de esperar un poco de tiempo para que llegué.

Daniel: te pienso decir exactamente las mismas palabras cuando sea el día de tú boda y hasta que llegué ese momento me entenderás. Deberías de ir al lado de tú prometida, porque su mejor amigo esta con ella.