Prólogo.

Prólogo.

Júpiter Anónimo Ruppert, ese es el nombre y apellido de nuestro, personajes principal que un día por azares del destino conoció a una mujer extraña de camino de la universidad a su casa, y se enamoró perdidamente. Ella como por arte de magia se queda perpleja ante él. Y un hecho accidental produce que Júpiter salve a esa dama de un accidente. Ella acepta salir con él, a cambio de casarse, y luego de un tiempo consuman su matrimonio, y así comienza esta alocada historia de humor y hechos inusuales propios de la ciencia ficción. Cada día con Gaía, Júpiter vivía situaciones más y más desopilantes e inverosímiles. Aparecen personajes raros, y momentos subliminales. Gaia es una caja de pandora. Un muñeco de la galera que puede hacerlo todo. Y él, su esposo se pregunta ¿quién es ella? La que un día es científica, y al otro día médium, electricista, gamer. La que puede hablar con animales, y por alguna foránea razón manipula el tiempo y los recuerdos con un concepto llamado Laplace. Júpiter nota ello, como su amigo Gregory, sobre otra persona importante, Luna. A medida que la obra se sucedida ocurrían esos acontecimientos. Y un día de forma desconocía Gaia, y Luna desaparecen, perdiendo ambos los recuerdos, hasta que de alguna manera los recuperan, y Júpiter emprende la búsqueda junto a su amigo y otra persona importante Josefina, quien sabe más de lo que parece. Allí se encuentran con el guardián de la llamada sala Hades, parte de un sitio de un museo, en el cual trabaja nuestro protagonista. Y Allí se rebela que hay un portal, en el cual los espera su guía, Mikonos Noir, un gato que tiene la capacidad de comunicarse, y toma su forma semi humana. ¿Y entonces?

Entonces, nuestros amigos, deben embarcarse en un viaje insólito en algún punto de la galaxia en la búsqueda de Gaia Vida Justina, y Luna Justina Luna. En otro mundo; otro planeta desconocido en las

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llamadas Pléyades. Un sitio al cual Gaia siempre llamó la isla. Muy lejos de casa. Y allí se verán envueltos en nuevas aventuras, y nuevos personajes, en un viaje a fin de evitar que la temible raza sauron se haga del reino de las Pléyades con un matrimonio que fuera consensuado ya hace mucho tiempo. El de su querida Gaia Justina.

Ruppert y compañía, harán lo imposible para evitar este evento nupcial, y salvar al planeta de aquellos malhechores. La historia se desarrolla, en tramos de primera y tercera persona. En donde nuestro fiel protagonista, nos las cuenta, ya veces una voz en off hace lo suyo, para suplir. Una aventura de comedia romántica, paranormal si se quiere; de ciencia ficción y acción. De Lugares de fantasía, de humor descabellado. Nutrida al estilo de las novelas ligeras, guarda diálogos interesantes, y fluidos que hacen a la obra junto a las descripciones de los paisajes y las situaciones anómalas y reales que se van desarrollando en su plenitud. El énfasis se coloca, en esos llamados diálogos, pues, son lo que le dan vida a toda la obra, generando que aquel lector pueda incluirse con mayor facilidad en la historia que se va narrando sin generar desconcierto y ni altibajos confusos. Pues como he mencionado, es una obra que encierra una amplia volatilidad de géneros, que siempre se unen como hilo conductor al romance y el humor. A lo largo de esta bella aventura, cada personaje tendrá su protagonismo, sin salir de nuestro héroe y su princesa que lo espera. Confieso, que nunca me divertí tanto escribiendo una aventura. Quisiera que estos amigos y amigas estuvieran por siempre, y espero que puedan empatizar con ellos tanto como yo lo he hecho. Los dejó con nuestra aventura, la de Júpiter y Gaia..Que comience la odisea. -

Diego Leandro Couselo