Capítulo 28
Ada.
- ¿Estas de broma no? Ariel no es tu hijo. Te lo dije mil veces en un día.-Dije de mal humor.
Mi abuela me miro diciendo “Ya díselo”.
- Te estoy haciendo una broma.-Dijo rodando lo ojos.- Sin duda es igual a su padre, Carlos.- Dice mirando me a los ojos. Sé que algo anda mal.- Con los ojos cafés y el pelo marrón o castaño. Aparte con esos hoyuelos es idéntico al padre.- Dice con total sarcasmo.
¡Mierda!
- Capaz que no sean iguales físicamente. Pero vos no sabes cómo son los rasgos de nuestros ancestros.-Si capaz mi escusa fue la peor de todas
Le mentí lo sé pero que otra cosa puedo hacer, no le quiero decir que Ariel es su hijo. No lo tiene que saber.
Mi abuela me piso el pie y la mire con disimulo .Idiota me susurro.
-¡Abuela!- la regañe.
Alexander nos miraba a los tres .Él sonreía.
- Bueno Ada tu eres la madre sin duda sabes quién es el padre de tu hijo.-Dijo con un tono agrio.
¿Me está tomando el pelo? ¿Sabe que él es su hijo?
- Si, ese es Carlos.- Afirme.
Lo mire a los ojos, su cara destilaba decepción como si esperara otra cosa de mí.
En mi cabeza una vocecita no deja de decir que él lo sabe, pero es imposible.
Terminamos de almorzar y Alexander pago, no volvimos a hablar más del tema de quien es el padre de mi hijo.
Cuando salíamos del restaurante, mi abuela se iba con Ariel a casa en un remis pero el insistente de Alexander. La llevo hasta mi casa.
Yo me negué no quiero que sepa. En donde vivo y menos que algún día caiga de sorpresa.
Una vez que nos despedimos de mi abuela y de Ariel, nos encaminamos hasta la empresa todavía nos quedaba unas 4 horas de trabajos.
En el auto ninguno hablaba, hasta que Alexander pregunto.
- ¿No piensas mandar a Ariel a una guardería?- Dice mientras dobla en la esquina.
- Claro, pero es muy pequeño todavía. Aunque mi abuela lo cuida y así por ahora está bien.-Dije mirando al frente.
- ¿Lo mandaras a una escuela privada me imagino? -Me pregunto, freno en un semáforo y siguió.
- Cálculo que sí. Espero poder mandarlo a una buena escuela. – Digo.
Era una rara conversación sobre mí, pero creo que solo quiere rellenar este incomodo silencio.
- ¿Y tus padres?-Me pregunto.
- Golpe bajo – Le digo con una media sonrisa.- Ellos hace dos años que no me hablan. Cuando se enteraron de que estaba embarazada me echaron de casa, mi abuela me acepto en su casa y comencé a trabajar para poder terminar el secundario.-Explico brevemente mi vida, sé que no debería estar dándole expoliaciones, pero qué más da.
Freno de golpe el auto en medio de una calle vacía que suerte que no había nadie, hubiera sido horrible el accidente
-¿Tus padres te echaron de su casa embarazada y a la mitad del último año escolar?- me pregunto se lo notaba furioso.
- Sí. - Dije escogiendo me dé hombro eso hace tiempo que dejo de doler e importarme.
- ¿y me imagino que Carlos estuvo allí para ti?- Pregunto.
No la verdad es que lo conocí meses después en la cafetería en donde trabajaba y como él no es el verdadero padre si no tú. Por eso el no estuvo desde el principio.
En lugar de eso, respondí.
- No, le dije a Carlos que estaba embarazada meses después él se enteró y me pidió otra oportunidad para ser una familia con Ariel.- Dije mirando al vidrio me sorprende la facilidad con la que puedo mentir, podría ser escritora con todas estas mentiras que se me ocurren de la nada.
Alexander golpea el manubrio con fuerza, lo miro sorprendida.
- ¿Qué pasa?- Pregunte mirándolo sorprendida.
- ¿Qué pasa?-Dijo sarcástico.-No puede ser que seas tan estúpida y creas que me trago ese cuentito.- Dijo con toda la rabia del mundo sus ojos estaba hinchado se por esa expresión que tiene ganas de llorar.
Me ofendió por qué me dice estúpida.
- ¿Por qué me insultas? No entiendo de qué cuentito me hablas.
- Eres una tonta si crees que me creo eso de Carlos es el papa de Ariel o si creo que me fuiste infiel en el secundario.
"Sé que puede ser muchas cosas buena, honrada, bipolar, amable, inteligente, con el mejor culo del mundo, puede ser la chica más trabajadora y con el corazón más puro .Pero tú no eres mentirosa ni mucho menos infiel, tu más que nada sabes que no eres así y si sé que cometí muchas cagadas, pero asume que te amo más que a nada en el mundo, aunque a veces lo dudes".
Me quede pasmada al escuchar todo eso ¿Enserio cree que puede llegar así de la nada y venir a decirme todo eso? Me duele el pecho.
No solo por él, sino por lo que siento. Viejos recuerdos, sentimientos y emociones llegan de repente envolviendo me como un torbellino.
- Alex, yo sufrí un montón con lo que me hiciste. No sabes lo que me dolió entrar a los vestuarios y ver el video que grabaste y saber que te reías de mi a mis espaldas con los idiotas de tus amigos -Las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos él se me acerco y tomo mi cara en sus manos .Me aleje de él. - Lo que me dolió saber que jugaste con mis sentimientos, sabes que fueron demasiado sinceros que te amé de verdad y tú solo jugaste.
- Ada lo sé, al principio jugué contigo, pero pasaron los días y me enamore el video si te hubieras quedado dura dos días nomas el primero y el de la primera cita, luego grave más días pero le sentía como una mierda así que los borre, me sentía mal porque en el fondo me había enamorado de vos porque en el fondo supe que tú eras el amor de mi vida. El día en el que te quite la virginidad. Fue el día más feliz de mi vida porque fue la vez que hice el amor con alguien que yo amaba y que me amaba.
No podía escuchar más, era como una opresión en mi pecho sabía que lo que iba a hacer estaba mal.
Sabía que no lo tengo que hacer y mucho menos pensarlo. Pero de todos modos los hice.
Lo mire a los ojos y me incline para besarle.
Mis labios rozaron los suyos y él se me acerco.
Unimos nuestros labios en un beso vigoroso en donde su manos estaba en mi cintura y las mías en su pelo negro.
Su lengua choco con la mía en un baile electrizante, cada célula de mi piel se alteró y se por qué.
Sé por qué cuando nos separamos lo abrace lo abrace de verdad.
Sé por qué me duele el pecho son dos razones muy fuertes.
Demasiado.