Llegamos a la dirección que le habían dado a Isa, ya estábamos adentro y ellas buscaban supongo a los dos chicos que les gustaban. Yo estaba atrás de ambas mirando el pasto.
Mire a Isa que iba con Joan, fue y le dio un gran abrazo, no debía de separarme de Emma, era la única que no podía dejarme sola, así que debía de estar como una garrapata.
—Donde estará Abel... —murmuro buscando entre la gente, yo solo la miraba algo preocupada, si se iba con este chico Haba me iba a dejar sola.
—¡Chicas! —llego Daniel con una gran sonrisa—¿Cómo andan?
—Hola Daniiii... ¿Has visto a Abel?
—No, no lo he visto —dijo con un suspiró.
—Rayos, creo que ya lo vi —no dijo más y se fue dejándonos solos, gracias amiga.
—Yo ando bien ¿Y tú? —dije respondiendo a su pregunta que mi amiga ignoro.
—Me alegro, igual bien —sonrió— ¿Quieres beber algo?
—Mmmm... no gracias, yo la verdad no tomo alcohol ¿tus bebes? —dije intrigada.
—No —dijo riendo— Quería ver si había algo que no tuviera alcohol.
—Oh... bueno, así si, vamos te acompaño.
No quería parecer una garrapata que estaba pegada a Daniel, pero creo que era mi última opción, Emma se había ido, seguí a Daniel a donde estaba la mesita donde había varias botellas de vino y otro tipo de bebidas.
—Qué es esto —agarro una botella, la reconocí luego luego, eso lo tomaba Axel, al parecer no contenía mucho alcohol.
—Es una bebida con poco alcohol.
—Mmmm... —destapó la botella y la olió— Es de durazno —le dio un trago a la bebida y la saboreo— No sabe mal —sonrió— ¿Quieres probar?
Asentí, no perdía nada con probarla, no contenía mucho alcohol para emborracharme, me entrego la botella para que le diera un sorbo, sabía rica la verdad.
Como me había gustado, agarre una para mí.
—Sabes, estoy emocionado —me dijo cuando estábamos debajo de un árbol sentados.
—¿Por qué?
—Es mi primera fiesta, nunca había ido a una.
—Creí que las personas famosas iban a muchas fiestas.
—No esté "famoso" —dijo riendo— Nunca me han dejado mis padres...
—Por cierto —me gire por completo para quedar frente a él, aún no me sabía la edad de este chico— ¿Cuántos años tienes?
—Tengo diecisiete—sonrió, abrí un poco mis labios sorprendida, no parece de esa edad, parece de diecinueve o veinte, la mayoría de mi salón eran feos y tienen esa edad, incluso ya algunos eran mayores.
—Woow... creí que ya eras legal.
—No, aún no —sonrió— ¿Tú has ido a muchas fiestas?
—La verdad no, no me gusta mucho este ambiente, pero solo llegué a ir a una que me invitaron hace años
—¿Por qué? —lo mire— Digo, porque no te gustan las fiestas.
—No sé... en una fiesta siento que la gente es tan hipócrita y te juzga de todo, yo en lo personal soy muy tímida y no me gusta llamar mucho la atención, y en una fiesta pues la llamas —le di un trago a mi botella.
—Por lo que me dices, creo que no tuviste una buena experiencia en tu primera fiesta ¿paso algo malo acaso?
—Digamos que me criticaban por hablarle a un chico más grande que yo.
—¿En serio?
—Si, es tonto por qué él era amigo mío de la secundaria y verlo nuevamente nos hizo felices, pero en la fiesta las chicas me criticaban por ser su amiga... —baje la mirada la siguiente parte me dolía un poco.
—Te hizo algo ¿no? Para que odiaras las fiestas y lo recuerdes mal...
—Si —hice una sonrisa torcida— El, bueno... cambio algo y sí, me invitó a la fiesta para convivir y que conociera personas, yo quería cambiar, quería tener amigos y vivir mi estúpida vida de adolescente, pero las personas que estaban, no les agrade del todo, en especial las chicas, una de ellas me dijo que era una zorra, que quería quitarle a su novio y no sé qué tanto me dijo, creí que mi amigo me defendería, pero no lo hizo.
—¿De verdad no dijo nada?
—No... estaba a mi lado y no dijo nada, dejo que todos se rieran de mí y esa chica siguiera humillándome.
—Que idiota.
—Lo es —suspire— Pero bueno, ¿Por qué no te dejan ir a fiestas?
—Creen que podría ser como mi hermano, por eso me tienen tan controlado.
—¿Cómo qué tú hermano?
—Bueno digamos que mi hermano es muy desastroso, le gusta andar probando de muchas cosas, mi mamá tiene miedo de que yo termine igual o peor que él. Pero no soy igual a mi hermano, verlo tantas veces en un hospital... me entiendes ¿no? Yo no sería como mi hermano.
—Si te entiendo, tú no harías lo de tu hermano...
—Oh tal vez sí... lo más probable es que si me emborrache, pero no me drogaría ni nada de eso, pero ella cree que puedo arruinar mi carrera haciendo alguna tontería.
—Muchos famosos salen a fiestas y hacen tonterías, no por eso se les arruina su carrera.
—Eso dile a mi madre —suspiro cansado— No quiero hablar de eso, me pone algo mal... mejor hablemos de ti, cuéntame ¿Cómo te fue en tus proyectos?
—Está bien —suspire y lo mire a los ojos— Me fue bien —sonreí— Aún no me entregan dos calificaciones, pero el que hiciste saque diez.
—¿En serio? —dijo con una gran sonrisa, asentí— Bieen —aplaudió y reí ante su emoción —Y eso que no querías de mi ayuda.
—HEEEEY —llegó Abel— Que honda tortolitos —lo mire sorprendida, ¿tortolitos? En serio... —Hay que tomarnos una foto —saco su celular y tomo una foto, parecía que estaba algo tomado—Oigan la verdad que ando triste —dejo su celular en su bolsillo y se sentó en medio de ambos.
—No nos importa como estes Abel, lárgate.
—Hey —dijo haciendo pucheros y yo reí, se veía tan tierno.
—Que es lo que sucede Abel...
—¿Dijiste mi nombre bien, acaso?
—Perdón, corrección, que es lo que sucede chico Haba...
—Belli —dijo Daniel con una sonrisa y ambos reímos al ver su cara de indignación.
—Lo dejare pasar, por que en verdad no estoy bien —se acomodó entre nosotros— Odio no poder decir lo que siento. Quiero decirle a Emma que me gusta, de verdad, pero me da miedo como es que vaya a reaccionar ante mi declaración estúpida.