Mi Luna De Plata (primera Temporada)

Capítulo 42: Un refugio para dos

Lucy W.

La muerte de Niccolo llego para desconcertame totalmente, ¿qué fue lo que desencadenó para que terminara así?, ¿qué sucedió después del disparo?, tal vez nunca lo sabremos, o es que quizá decidió quitarse la vida después de todo lo que hizo, ¿pudo pesar en él algo de culpa?, lo dudo.

A propósito de ese tema, no dejaba de pensar en ello, y es que ya ni tiempo tuve de decirle a Tino lo que había ocurrido conmigo, ambos nos juramos no volver a ocultarnos nada y ahora es uno de mis mayores secretos.

Recibo una llamada en medio de la noche, es la voz de Tino que me pide aclarar todo este suceso, su voz entrecortada me lleva a confesarle todo.

-      Te juro que iba a decírtelo antes de irme, pero las circunstancias no me lo permitieron y tú lo sabes – digo para tranquilizarlo – Tino, por fortuna esto no llego a nada grave gracias a la intervención de Claudio, sé que tú y él no andan en buenos términos, sin embargo, estaré siempre agradecida con él por lo que hizo.

Por primera vez lo escucho llorar y eso me conmueve, descubrirlo le ha afectado tanto y más por sentirse imposibilitado en estos momentos.

-      Voy a estar bien, Caroline me ha dado un nuevo amuleto y este me va a proteger durante el tiempo que se requiera, fue mi error y tu no debes sentirte culpable por eso, te necesito bien ahora más que nunca.

-      Por mi estúpida venganza estuve a punto de perderte para siempre, comprendes la rabia que me inunda por solo haber pensado en mí y en esa maldita idea de perseguir a Niccolo, no quiero imaginarme como… – solloza y queda sin palabras para terminar de expresar su dolor.

Le hago entender que no era conveniente que realice ningún esfuerzo ya que sus planes eran continuar con destruir los poderes oscuros de Irina, es imposible que pueda moverse en estos momentos ya habrá tiempo después para organizar todo nuevamente.

Han pasado ya dos días, Valentino ha sido dado de alta y ahora se encuentra en su casa recuperándose, me moría por ir a verlo sin embargo la orden de mi abuela ha sido de estricta imposición.

-      Te prometo que no voy a demorar mucho, necesito ver como esta, por favor déjame ir a verlo – ninguno de mis ruegos es escuchado.

-      Ya te dije que no puedes ir a ese lugar, no al menos que quieras destruir tu vida.

Por un lado comprendo su posición, pero ya basta de esconderme, soy su novia y quiero estar con él precisamente en estos momentos donde más me necesita.

-      Abuela, entiendo que ir a ese lugar no sea agradable para ti, debe ser duro recordar todo eso, tu misma lo dijiste cuando no te sentías lo suficiente segura al tener un romance con el abuelo de Valentino.

-      No empieces con eso, no vuelvas a mencionar esas cosas porque lo que antes sucedió fue muy diferente, no tiene nada que ver con esto.

-      No entiendo entonces porque lo dejaste entrar en nuestras vidas, ¿o es que acaso solo buscabas que él se haga cargo de tu manada?

Niega que esa sea la intención para con él, me pide un tiempo prudente para que él y yo al fin logremos disfrutar de nuestro amor sin ninguna restricción.

-      Cuando se recupere volverán a verse, no voy a negarle la entrada a Brokemond si eso te preocupa, además estos días que este fuera me dará tiempo para pensar y tú también vas a pensar mejor las cosas.

-      De verdad no entiendo que pretendes al decir que debo “pensar mejor las cosas” pero si te refieres a que busque algún pretexto para alejarme de él de una vez te aviso que no lo vas a conseguir, ni tu, ni nadie podrá hacerlo porque mi amor por él es más grande que cualquier imposición y aunque tenga que escaparme de aqui para estar con él lo voy a hacer.

Lo último que dije termina afectándola, su presión sube al límite y se recuesta en el sillón para aliviarse, tomo rápidamente su medicina y se las doy.

Soy una completa insensata, solo ocasione que casi suceda una desgracia.

-      Lo siento abuela, perdón por lo que dije, fue solo un arrebato, perdóname por favor.

La ayudo a reincorporarse y sostengo sus manos para calmarla.

-      Es mi culpa, yo he permitido esto – dice con debilidad.

-      No iré a ningún lugar, lo prometo – respondo con sinceridad y preocupada por su estado, esta vez cumpliré lo que ella diga, no puedo darle más sobresaltos, si supiera que la ocasión pasada desobedecí sus órdenes.

Mas días transcurren, no he podido verlo, pero hemos seguido en contacto todo este tiempo, no hay día que dejemos de hablar, aunque no pueda tenerlo físicamente sabe que mi corazón está ahí junto a él.

Dos semanas han pasado desde entonces y ya se acercan las vacaciones de invierno, la mejoría en él ha avanzado por completo, su herida esta ya totalmente cicatrizada, ha asistido estos últimos días a la escuela, más la preocupación porque se encuentre con Irina no ha desaparecido y es que después de advertírselo al fin había entrado en razón, no debíamos ponerla en alerta para que no sospeche lo que iba a venirle después. En cuanto a lo de Niccolo no hemos tenido más problema con ello, su cuerpo fue llevado y enterrado en Roma, según lo que Valentino me conto termino declarando que realizo el disparo en defensa propia, y con la incertidumbre de saber cómo sucedió en realidad su muerte no hubo más delito que perseguir ya que la causa aun seguía en términos desconocidos.

El sonido de su camioneta avanzando por la carretera hace estallar mi corazón, baja de esta y siento que ha sido como no verlo en años, me acerco a él para decirle cuanto lo he extrañado, al estar en sus brazos ya nada más importa, conversamos sobre todo lo que nos preocupa y es que aún nos queda algo por el cual batallar, me promete y le prometo estar juntos pese a cualquier adversidad.

-      No sabes cuantas ganas tenia de verte otra vez – repito en sus labios perdiéndome en el sabor de estos, lo abrazo con delicadeza para no hacerle daño y es que, aunque me diga que ya se encontraba bien tengo miedo de lastimarlo con mis abrazos de oso.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.