Catalina seis años
Hace poco había entrado Catalina a clases a muy a pesar de su padre, el sabe que talvez no pueda ir a clases por mucho tiempo ya que es un peligro para su pequeña hija especial, muy especial es una niña tan buena y alegre lo que tiene y tendrá que soportar no es nada bueno. Hoy ella tiene una prueba de lenguaje y comunicación es un poco difícil pero todos saben que su hija podrá hacerlo.
-Catalina, dime cuantas de estas letras forman mariposa, camión, auto, papá y mamá-La pequeña niña trago duro ya que su profesora había elegido las frases más complicadas para deletrearlas.
-Eme, a, ere, i, pe, o, ese y a, hacen mariposa.
-Bien y cual forma camión- Pregunto la profesora es una joven mujer con un pasado muy triste se les ve en los ojos además que su pobre hijo está en coma por un accidente automovilístico.
-Ese, a, ¿eme? , i…
-Que más-Pregunto la profesora arreglándose sus oscuros lentes.
-N-no lo sé profesora- respondió la pequeña jugando con su delantal escoses azul con blanco.
-Suelta aire – bueno Catalina ve a sentarte - Con pena y decepción de no haber podido lograr su prueba se colocó muy ordena en su pupitre en donde tenía su estuche rosa y su cuaderno rojo
-Niños pueden salir a recreo.- todos los niños de entre seis a siete años salieron del aula para ir a otra en donde habían juguetes tirados por doquier refalines de color azul, verde y rosado, columpios de color azul además que en estaba una capa de goma eva en donde habían variadas letras, números, animales y en el techo se encontraban aviones y nubes sobre puestas para que pareciera un día soleado, en una esquina se encontraba una chica leyendo Catalina camino hacia ella por curiosidad ya que ella todavía no sabe leer bien.
¨y la princesa le pidió un deseo de corazón poder ir con su amado, la bondadosa hechizera le dio un collar que cambia junto a la luna ella con dulce voz le coloco el collar a la princesa, hija mía ve con el solo te diré que te cuides del mal que habita en los hombres, la envidia los corromperá y no quiero eso para ti que te he cuidado desde que eras una bebe ¨
-Oye tu sabes leer.- Dijo Catalina a la peculiar chica de cabello azul hasta la cintura y ojos cafés grandes, su piel no era blanca pero tampoco morena, traía un vestido largo de un color azul lleno de pequeños diamantes brillando en sus manos llevaba un libro antiguo las hojas que sobre salían son amarillas .
-Si, aprendí hace mucho querida, mi madre me enseño antes de morir.- Le contesto con un rostro de tristeza puesto había amado mucho a su familia pero por desgracia ya todos habían muerto.
-Y ¿Por qué estabas leyendo ese cuento?- Pregunto curiosa Catalina ya que es raro ver a alguien leer que no sea un adulto como sus padres o maestros.
-No es un cuento es una leyenda de hace muchos años atrás donde lo único que existía eran los dioses y sus hijos.-Contesto con una sonrisa nostálgica por aquellos tiempos en que sus amigos todavía seguían vivos, en donde ella seguía viva.
Y ahora no hay dioses.- Dijo la pequeña mirando el libro ya que se hacía un poco familiar.
-Si hay querida solo que ahora, ellos están enojados con las criaturas que están aquí, ya que uno se llevó un gran tesoro y lo perdió.
-Y ¿Que perdió? talvez pueda ayudar, mi mami dice que soy muy inteligente.- Catalina sonrió y hecho la cabeza a un lado
-No, lo que se perdió nunca se podrá encontrar ya que fue hace millones de años atrás, antes de que tus abuelas hayan existido.
-y si hacemos una máquina del tiempo como la de vuelta al futuro y haci lo encontramos, con ello nadie estaría enojado con nadie y todos seriamos felices como yo.
-se dice que aparecerá una o un joven que encontrara lo perdido y los dioses dejaran de odiar a la humanidad ellos son de un humor cambiante picola°
-niños regresen a clases
-adiós niña azul
-adiós princesa picola
° Picola : pequeña