Mi mate es una bailarina

Capítulo 32

Jackson

Desperté con un horrible dolor de cabeza, un millón de pensamientos y sensaciones pasaron por mi cabeza. 

Salí a la sala y podía sentir su aroma, habían estado aquí. Un frío escalofriante recorrió mi cuerpo. Se habían ido al bosque solos, me transformé y salí corriendo hacia el bosque. Cuando logré localizarlos estaban los tres, el tal Abraham, también estaba transformado. Su lobo era ¡BLANCO! pensé que solo descendientes directos de la diosa luna podían tener ese color de pelaje. 

Una oleada de celos inundaron mi mente, pensar en que Luna prefiera a su hermano que acaba de conocer es desgarrador. 

Salté de los arbustos y me posicioné para atacar, cuando iba a dar el primer golpe un destello bajó de la luna y se posicionó al frente de Sol, Luna y su hermano. 

Las chispas se transformaron en solemnes damas, yo por inercia dí un salto hacia atrás. Una mujer se acercó a los chicos y empezó a hablar con ellos. Cuando terminaron de hablar las mujeres se volvieron a convertir en chispas y desaparecieron. Luna se volteó a mirarme y se colocó en medio de nosotros.

  -A la mansión ¡AHORA!-gritó en tono de alfa.

¡No puede ser! ¡ahora si que estoy muerto! Su hermano y yo intercambiamos miradas y nos devolvimos a la mansión con el rabo entre las patas. Ambos nos transformamos, pero él en cambio mío tenía la ropa intacta. Claro, se me olvidaba, ese es otro privilegio de ser descendiente directo de la diosa luna, vaya que envidia. Cuando entramos Luna cerró la puerta tras nuestro y se volteó hacia mí fulminándome con la mirada. ¿Y yo que hice?

-Pero ¿QUÉ CARAJOS TE PASA?-gritó, por lo que Sol salió corriendo del salón e inmediatamente entraron Jason y Ali, ¡NO SEAN VIDA AJENAS!

-Qué pasa, el ambiente se nota tenso-dijo Jason haciéndose el sabelotodo en el tema del amor y celos.

-Nooo...Mira estamos cantando villancicos-dije con sarcasmo. Ali y Luna parecían molestas una con la otra, porque ni siquiera se miraban.

-Y ¿qué pasa con ustedes dos?-pregunté tratando de cambiar el tema.

-No nada, solo que mi "mejor amiga" me dejó sola en esa patética clase de ballet-dijo fastidiada.

-¿Quién yo?-dijo Luna inocentemente.

Jason salió corriendo y regresó con un gran bowl de palomitas. Jason se sentó junto a Abraham seguido de mí, y empezamos a apreciar la pelea felina.

-No mira fulano-dijo señalando la ventana. A veces puede ser muy irritante.

-Ali debes entender que esas chicas son iguales a mí, tengo que saber más acerca de mi pasado-dijo Luna firmemente.

-Bueno, ¡si quieres estar con tus amiguitas pues bien!-exclamó.

-No Ali, no quie...- 

-No tienes que decir nada, mañana a primera hora Jason y yo nos devolvemos a Carolina del Norte-dijo caminando hacia Jason.

-¿Nos vamos?-

-Sí, nos iremos ahora-

-¡Bien si quieres irte hazlo pero espero que en el camino no llegues a arrepentirte!-gritó Luna estrellando la puerta-Y ustedes no se han salido con la suya, todavía hay cosas que arreglar-dijo saliendo del salón.

-Vaya, mujeres ¿no?-dije recostándome a la pared.

  -Claro, ni que lo digas-dijo Abraham sentándose a mi lado-Me puedes decir ¿porqué peleábamos?-exclamó rascándose la nuca.

-Creo que me puse celoso de ver a mi mate con otro chico-dije con tono de disculpas.

-Oye, a cualquiera le pasa. Desgraciadamente yo todavía no encuentro a mi mate-dijo bajando la cabeza. Nos pasamos hablando toda la noche, después de conocerlo no me resulta para nada repugnante. Solo me inquieta algo, la amistad de Luna y Alison que depende de un hilo. 

-¿Sabes que en un mes empieza la época de celo?-preguntó Abraham sacándome de mis pensamientos. 

¡MIERDA! lo había olvidado.

-Claro que lo sé-dije arrogante-solo que no se que hacer, será el mismo día del recital de ballet y de seguro Luna querrá que vaya. No podré abstenerme. ¿Qué haré?-dije frustrado.

-Tendrás que explicarle-dijo levantándose-un gusto conocerte Jackson-dijo saliendo. Corrí a la habitación de Luna. La encontré sentada en su cama leyendo un libro.

-¿Qué lees?-

-Ah solamente las 50 sombras de Grey-Sentí como mis ojos se salían de sus órbitas y en un arrebató agarré el libro y lo lancé por la ventana.

-¡Mi amor!!! ¡Ethan! ¡Elliot! ¡Christian! Jos...No José no me gusta-gritó asomándose a la ventana y haciendo ademán de desmayarse. ¡ASHH! pero que teatrera-Oye y a ti que te sucede-dijo levantándose de golpe.

-¿Al menos sabes de que se trata ese libro?-

-Claro solamente de Bondage, sadomasoquismo y sumisión-dijo poniendo cara inocente, yo por mi parte sentía que se me caía el alma al suelo-Además, ya tuve esa conversación con mis padres-dijo con tono de obviedad.

-Ah-fue lo único que pude decir.

-Y que era lo que me ibas a decir tan importante para detener mi lectura-dijo levantándose y caminando hacia su peinadora.




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