Si tú te mueres yo también me muero.
Después de que Matthew me comprara el hermoso libro, el primero que tengo en físico, ya que todos los que he leído son o de wattpad o están en pdf y los leo en mi teléfono y unos cuantos que tengo en la computadora, aunque si he leído libros en físico pero solo prestados, ni uno propio.
Ya habíamos pasado la mayoría de la tarde paseando en el centro comercial y en un parque que estaba cerca de ahí.
—¿Le puedo hacer una pregunta? —Me dijo Matth.
—Si dígame. —Le respondí enseguida.
—Me. —dijo riéndose.
—Hay que chistoso. Enserio, ¿me va a decir o no? —Le dije con sarcasmo.
—Hay que enojada, ni una broma aguanta. —Me contestó riéndose.
—Es que con usted no se puede hablar, yo intentando ya no pelear y usted que no ayuda. —Le dije encogiendome de hombros.
—Bueno está bien, perdón. La pregunta es sencilla. ¿Usted qué quiere seguir después de la preparatoria, en la universidad? —Me dijo sentándose en el columpio doble.
—Pues la verdad, quiero seguir medicina. Y ¿usted? —Le dije sentándome en el columpio en donde él estaba. Así nos empezamos a mover.
—Pues quiero seguir agronomía o arquitectura. —Dijo viéndome a los ojos.
—Me alegra mucho. ¿Y ya envió su solicitud a las universidades a las que quiere entrar? —Le pregunté mientras me reía por lo que estábamos haciendo.
—Si ya, ahora solo falta que las respondan y ¿usted? —Me respondió mientras subía la velocidad del columpio.
—Si ya, aunque estoy igual que usted solo falta que la respondan y ojalá que me acepten en la que quiero, si no me muero, pues solo envié solicitud a una universidad. —Dije, ya que la verdad estaba muy preocupada por no ser aceptada.
—Va a ver que si la aceptan y no diga eso de que se muere, todavía no me puede dejar viudo antes de casarnos. —Me dijo haciendo un puchero.
—Es una forma de decir, no se lo tome tan literal. —Le dije riendo ya que era un poco dramático.
—Más le vale porque usted que se llega a morir y yo que me muero con usted recuérdelo. —Me dijo enseguida.
—Lo mismo digo si usted se muere yo también me muero. —Le respondí.
—Más le vale. —Dijo finalizando esa plática.
—Bueno ya vamos que tengo muchas tareas y espero acabarlas para poder descansar para mañana. Ya que con esto de que es nuestro último año nos dejan más tareas y proyectos para realizar. —le dije jalándolo y levantándolo del columpio. Después de eso él me abrazó pasando sus brazos por el cuello de atrás hacia delante. La verdad es mejor de como lo había leído y visto.
*****
Al llegar a mi casa lo invite a pasar pero su mamá lo llamó, en ese momento no sé qué le dijo lo único que sé es que se puso nervioso y se fue sin dar razones, aunque no le puse mucha importancia ya que él me dijo que estaba bien, entonces entre en mi casa súper emocionada ya que no puedo creer que hoy pasamos juntos un día entero y no como amigos si no como novios, el primer día como novios en el instituto, en el centro comercial y en el parque. Me empiezo a reír por la emoción.
Llegue a mi cuarto, me bañe y cambie para estar más cómoda y empezar mis tareas.
Pasado de las diez de la noche ya había terminado con toda la tarea, así que bajé para ver qué había de comer en la cocina, ya que mis papás ya se habían dormido.
Lo bueno es que encontré unos panqueques y les eche nutela y crema batida, listo subí a mi cuarto con los panqueques y un vaso de leche. Al llegar a mi cuarto vi que mi teléfono estaba vibrando y cuando lo alcance tenía cinco llamadas perdidas de Matth, lo bueno es que después de cinco segundos volvió a llamar.
—Hola, lo siento por no contestar, pero baje a la cocina y deje mi teléfono en mi cuarto, ¿Cómo está? —Dije agarrando mi teléfono, mientras partía un pedazo de panqueques.
—Bueno tranquila no se preocupe y si estoy bien gracias ¿y usted ya terminó su tarea? —Me respondió.
—Sí, acabo de terminar, por eso fui por algo de comer ya que no cene, porque quería terminar mis tareas antes. —Le dije metiéndome un pedazo de panqueque en la boca.
—Sabe que no me gusta que se descontrole con la comida porque se puede enfermar y yo no quiero que se enferme. —dijo con un tono de reproche y preocupación a la vez.
—Lo siento, es que la verdad no tenía hambre, aparte sabe que no quiero que los maestros tengan motivos para regañarme. —Le dije un poco apenada ya que siempre se preocupaba mucho por mí.
—Bueno está bien, pero por favor trate de comer en los horarios adecuados, porque si le llega a pasar algo sabe que yo me muero. —Me dijo más tranquilo. Tan lindo siempre desde que nos conocimos ha sido así conmigo y me encanta.
—Sí, se lo prometo. —Dije para dejarlo más tranquilo.
—Bueno más le vale. —Me respondió entre risas.
—Bueno. ¿Y para que me llamaba si se puede saber? —Le dije tomando un poco de leche.
—¿Que, ya no puedo llamar a mi novia para escuchar su voz? ¿Acaso es un delito? Si es así que me encarcelen porque me declaro culpable. —Cuando termine de escucharlo casi me ahogo de la risa.
—No sé cómo puede ser tan lindo, dramático y payaso a la vez. —Le dije entre risas
—Es un don princesa, mi mejor don. —dijo también riendo.
—Y eso me encanta. y ¿Ya terminó su tarea? —Le pregunté intentando calmar mi risa ya que no quiero despertar a mi familia.
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Editado: 16.01.2023