Capitulo 9: La peor decisión

Nicolás:

Mis padres salieron junto con mi hermana a una reunión de negocios, así que es el mejor momento para hacer una fiesta, no lo dudo ni un momento y llamo a mis amigos los cuales traen a sus amigos y a más gente, esta fue una fiesta enorme, la mejor oportunidad para conseguir chicas y poder emborracharme, en medio de la fiesta, puedo notar que dos chicos empiezan a pelear y uno de ellos es Josué, no lo puedo dejar solo así que me meto en la pelea, todo se salió de control, comencé a pegar al chico que pego a mi hermano, eso no lo podía permitir aunque no me guste los deportes, si hago ejercicio, le rompí la boca de un solo puñete, se comienza a meter más amigos en la pelea para defendernos y al instante todos estaban peleando, incluso las chicas, claro que sus peleas no son tan bruscas como la de los hombre, pero no se quedan atrás, no se cuál es la razón por la cual estaban pegando a Josué, no sé en que estará metido, conociéndolo se metió con la novia de ese chico y por eso comenzó la pelea, o algo así. Llega la policía, porque mis vecinos los llamaron al ver todo el desastre que se formó, la mayoría somos menores de edad, así que todos salieron corriendo de la casa, yo no tuve buena suerte y me llevaron a la cárcel, junto a Josué. 

- ¿En qué estás metido Josué? - le dije muy molesto.

- Ya me conoces, me metí con una chica, pero no sabía que era la novia de Matías, él es un animal y me comenzó a caer a puñetazos, traté de protegerme, hasta que llegaste tú y me salvaste- 

-Llama a tus padres y diles que nos vengan a sacar de aquí, que paguen nuestra fianza, y después les devuelvo la parte de mi fianza- le dije en un tono amenazante.

-Mis padres no están aquí, salieron a la misma junta de trabajo con tus padres- me reprochó

-Mierda!!, que vamos a hacer- 

-Llama a alguien que nos pueda sacar de aquí- me lo dijo con un tono más tranquilo

-Estoy pensado en alguien, pero no estoy seguro que nos venga a sacar, es mi única opción- 

-No importa, debemos salir de aquí como sea- 

Decido llamar a Anthonella, fue la única que me vino a la mente en estos momentos.

-Contesta¡¡- dije mientras tenía el celular en mi mano.

-Hola, que pasó- me dijo ella algo preocupada

-Necesito que me hagas un favor- 

-Dime que es y yo te ayudo- me dijo con un tono de duda.

-Estoy en la cárcel, con un amigo, necesito que nos saques de aquí, por favor- suelto la respiración al decir esto.

 -Voy para allá- su vos me tranquilizó mucho.

A los 15 minutos, llegó, pagó nuestra fianza, me miró con una cara de decepción.

Se acercó a mí y me dijo: - Pensé que eras diferente, pero veo que no- y se fue. 

Que le pasa a esta chica, ni siquiera me conoce y ya me está juzgando, aunque tenía razón, nunca debió pasar esto, nunca debí terminar en la cárcel por algo tan absurdo.

Corro para alcanzarla, mientras corro voy planeando lo que le voy a decir.

-Se que te decepcioné, y no me voy a justificar, lo admito y estoy dispuesto a que me regañes, pero solo quiero que nunca me dejes, no quiero alejarme de ti por errores que cometí, te llamé a ti porque eres en la única persona que confío y sé que estas dispuesta a apoyar sin importar la situación, y te agradezco por habernos sacado de la cárcel a Josué y a mí y ya eso es todo, espero que me perdones- le dije mientras agaché el rostro, mirando al piso. 

-No te voy a perdonar así de fácil Nicolás- dijo eso y se fue. 

Esta vez enserio compliqué mucho las cosas con ella, justo cuando pensé que podíamos ser algo, dudo mucho que me vaya a perdonar fácilmente....