Mi mejor casualidad

Capítulo 21: Sábado

Nicolás:

Hoy me desperté con mucho entusiasmo y ganas de trabajar y convertir de este día un día muy productivo, me levanto de mi cama tomo un lapicero y una libreta y empiezo a escribir.

Mmm que haré primero, para comenzar debo estar bien alimentado y para eso debo desayunar, asique lo primero que anoto en mi lista es preparar el desayuno, antes de que todos despierten arreglaré la casa, porque sinceramente está  un poco desordenada y cada vez que la veo así siento que la vena imaginaria de mi frente está apunto de explotar, y no puedo estar tranquilo si alrededor mío encuentro mucho desorden, asique, listo, anoto mi segunda actividad del día, arreglar la casa, sigo pensando en cual será la tercera actividad que formará parte de mi perfecta lista, me quedo por  unos 5 minutos pensativo y ya sé que haré, debo llamar a  Anthonella ,porque si no lo hago, su lado  tóxico empezará a apoderarse de ella, convirtiéndola, en la bestia más tóxica del planeta, sería como un sapito, inofensivo pero tiene un veneno letal, que solo lo utiliza en ocasiones estratégicas, así tal cual sería Anthonella.   

Tengo tres actividades importantes que hacer, al menos esas son solo por ahora, conforme vaya pasando el día seguirán aumentando mis actividades. Asique sin tardar más empiezo a realizar todo, bajo a la cocina, y preparo huevos revueltos, con jugo de naranja, y unas tostadas mixtas, como mi parte y el resto la guardo para cuando se despierten mis padres y mi hermana coman el desayuno, siguiendo con mi lista, debo arreglar la casa, pongo algo de música en un canal que encontré y me encanta, y manos  la obra, tomo la escoba y empiezo a barrer, lavo los platos, recojo todas las cosas que están tiradas por todo lado, cuando acabo me recuesto en el mueble muy satisfecho por la limpieza, subo a mi  cuarto en busca de mi celular, y veo que mi sapito tóxica me ha escrito 22 mensajes, y tengo 4 llamadas perdidas suyas, de seguro piensa que estoy de fiesta por el incidente de la ultima vez, pero no, hoy he sido un buen esperancito, y me he puesto a limpiar.

La llamo con mucho temor debido al buen sermón que recibiré de su parte, lleno de aire mis pulmones, tomo valentía, y hablo:

-Hola amor, ¿qué tal estas?

- ¿Qué cómo estoy? Pues estoy genial, deveras que me encanta que mi novio se olvide de que existo, que te cuesta llamar a preguntar si sigo viva, ponte y me atacaba un animal feroz, y te quedabas sin amorcito, aunque viéndolo desde otro punto de perspectiva diferente al mío, mmmm ya se, viéndolo desde el punto de vista de Carla, si Carla, la porrista que anda detrás de ti, ella estaría tan feliz, sería la mejor noticia que pudiera recibir, ya que tendría el camino libre para estar contigo. Y ¿Cómo estás? –

-Después de escuchar tu dulce voz, y de recibir los mejores tratos por parte de mi preciosa novia a la cual quiero mucho, estoy muy bien, gracias por preguntar -

- ¿Me perdonas? Imagina que tengo la cara del gato con botas. Perdón por tratarte así, pero que querías que pensara si no me escribes, te olvidas de mi-  

-  No lose, me has lastimado, estoy resentido, bye-

Antes que pudiera contestar colgue, mi modo víctima se ha activado. Me voy bailando y feliz, después de hacerme la víctima, sé que me va a escribir disculpándose, pero no contestaré, soy todo un malote.

Mis padres ya se despertaron y decidimos ir a visitar  a nuestra abuela, ya que hay una fiesta familiar e irán todos mis primos y mis tías, y se que harán las típicas preguntas sobre nuestras novias, pero aun así viendo los pro y conta de esta fiesta, decido ir, y así no quisiera ir mi madre me obligaría, para ella son muy importantes las fiestas familiares, me pongo un pantalón negro, junto con una camiseta estampada blanca, y  unos tenis, y no podía faltar mi chamarra jean. Estoy listo, al igual que Felicity, bajamos al garaje con nuestros padres, nos subimos al carro y nos fuimos, la casa de nuestra abuela no queda muy lejos, y no nos demoramos en llegar, apenas entro y paso la puerta veo como mis primos vienen muy entusiastas a saludarnos, Felicity se va donde nuestra prima Brigitte que son contemporáneas en la edad, y tienen algunos gustos parecidos.

Mientras disfrutábamos del tiempo entre primos, llega nuestro tío Wilbur, y nos ofrece alcohol, él es el único tío soltero y sin compromiso, él es libre como el viento, y tiene alma de joven, nosotros aceptamos sin dudar el ofrecimiento de nuestro tío, claro que no podíamos estar a la vista de nuestros padres, porque nos fulminarían no solo con la vista, sino mas bien con todo aquello que encontraran a su paso.

Nos escabullimos, y fuimos al patio, nos sentamos en unas bancas de madera, y empezamos a tomar viendo las estrellas, y es así como fomentamos la relación entre primos, siempre hemos tenido unos lazos muy fuertes que nos conectan. Acabamos de tomar, y regresamos a la fiesta, empezamos a bailar con nuestras primas, y veo que Felicity está muy feliz bailando con Matías.

¡MATÍAS!, a que rato llego él, bueno ya es parte de la familia, pero no había notado su presencia, los dejaré y no seré mal tercio porque está con mi hermana y se ve muy feliz, y no quisiera dañar ese momento, no soy fan número uno de esa rara conexión entre los dos, pero ya que se le va a hacer.

Fui por Brigitte y empezamos a bailar, tuvimos una conversación amena, ella sabía que estaba pasado de copas debido al olor que emanaba mi cuerpo, pero lo ignoró y no me delato, porque no caería solo yo, sino caeríamos todos. Después de varias bromas y bailes entre todos, tuvimos que irnos, ya se nos hizo tarde y no me arriesgaría a beber más, porque todos nos descubrirían.

En el camino, fui molestando a Felicity, debido a la felicidad que daba anotar cuando estaba con Matías, ella se sonrojó y  quería esconder su cara cubriéndose con su bolso, se parece mucho a Anthonella,  y eso me recuerda que no le avise que saldría y debe estar furiosa pensando que estaba en una fiesta llena de chicas, en la cual si estuve pero eran mis primas y era una fiesta familiar, no como las que iba a menudo con Matías, no ya no, ese es nuestro pasado ahora Matías y yo decidimos cambiar, él por mi hermana, y  yo  por Anthonella.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.