Los meses pasaban y los mensajes llegaban cada día sin falta, solo que ahora lo hacían desde otro número diferente, puesto que al anterior lo habíamos bloqueado. James había ido a ver a su contacto, pero tampoco pudo localizarlo. Así que estábamos como al principio. No podía cambiar mi número por que eso significaba que tendría que explicarles a mis padres el porque del cambio y no quería preocuparlos. Mi novio y yo tomamos la decisión de ignorar los mensajes.
Ya llevábamos ocho meses de novios, y cada día que pasaba nos uníamos más.
Aquel día, nos la pasamos tirados en el sillón viendo películas, como era sábado y no teníamos trabajo acumulado, nos la pasamos haciendo fiaca en casa.
Mientras pasaban los créditos de la película "Diario de una pasión", me levanté para preparar la merienda.
Prendí la cafetera y durante la espera, comencé a untar unas tostadas con mermelada.
Cuando todo estuvo listo, volví con la bandeja al salón, deposité la bandeja en la mesa y le tendi una de las tazas a mi novio mientras tomaba la mía junto con una tosatada y me sentaba a su lado.
-Prometene que jamás me vas a olvidar. -Suelta mi novio sin dejar de mirarme.
-¿Lo dices por Allie?
-La verdad... Si. -Contesta abrazándome.
-No me voy a olvidar de ti. -Respondo- Definitivamente voy a tener que dejar de ver estas clases de películas cuando esté contigo.
-Pues entonces veamos de acción. -Dice tomando el control y buscando alguna de su gusto.
Cuando terminamos de merendar, comenzamos a acomodar todo pues quella noche vendrían los chicos a cenar.
Al terminar de acomodar, fui hasta mi vestidor y busqué algo sencillo que ponerme pues no quería estar descolocada.
Me metí en la ducha y me demoré bajo el agua durante un rato.
Entré al cuarto envuelta en toallas. Mientras me ponía mi ropa interior de encaje negro de moños rosas, James entró al cuarto para comenzar a prepararse.
-¡Estás hermosa con ese conjunto! -Exclamó mirándome de arriba abajo con su sonrisa sexy.
-Gracias. -El comentario me había hecho ruborizar.
-Es increíble que aún te ruborices. -Era evidente que lo disfrutaba.
Me acerque a él y después de besarlo me aparté solo un poco.
-Pero me gusta. -Al decir esto él comenzó a sonreír.
Luego de esto volví a la cama a seguirme vistiendo.
A las ocho pm. Comenzaron a caer los chicos. El último en caer fue Víctor.
-Hola, buenas noches. -Saludó mientras cerraba la puerta del departamento.
Luego de saludarse con besos en la mejilla y apretones de manos, nos pusimos a conversar hasta que estuviese lista la cena.
-Traje el melómano para después de la cena. -Clara sacó de una bolsa una caja.
-Huuuuyyy, esto va a estar bueno. ¿chicos contra chicas?
Mientras Matt decía esto se restregaba las manos.
-No podemos perder. -Nos dijo su novia mirándonos a ambas.
-¿Eso es un si? -preguntó Matt.
Las tres nos miramos y asentimos.
-Esto va a estar bueno. -Comentó mi novio. A veces podía ser muy competitivo.
Una vez que estuvo lista la cena, los siete nos sentamos a la mesa a comer.
-Mmm este carre de cerdo esta genial. -Comentó Clara- Después pasame la receta Lau.
-Dale, antes de que te vayas recuerdame que te la dé.
-¿Cómo vienen con el tema de los mensajes? -preguntó Dylan- ¿Aún les siguen llegando?
Ya todos sabían lo que estaba ocurriendo.
-Si, con Laura decidimos no prestarle más atención. Mandé a rastrear los números, pero fue imposible.
-Tengan cuidado, no vaya a ser que sea algún loco y les haga algún daño. -Clara se mostraba preocupada.
-Claro que lo tendremos. -Le contesté- Y ahora cambiando de tema a algo más importante... ¿Cómo vienen con los preparativos para la boda?
Dentro de cinco meses Matt y Victoria se casarían.
-Bien, ya está todo listo. -Contestó Vicky, así la llamábamos- Y a propósito de eso... Con Matt queríamos preguntarles si les gustaría ser mis damas de honor.
Todas nos pusimos a chillar de la emoción a lo que ellos tuvieron que taparse los oídos.
-Por supuesto que si. -Contesté emocionada.
-Cuenta conmigo. -Contestó Clara.
-Gracias chicas. -Dijo Vicky emocionada- Disculpen que les avise casi a último momento.
-No pasa nada, de que color tenemos que ir, así buscamos las dos el mismo tipo de vestido. -Le dije con una sonrisa.
-Pensé en el color Azul. Va a quedar lindo. De hecho los detalles son en azul Francia.
-Perfecto, en la semana coordinamos y nos ponemos manos a la obra. -Dijo Clara.
-Creo que vamos a tener que trabajar horas extra, por que las tarjetas de crédito van a explotar este mes. -Comentó Dylan.
Todos comenzamos a reír.
Al terminar de cenar, Clara y yo nos dedicamos a los trastos, mientras yo lavaba, ella secaba. James nos siguió a la cocina y se puso a preparar café.
Cuando todo estuvo listo y servido, nos sentamos en la mesa nuevamente, solo que esta vez todos los hombres de un lado de la mesa, y nosotras las mujeres del otro. Clara nos explicó las reglas del juego y comenzamos.
Íbamos ganado nosotras. Al parecer, tenían problemas para completar las canciones. Al final, terminamos ganando. Como a James y a Victor no les gusta perder, les concedimos la revancha.
Las horas corrieron y cuando terminamos era al rededor de las cinco am. Los chicos se fueron, y ambos quedamos solos en el departamento.
Luego de cerrar todo, apagamos las luces y nos fuimos a dormir.
Estando acostados, como aún no teníamos sueño, James aprendió la tele y buscó alguna peli.
-Así que... -Le digo sentándome en la cama.
-Así que ¿Qué? -preguntó James sin comprender.
-Por lo que veo no te gusta perder. -Le digo con una sonrisa picara.
-Ya vas a ver vos. -Dice serio.
-¿O sino qué? -lo desafío.
Fue tan rápido como se movió, que en tan solo en fracción de segundos James se encontraba encima mío dándome besos por todo el rostro, eso me provocaba risas como si me estuviese haciendo cosquillas.
Editado: 04.01.2020