Conociendonos

Mi nombre es Natasha soy una mujer muy trabajadora y también sentimental, tengo 30 años y hasta el momento no tengo hijos, ya que me prometí que hasta no estar bien en todos los aspectos de mi vida prefería no tenerlos, pero creo que estoy lista y por eso me dirijo a un orfanato a las afueras de dónde vivo para intentar encontrar a un chico al cual adoptar.

En el orfanato

-Chicos todos adentro es momento de almorzar.

-Ya vamos señorita.

Era un orfanato de solo varones, estos venían de otros hogares o llegaban allí después de ser abandonados de bebés.

No tenían nombres pues se pensaba que era la forma más rápida de conectar entre un padre y un hijo por lo que siempre se les hablaba de forma general.

-Muy bien pasen todos a la mesa, hoy vendrán unas personas que quieren adoptar así que comportense, si tienen suerte hoy podrían encontrar su próxima familia.

-Si señora.

1 hora después

-Bienvenidos, como sabrán en este lugar tenemos niños desde los 4 hasta los 17 años, les pedimos tengan paciencia ya que no todos están acostumbrados aún a esto o han sufrido desilusiones antes y se alejan de las personas. -En verdad espero que aunque sea uno logré conectar con algún chico, ya van meses en que ninguno es adoptado- Sin más que decir por favor pasen a conocer a los chicos.

Pase un tiempo observando por ahí sin acercarme a ninguno en específico, cuando sentí que alguien me observaba, era un chico de aproximadamente 12 años diría yo, mirando por la ventana con expresión triste.

-Oiga señorita podría hablarme del chico que está en la ventana por favor. -Por alguna razón él me había intrigado, mientras los otros estaban jugando e intentado que les pusieran atención él había decidido quedarse dentro- Parece que está triste.

-Si claro, él perdió a sus padres en un accidente de tránsito cuando aún era un bebé, tiene 11 años y me temo que ha estado pasando de un orfanato a otro e incluso hogares durante toda su vida, como mencioné algunos aquí han vivido varias desilusiones y por eso prefieren alejarse, llegó aquí hace un mes.

-¿Cree usted que sea buena idea que me acerque?

-Bueno nunca se sabe cómo van a reaccionar los chicos, pero podría intentarlo.

Decidí acercarme a ese chico blanco, de cabello corto color café claro y ojos oscuros, no estaba muy segura de lo que iba a decir pero quería intentar conocerlo.

-Hola mi nombre es Natasha, ¿puedo sentarme aquí en la ventana también?

-Mmm, si está bien.

-Puedo notar porque te gusta este lugar, puedes observar casi todo desde aquí.

-Si, tiene una gran vista, prefiero analizar bien antes de hacer algo, no quiero volverme a ilusionar para nada. -Se me empezaron a aguar los ojos y no pude evitar que una lágrima saliera- Lo siento señora, me puse algo sentimental.

-No te preocupes pequeño, mira aquí tengo un pañuelo, la verdad yo también prefiero analizar primero antes de tomar una decisión. Dime, ¿te gustaría jugar algo para pasar el rato?

-Si eso me agradaría.

Pasamos unos cuantos minutos jugando cartas y conociéndonos, y ella me empezaba a agradar, había sido paciente y teníamos una charla amena, pero sonó el timbre que indicaba que el tiempo se había acabado y los adultos tenían que irse.

-Hasta luego Natasha espero verte de nuevo.

-Hasta luego, y puedes llamarme Nat, trataré de venir seguido si no te molesta.

-Me gustaría que vinieras pronto, muchas gracias por pasar la tarde conmigo Nat.

-Señorita, me gustaría saber que pasos hay que seguir si quisiera adoptarlo, se que es muy pronto e imagino que primero tienen un tiempo o algo así antes de tomar una decisión como esa, pero me gustaría adelantar algo si es posible.

-Bueno nosotros recomendamos que primero convivan por lo menos un mes antes de tomar la decisión, pero podríamos adelantar las revisiones del lugar de residencia, extractos bancarios y todo lo que es de papeleo para que cuando se tome la decisión esa parte esté lista y así agilizar el trámite.

-Eso estaría perfecto, me gustaría hacerlo, en verdad me agrado ese muchacho y me gustaría darle un hogar.

-Perfecto si le parece entonces mañana mismo estaríamos haciendo la revisión del lugar y pediríamos los estados de cuenta para comenzar con eso. -No lo puedo creer, esto enserio está pasando, alguien pudo conectar con uno de los chicos y esta pensando desde ya en llevárselo, esto si que es un milagro, sobre todo con él, puede que solo lleve un mes en este lugar pero desde un principio note que era un niño difícil- Sin embargo recuerde que la convivencia de un mes es obligatoria.

-No hay problema con eso, si no le molesta me gustaría venir cada tercer día y ya que estamos en época de fiestas, si es posible me gustaría sacarlo algún día a dar un paseo al centro comercial.

-Eso sería magnífico y seguro que a él le encantaría.

Dos semanas después

-Hola, ¿cómo estás?, me dieron permiso para llevarte al centro comercial por unas horas, ¿te gustaría ir?

-¿Estas bromeando?, eso me encantaría.

-Entonces vamos al auto.

En el centro comercial

-Dime que quieres de navidad.

-Me gustaría algo para escuchar música.

-Mmm creo que el orfanato no permite aparatos electrónicos, déjame pregunto para que no tengamos problemas, pero por sí algo piensa en otra cosa que te gustaría.

-Esta bien.

Después de unos minutos

-Si entiendo, ok.

-¿Qué te dijeron?

-Definitivamente no te puedo comprar nada electrónico, así que dime qué otra cosa te gustaría de navidad.

-Que me adoptes. -Dije entre susurros porque no quería presionar-

-Mmm, no te escuché, ¿puedes repetirlo por favor? -En realidad si había escuchado pero todavía faltaban 2 semanas antes de que me dejarán hacerlo oficial, y la verdad no quería ilusionarlo por sí algo llegaba a salir mal- Si todavía necesitas tiempo puedes pensarlo mientras comemos un helado.