En el auto
-Bueno ya llegamos, pero antes de bajar vamos a aclarar las reglas y el itinerario.
Voy a dejar que vayas suelto pero siempre tienes que estar donde pueda verte, como ya es tarde vamos a comprar lo esencial hoy, lo que son sábanas, cobijas, etcétera y para el escritorio una lámpara, organizador de útiles y uno que otro adorno que quieras poner en el, o en otra parte de la habitación y luego iremos a la zona de comidas por algo de cenar, ¿entendido?
-Si señora.
-Muy bien, ya puedes bajar.
Dentro del centro comercial
-Manasés no te alejes, ya estamos cerca del local donde vamos a comprar las cosas.
-¿Podemos ir primero a las maquinitas?
-No, ya te dije lo que vamos a hacer hoy, otro día que vengamos si tenemos tiempo podemos ir.
-Pero mamá, en serio quiero ir, por favor.
-Ya te dije que no Manasés. -Le dije de forma firme pero sin alzar la voz- Hoy está muy tarde y tenemos compras por hacer.
-Pero...pe...pe...pero.
-No lo volveré a decir, ahora o vas tu solo hacia la tienda o pierdes el privilegio de ir caminando tu solo.
-Esta bien. -Agache la cabeza y me dirigí a la tienda que había indicado, en serio quería jugar en las maquinitas porque nunca lo había hecho, pero no quería que se enojara-
-Cariño entiendo que quieras ir y jugar, pero ya son más de las 5 de la tarde y mientras hacemos las compras se nos hace más tarde, si quieres podemos venir pasado mañana más temprano para que podamos pasar el tiempo en las maquinitas.
-Si mami, eso suena bien.
-Eso es, vamos a la sección de dormitorio para que elijas las cosas.
-Ok.
Después de 40 minutos
-Bueno creo que tenemos todo, ¿estás seguro de que es lo que quieres llevar?
-Si señora.
-Muy bien, voy a ir a pagar para que vayamos a comer, si quieres mientras estoy en la caja puedes revisar la sección de juguetes que está cerca, y si ves alguno que te guste lo traes y te lo compro.
-¿En serio?, siiii.
-Pero por favor no te alejes de mi vista, si te estás yendo a donde no te alcance a ver levanta una mano para que sepa donde estás.
-Si señora.
Unos minutos después
-Mmm, ya no lo veo, hace un instante estaba mirando ese estante, tal vez vio uno que le gustó que estaba más alejado y se le olvidó levantar la mano o le dió pena-
-En serio quería hacer lo que me pidió, pero tenía tantas ganas de jugar en las maquinitas que no pude resistir aunque sea ir y mirar porque no tenía dinero para jugar-
-¡Manasés!, ¿dónde estás cariño? -No puedo creerlo que irresponsable fui, como pude creer que era buena idea dejarlo alejarse mientras mi atención estaba en la fila y pagar las cosas, ya había terminado de pagar y tenia las cosas en las bolsas así que me dispuse a ir a buscarlo-
Primero mire en la sección de juguetes pero no estaba por ahí, eso empezó a preocuparme más, se podía perder en el centro comercial ya que era bastante grande, pero al recordar lo mucho que quería ir a las maquinitas decidí que esa seria mi siguiente parada, afortunadamente estaban cerca de la tienda y alcance a verlo parado observando a otras personas mientras jugaban.
-¡Manasés!, en que estabas pensando jovencito, como se te ocurre salir del local en el que estábamos para venir y mirar, te dije que hoy no podíamos venir a jugar y que lo haríamos pasado mañana, además de que tenías permitido ir solo a la sección de juguetes de la tienda.
-Yo solo quería venir a ver, es que nunca he tenido la posibilidad de jugar en ellas.
-Eso no es una excusa, ya te había dicho que no y aún así decidiste desobedecer, ahora vamos al auto y dame tu mano.
-Pero tu habías dicho que íbamos a ir a comer después de las compras, además ya soy un niño grande y puedo ir yo solo.
-Entonces comportate como tal y no me cuestiones, que estoy empezando a pensar si dejamos el castigo solo hasta acá o lo seguimos en casa.
-No es justo, no hice nada malo, solo vine a mirar como los otros jugaban.
-¿Qué no hiciste nada malo?, te alejaste de mi vista cuando fue lo principal que te dije que no hicieras, te di la libertad de ir suelto además de darte la oportunidad para alejarte a una distancia moderada para que eligieras un juguete y que yo lo compraría, y en vez de seguir las indicaciones que te di saliste de la tienda y viniste a un lugar al que claramente te dije que no pasaríamos hoy, me preocupaste mucho, que tal te hubieras perdido. -Le decía en un tono severo después de haberme agachado a su estatura y verlo directamente a la cara- Ahora tienes dos opciones o me das tu mano o yo te tomaré de la muñeca y te llevaré así hasta el auto.
-¡Nooo!, me niego a que me lleves como si fuera un niño pequeño, si quieres hacerlo primero tendrás que atraparme. -Ya estaba en terreno peligroso y probablemente me estaba metiendo en más problemas con esto, pero no quería que las personas me vieran de su mano caminando, tengo 11 años y eso sería muy vergonzoso así que empecé a correr-
-MANASÉS VEN AQUÍ EN ESTE INSTANTE, NO ESTOY BROMEANDO JOVENCITO, SI NO VUELVES AHORA NO TE GUSTARAN LAS CONSECUENCIAS QUE TENDRÁS. -Este niño empezaba a colmar mi paciencia, no solo había desobedecido todo lo que le había dicho sino que ahora quería que lo persiguiera, sabía que esto de ser madre sería difícil pero no pensé tener que pasar por esto en el primer día- MANASÉS HABLO ENSERIO ES MEJOR QUE VUELVAS SI NO QUIERES QUE LAS COSAS EMPEOREN.
Ya que no quería hacer caso y se empeñaba por alguna razón en correr en círculos incitandome a que fuera a atraparlo no me quedo de otra, le pedí a un chico del sector de juegos que me cuidara las bolsas y corrí tras él.
-Te atrapé, ahora tu y yo iremos al auto y tendremos una charla sobre el comportamiento que estás teniendo. -Le decía mientras agarraba su muñeca-