Mi motivo de olvido (spanking parental)

Reunión familiar

Llevaba más de una semana castigado, y la verdad si llegaba a ser un poco molesto que mamá me siguiera a todo lado, pero también veía como hacerlo parecía mantenerla tranquila, es como si eso le permitiera autoconvencerse de que nada malo habia pasado, la había preocupado mucho y aún me sentía culpable por eso y en cierto modo, tampoco es que las cosas hubieran cambiado demasiado, solo tenía que mantenerme en su oficina ya fuera en casa o la clínica, ya que es donde ella suele estar, y si íbamos a algún lugar a comprar algo no me soltaba la mano, lo único es que no había podido ir al parque con unos compañeros que me habían invitado el fin de semana, y tampoco ir con mis abuelos al centro comercial, al fin de cuentas mamá era buena cumpliendo al pie de la letra lo que dictaminaba, pero esto me había ayudado a conocerla aún más, le conocía nuevos gestos, gustos y expresiones, pero la que tenía hoy no se la terminaba de entender.

En llamada

-Lo entiendo mamá, pero en serio, ¿es necesario que vaya?

-Cielo, yo sé que no te gustan estas reuniones, pero míralo por el otro lado, así Manasés podrá conocer al resto de la familia y también chicos de su edad.

-Susurrando- Y eso es justo lo que me asusta.

-¿Dijiste algo cielo?

-Mmmm, no ma, no te preocupes, si es tan importante para ti ahí estaremos.

-Muchas gracias cielo, nos vemos el sábado entonces.

-Hasta el sábado ma.

Fin de la llamada

-Mami, ¿qué tienes?

-Nada cariño, el sábado iremos donde tus abuelos, van a hacer una reunión familiar.

-¿Y eso es malo?

-Claro que no peque, solo que no me suelen gustar, eso es todo, pero así podrás conocer al resto de la familia y divertirte un rato.

-Si es por mi no te preocupes, podemos quedarnos en casa si prefieres.

-Ya le dije a tu abuela que vamos mi niño, y puede que no esté tan mal. -Además no creo que lo vayan a invitar a él así que debería estar bien-

Pasó el día y yo no podía sacarme de la cabeza eso, no quería verlo ni en pintura, y aunque dudaba que fuera a estar ahí, nunca nada es totalmente seguro.

El sábado

-¿Estás listo Manasés?

-Si mami, solo guardo mi MP3. -Esto la tenía más estresada de lo que creí, está mañana incluso había dejado de supervisar todo lo que hacía, y se sentía bien dejar de tener su mirada encima mío, pero eso solo significaba que esa reunión tenía algo más que el solo hecho que no le gustará-

-Muy bien peque, al auto y vámonos.

-Si ma.

El viaje fue silencioso, parecía tensa, es como si algo le angustiara pero no sabía que era, y tampoco me atrevía a preguntar.

-Hemos llegado, puedes bajar Manasés.

-Hay muchos autos.

-Tienes razón, parece que tus abuelos se inspiraron en esta reunión.

Pasamos y ya habían bastantes familiares, entre tíos, primos, etc. Yo era hija única así que todos eran técnicamente primos de Manasés, le presente a las personas y le dije que podía ir a jugar mientras no se alejara de donde yo estaba, así que eso hizo.

-Que bueno que vinieran mi cielo.

-Te dije que vendriamos ma, además sabes que me gusta el asado que hace papá, y si que se inspiraron al invitar gente está vez.

-Si cariño, al decirles que vinieran a conocer a tu niño fue relativamente fácil lograr encontrar una fecha para que coincidieran las dos partes de la familia.

-Papá, no debiste decir eso, que tal no hubiéramos podido venir.

-Bueno, algo nos hubiéramos inventado.

-En fin, igual no vamos a quedarnos mucho, ya sabes que no me siento cómoda con esto.

-Lo sabemos mi cielo, no te preocupes.

-Ven Manasés, te echo bloqueador y sigues jugando.

-Esta bien mami.

-Eso es, estás listo, ¿quieres algo mientras está el almuerzo?

-Agua por favor.

-Esta bien, ya te traigo un vaso.

Fui a la cocina, le serví el agua y le lleve el vaso, por ahora todo iba bien, aunque seguía sin sentirme cómoda con toda esta situación, estás reuniones no eran de mi mayor agrado.

-Mira peque, aquí está tu vaso de agua.

-Gracias mami, ¿estás bien?

-Si peque, no te preocupes, ve y diviértete.

Pasó el rato jugando con sus primos hasta que nos sirvieron el almuerzo, y si que estaba delicioso el asado, se comió todo lo que le sirvieron y se sentó a mi lado a reposar.

-¿Quieres postre peque?

-Mmm, si mami.

-Bueno, creo haber visto unas gelatinas en la cocina, te traeré una.

-Gracias.

-Ya vuelvo peque.

Fui a la cocina y tome una gelatina de limón, y estaba a punto de devolverme cuando escuché su voz.

-Hola, perdón la tardanza, se nos hizo tarde, espero no se hayan comido todo.

-Tranquilo, pasa, tu tío les guardo por si venían.

-No, no, no, esto no puede ser, el no debería estar aquí, no otra vez-

-¿Mamá? -Se me hizo raro que se demorara tanto en salir, por lo que entre a la cocina y la encontré como si estuviera congelada, la mirada fija hacia la puerta, pero el resto del cuerpo totalmente estático- Mami, ¿que pasa?

-Mmm, eh, nada peque, ten tu gelatina, yo tengo que ir al baño.

-Esta bien. -Salio corriendo y me quedé solo en la cocina hasta que llegó mi abu Kat con otras personas-

-Hola Manasés, ¿qué haces por aquí solo? ¿Dónde está tu mami?

-Se fue corriendo al baño.

-Ay mi niña, siempre comiendo demás cuando tu abuelo hace asado.

-Ooooo, así que tú eres el hijo de Natasha, un placer conocerte, yo soy un primo de tu mami, aunque a decir verdad hace mucho que no nos vemos.

-Un gusto.

-Bueno si no les importa, tengo hambre así que con permiso.

-Cariño, ¿sabes dónde está Nat?

-Yo se abu Rodri.

-Dime pequeño, ¿a dónde fue?

-Corrió al baño.

-Ya veo, voy a ir a buscarla. -Subí y empecé a escuchar el llanto, se había encerrado en uno de los baños y simplemente lloraba- Hija, sal por favor.



#1370 en Otros

En el texto hay: madre, adolecentes, adopcion

Editado: 20.05.2024

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