Mi muerte eres tú

Capítulo XIV-segunda parte

 

Trepe el muro gracias a unas plantas enredaderas que crecian, el problema fue cuando cai, el muro era demasiado alto y el caer no fue nada sencillo.
 


 

Me coloque bien la capucha y los lentes y poco a poco me fui acercando al velorio.
 


 

Nadie vestia de negro, obviamente por que a mi madre no le gustaba el color negro, todos vestian de colores blanco a rosa claro. Alli se encontraban mis amigos y mis tios, los que odian a padre, mis primos, a los cuales no les agrado, mi padre que se encontraba ausente, parecia perdido con la mirada fija en el cajon.
 


 

Por un momento quise dar marcha atrás, estaba detras de un arbol y practicamente me despedia de mi madre, pero...¿despues que? ¿Que haría sola? ¿Queria abrazar a mi padre?¿queria volver y arruinar el plan de Kate? ¿Que...?
 


 

Aspire el aire frio, muy comun de los cementerios, camine decidida hacía mi padre. En cuanto me acercaba la gente me miraba mal, llamaron a los guardias.
 


 

_A-Angelica_la voz de Gabriel me hizo parar en seco_eres tu_me abrazo, acaso el me reconocio y no los otros.
 


 

_HIJA_mi padre cambio su rostro de tristeza por felicidad, me abrazo y todos comenzaron a murmurar.
 


 

_pap-pá...mamá...ella_las emociones comenzaron a surgir y llore en el hombro de papá, el acarició mi cabeza y me llevo hacia mi...madre.
 


 

Me quite los anteojos pero no la capucha, mi padre apoyaba su cabeza en la mia y me abrazaba, me reconfortaba mientras que lloraba y miraba el cajon blanco de madera con una cruz de plata en el centro.
 


 

Gabriel se coloco unos anteojos para que no lo vieran llorar, mis amigos apenas y me observaron, ellos estaban sonriendome al otro lado y tenian los ojos rojos.
 


 

No hicieron escandalo por mi llegada, todos siguieron con el funeral.
 


 

El padre hablo y dijo unas palabras de la biblia, algunos hablaron para recordar a mi madre, arrojamos rosas blancas y yo...me arroje sin pensarlo sobre el cajon, no se porque lo hice, queria que mi madre volviera, así sea por unos segundos, tenia rabia por que la vida era injusta y siempre golpeaba de la misma forma...ya lo habia perdido todo una vez...ahora volveria a pasar...otra vez.
 


 

Mi padre me dejó hacerlo, las demas personas lloraron aún más en su lugar, el padre trato de decirme palabras alegres para que dejara que enterraran a mi madre y siguieramos...pero me aferre más al pedazo de madera que escondia a mi madre.
 


 

Gabriel se acerco y me coloco una carta en el bolsillo de la campera.
Me miro a los ojos y acaricio mi mejilla, en ese momento un mechon de mi cabello, ahora rubio, se escapó me miro extraño y luego me sonrío. Me colocó mejor la capucha y me susurro.
 


 

_son...las últimas palabras de Ji...la Señora, leelas cuando estes sola_le sonreí, si alguien amaba a mi madre tanto como yo, era él.
 


 

_debes dejarla ir..._me dijo, yo negue con la cabeza_...pero ella no te dejara a ti, créeme_colocó sus manos sobre las mias y las alejo del cajón. Sus ojos estaban rojos de tanto llorar, tenia ojeras...pero sus ojos marrones estaban calmados, parecia esperanza.
 


 

El funeral siguió, me quede al lado de Gabriel.
 


 

Las demás personas me miraban con recelo, vi a mi padre y a un guardia hablando, le pedia que trajeran más hombres que la seguridas debia seguirnos hasta llegar a casa.
 


 

_no quiere que te alejen de su lado_susurro Gabriel_esta preocupado_dijo mientras miraba a mi padre.
 


 

La tierra comenzo a tapar el cajon, parecia una eternidad, arrugue la carta en mi bolsillo y quise volver al ultimo dia en que la vi de pie...deseo volver a ese dia, queria que fuera un sueño, cuando ella me adopto me dijo que ahora todo sería felicidad...lo que no dijo era que la felicidad que me prometió no hiba a durar tanto, por lo menos no lo suficiente para que fuera fuerte ante las adversidades.
 


 

Voltee a ver a las personas que ahora se despedian de mi madre y volvian a sus autos, poco a poco se hiban de alli.
Mi padre llegó a mi lado y le pidio a Gabriel que los siguiera en el auto de atrás, me tomo por los hombros y nos subimos a la limusina.
 


 

_iremos a casa...Gabriel te hablo seguramente de unos papeles que dejó tu madre_negué con la cabeza. 
 


 

Mi padre estaba palido, tembloroso, aún no se recuperaba del todo...mi madre le haria falta.
 


 

_bueno...hablaras con él más tarde_mi padre dejo de hablarme y observo la ventanilla, habia varios autos negros a nuestro alrededor, debian ser los guardias_habra reporteros...entraremos por la parte de atrás, Gabriel por la puerta principal_vi una lagrima surcar sus mejillas, la primera. 
 


 

Me abrazó de improvisto y comenzo a llorar_te extrañe tanto...creí que no volveria a verte_jamás lo habia visto asi, mi padre era fuerte, él sufria por mi madre y ahora por que me creía muerta...me quedaría, me quedaria con mi padre aún cuando mi vida corriera peligro, no lo dejaria.
 


 

Senti la capucha humeda, mi padre lloraba sobre mi cabeza, asi estuvimos el camino a casa.
 


 

Una vez paró el auto, entramos por el porton de atrás, escondido por los arboles que lo rodean. 
 


 

Abrimos la puerta del jardin e ingresamos, observe el piso blanco, las luces brillantes, el olor a lavanda que mi madre siempre colocó en casa.
Mi padre se dirigio a su despacho, no sin antes darme un beso en la frente y decirme que todo estaria bien.
 




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