Dimas°
-Me llamo Dimas ...- pero no me deja continuar.
-Soy Sayra, Sayra Monte, Dimas- está enojada, pero con solo escucharla pronunciar mi nombre me emociona demasiado.
-¿Porque... -me mira, demonios es muy tentadora- porque te fuiste cuando sabias que estaba ahí?.
-...- ella desvía la mirada para seguir el camino- eres Idiota... ¿Quién era esa?
-...- me quedo pensando un poco- Ivy...
Gruñe Sayra, a lo que solo quiero reírme, pero es algo serio si mi alma gemela está enojada por eso debo aclarar el asunto.
-No era mi pareja, era la de Caleb, esa humana no me quiso dejar en paz- a lo que ella me mira confusa- cierto, no conoces a Caleb, a ver, él es mi alfa y mi jefe ella era una de sus antiguas parejas, quería que la reuniera con Caleb- Sayra lo está asimilando- Somos betas Sayra, una gran mayoría.
-Lose Dimas, lose- que diga mi nombre hace que mi corazón palpite a mil por hora- solo que no quiero que vuelvas a estar cerca de ... esa.
-Te lo prometo, Sayra- el tiempo iba volando entre platica y platica, pero escucho un escándalo rompiendo el encanto del momento, al dirigir mi mirada a ese lugar siento algo, no no puede ser es....
Sayra°
Su nombre es Dimas rayos que bello nombre, pero sigo enojada con el por lo que paso en la fiesta, esa tal Ivy la quiero lejos de el.
Me siento cálida a su lado, protegida como su alma gemela, rayos no lo puedo negar es mi pareja, pero estos celos son lo peor que me pueden pasar a mi justo ahora.
-...Vives muy cerca- susurra un poco- ¿Por qué no podía encontrarte? - trago seco- debes tener mi edad o cerca- ¿esta triste o desilusionado?
- Debe ser por los espíritus- Dimas me mira confuso- te explico, vivo con una loba muy sabia, es... "poderosa", el asunto es que ella se oculta para no encontrar a su alma gemela, y al parecer me vi envuelta en ese campo.
-Eso es algo confuso- dice Dimas.
-Loes- pienso- digamos que ella dibujo un campo de protección para que el olor que desprende no llame a su alma gemela, y como vive cerca de mi casa debió llegar hasta ahí.
-¿Por qué no quería ver a su alma gemela?, esa loba moriría.
-Esa loba lo quiso así, y nadie puede hacer algo al respecto- de algún modo siento que lo herí.
-No quiero que tú te vayas y me abandones- dice mirando al frente.
-... Espero que no me hagas arrepentir de esto- siento que volvió a ser feliz...
Narrador°
-...Vete a casa niño si tu hermana te descubre...- dice Don Antonio.
-Vamos solo estoy por unos bocadillos, doña Eva cerro el kiosco que estaba más cerca de mi casa por lo que me toco venir aquí- le dice Misael.
-Claro como no- dice con sarcasmo- estas aquí comiéndote todo con la mirada y solo llevas unas papitas para comprar, vete no quiero a tu hermana regañándome como la última vez.
-Ella está de fiesta tardara, creo- Misael paga por las papitas y unos refrescos, Don Antonio le da unos dulces.
-Tómalos niño, ahora vete.
-Gracias- Misael sale en dirección a su casa con uno de los dulces en su boca, mirando a los alrededores por qué se siente observado e inquieto desde que salió de su casa y vagaba para encontrar alguna tienda abierta.
-Mi pequeño- se detiene una fuerte voz vuelve a decir- te encontré.
Iba dar la vuelta pero se encuentra rodeado por otros hombres- ¿Qué demonios?, ¿Que quieren? - se está alterando.
-Cálmate- dice el hombre de detras.
-Calmarme nunca, aléjense, ALENJENSE- Grita Misael.
-CALEB, DETENTE- es la voz de un chico, que estaba con su hermana sostenidos de manos, Sayra corre donde Misael gruñéndoles a los hombres que lo rodeaban .
-Saétame Dimas- dice Caleb al ser agarrado por Dimas- SUELTAME.
-Sayra llévatelo- los otros hombres se lo quieren impedir- NI SE LES OCURRA TOCARLA.
-DIMAS- grita Caleb al ser sostenido con más fuerza, sin esperar más Sayra y Misael se alejan para estar en casa protegidos bajo lo que Sayra supuso el hechizo de la Señora Lorena hizo y estarían envueltos de algún modo, estarían a salvo por ahora.
En el otro lado de la ciudad en el callejón oscuro se escuchaban las quejas de Nicolás.