Mi Nuevo Compañero

Capítulo 18

Después de que Declan me enseñe lo básico para surfear, como leer el mar para saber cuando entrar o los pasos a seguir para levantarme sobre la tabla y todo eso. 

¡Nos fuimos a la acción!. 

Éramos la tabla, yo, el mar y Declan quienes presenciaron mis constantes y penosas caídas acompañado de las risas de los niños, de fondo  

Ya había perdido la cuenta, de cuantas veces me caí tratando de levantarme sobre la tabla. 

No fue hasta unas horas después de que Declan me regañara varias veces  por poner la rodilla, haciendo que perdieran tiempo y equilibrio según él . 

Lo logre hacer . 

La emoción fue instantánea en cuanto me pude ver sobre esa tabla y Declan me aplaudía y chiflaba, junto a los gritos de emoción de los niños en la orilla  .

Después de eso me lance al agua, correctamente como me había ensañado Declan. Y decidí que ya era hora de comer. 

Ambos nos pedimos arroz con camarones y lo pagamos a medias,  a pesar que insistió en pagarlo todo él,  tampoco iba a permitir que me viera como una aprovechada .

¡Que seré lambucia, pero con honra!

Pasamos un rato allí, sentados frente a la playa, hablando, tomándonos una que otra foto, jugando a hacer castillos en la arena y comernos lo restante de la caja de flips y otras chucherías que quedaron allí. 

Decidimos meternos otro rato al mar y allí se nos pasó el tiempo tan rápido, que cuando a ver casi todos se habían ido y ya estaba anocheciendo. 

—No se si vas a estar de acuerdo… Pero estaba pensando en que lo mejor sería quedarnos en una posada u hotel hasta mañana, para así no regresar de noche. 

—¿No te gusta manejar de noche?.

—Cuando es en carretera y  unas cuantas horas, prefiero evitarlo.— Se encoge de hombros, metiendo la cava y el toldo de nuevo en la maletera .

—Entiendo, a mi tampoco me gusta viajar mucho de noche,  no me causa mucha seguridad .—Me monto en el carro y él no tarda en hacer lo mismo, prendiendo el carro—. Así que no tengo problemas en quedarnos hoy por aquí. 

Busco en Google lugares en los que podamos quedarnos y encuentro varias opciones.

Terminamos eligiendo una bonita, sencilla y accesible posada. 

Cuando llamé por teléfono, nos dijeron que tenían habitaciones disponibles y cuando les dije que quería dos no tardaron mucho en aceptarnos y decirme que nos esperaban. 

Con la ayuda de Google maps llegamos sin mucha pérdida y cuando ingresamos fueron bastante acogedores. 

Según lo explicado por la señora mayor, ella junto a sus esposo llevaban años dirigiendo esa posada.

Muy amable, la señora nos guía hacia nuestras habitaciones, que quedan una frente a la otra y deseándonos buenas noches nos deja allí. 

—Me voy a bañar y si quieres, puedo venir a tu cuarto para comer lo que quedó .—Propone con su bolso en el hombro y la bolsa con comida en una de sus manos.

—Perfecto — asiento de acuerdo y entro a mi habitación.  

Es pequeña, con una cama individual, un pequeño sofá y la mesita con nevera y televisor de frente . 

Dejo mi bolsito en la cama y la bolsa de chucherías sobre la mesa ratona.  

Voy al baño y comienzo a desvestirme para bañarme y sacar toda la sal y arena de mi cuerpo.

O bueno, lo que puedo”

Despues de luchar un rato contra mi cabello tieso. Salgo renovada y a la vez cansada.  

Me visto rápido, con un conjunto de ropa cómoda que traje, junto a mi comodita ropa interior . 

Prendo en televisor, viendo como esta acabando una película y según la programación, va a comenzar una muy buena de acción. 

Cuando estoy terminando de hecharne crema, escucho como tocan a mi puerta. 

Me asomo por la mirilla y como lo esperaba veo a un bronceado, pero no menos delicioso, Declan. 

Le abro la puerta y viste un mono de rayas azules, junto a una camisa algo ancha pero que se ve bastante cómoda. 

— Aquí traje unos sándwich, que hice en la mañana y un refresco que agarre de la nevera, espero te guste la colita — alza el refresco rojo y pasa. 

Camina hacia el sofa sentandose en el y colocando la bolsa sobre la mesita. 

Me siento junto a él y sin muchos preámbulos nos comemos los sándwich, mientras vemos concentrados la película.

Pero en algún punto después de comer, el sueño aparece con fuerza y me gana la batalla, quedandome dormida.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.