Mi odiado y amado jefe

Capítulo 1

Oyen eso... si ese sonido, me gustaría que fuera el canto de los pájaros, pero lamentablemente el sonido viene de mi celular diciendo que es la hora de levantarse. Lo tomo y apago ese molesto tono para después ver la hora; 5:30 a.m.

—Dios que tortura. — aun así, no hay de otra, me levanto de la cama, me estiro un poco y me dirigió al baño.

Si me vieran pensarían que soy un zombi chocando con la pared y con cualquier cosa que este en el piso, pero después de un difícil recorrido y llegar completa al cuarto de baño, me quito la ropa y me meto a la ducha. De verdad que odio levantarme a esta ahora pero no me puedo permitirme llegar tarde a mi primer día de trabajo.

Déjenme presentarme, mi nombre es Alisha Johnson; tengo 20 años y soy universitaria, curso la carrera de administración de empresas y solo me falta 2 años para terminarla. Se preguntarán ¿cómo conseguiste el trabajo?, fue gracias a mi hermana quien es la secretaria del presidente de las empresas Thompson. Cuando anunciaron una vacante para el puesto de secretaria para el vicepresidente, ella rápidamente me informó, yo me presente a la entrevista. Después de unos días me llamaron para decirme que estaba contratada.

Lo mejor de este trabajo es que es a medio tiempo y eso me ayuda para asistir a mis clases. Otra ventaja es que se acopla con mi carrera y esto me ayudara en mis clases, pero no creo que sea muy importante ya que no es por presumir, pero soy la numero 1.

Y que les puedo decir de mi vida privada... pues, tengo 2 hermanos mayores, Jean el más grande de 25 años, luego sigue Denis siendo la del medio con 23 años y yo la más pequeña con 20 años. Mis padres murieron en un accidente hace 5 años y a pesar de que fue un gran golpe para nosotros no nos dimos por vencido. Nuestros padres nos dejaron protegidos con una buena cantidad de dinero solo para nosotros ya que no teníamos más familia que ellos, supimos aprovecharla bien ya que todos estudiamos administración de empresas, mi hermano trabaja para las empresas Forsee como secretario del presidente, mientras que mi hermana y ahora yo, trabajamos para las empresas Thompson.

Algo bueno de esto es que las dos empresas no tienen rivalidad. Como ven no tenemos problemas económicos, de hecho, nunca los hemos tenido ya que nos dividimos los gastos de la casa, bueno mis hermanos ya que ellos nunca me dejaron trabajar, de hecho, antes de enterarme de este puesto yo estaba buscando trabajo, ya que no me gusta depender tanto de mis hermanos quienes se encargaban de todos mis gastos, por eso estoy agradecida de haberme quedado con el puesto.

—Alisha, ¿Ya te has despertado? — esa es la voz de mi hermana.

—Si, ahora me estoy bañando.

—Okey, mientras te prepararé el desayuno. — con esto último ella se fue.

Salgo del baño y miro la hora 6:00 a.m., mi entrada es a las 7:00 a.m., así que me apresure un poco ya que quiero llegar antes.

Me dirijo a mi armario y escojo algo formal que haga conjunto con unas zapatillas negras, cuando termine de cambiarme voy a la cocina donde mi hermana tiene el desayuno preparado.

—No te hubiera levantado, aún falta para tu hora de entrada, pude haberme preparado un sándwich. — le dije mientras ella se servía un café.

—Sabes que esto no es molestia para mí, además toma esto como un premio por haber obtenido el trabajo. — dijo mientras le daba una mordida a una de las tostadas que me había preparado.

—¿Y Jean sigue dormido?  

—Si, pero en un momento se levantara, creo que tiene que asistir a una junta con su jefe.

Mientras comía, volví a mirar la hora; 6:17 a.m.

Subí a mi habitación, me lave los dientes y me maquille un poco, después baje para toparme con Jean quien me deseó suerte y se metió al baño, tome mi bolsa y las llaves de mi auto y me despedí de Denis, quien también me deseo suerte.

Cuando llegué a la empresa me volví a sorprender por lo enorme que es, nunca voy a olvidar la primera vez que, entre aquí, parecía una turista pérdida y con tan solo recordarlo me muero de la vergüenza.

Entre al estacionamiento y baje del auto dirigiéndome a la entrada de la empresa, no les voy a mentir estoy emocionada y súper nerviosa.

Cuando estoy por cruzar la entrada saludo y me presento al guardia quien me dio una bienvenida amable. Ya dentro de la empresa mis ojos se abren en par, la empresa se ve el doble de grande cuando se encuentra sola.

Saque mi celular del bolso y miro la hora; 6:40 a.m., aún falta para que me reciban así que comienzo a darme un tur por mí misma. Subo el elevador y aprieto un botón al azar.

Cuando las puertas del elevador se abren, salgo de el para entrar a una enorme sala.

—Fantástico.

Es lo único que puedo decir, todo se ve súper caro, incluso las plumas.

—Idiota. — me insulte a mí misma en forma de burla, después de todo olvide que estaba en la empresa Thompson, claro que todo es caro.

Una puerta negra se encontraba a unos cuantos pasos más, comencé a imaginarme todas las cosas de lujo que debe de haber dentro.

—De verdad quiero entrar. — comencé a acercarme, pero pare. —¿Y si me descubren?

Con esas palabras en mi mente, me aleje. Qué tal si está prohibido entrar y no quiero ser despedida en mi primer día.

Cuando llamé al elevador, volví a ver la hora; 6:54 a.m.

—Aún tengo tiempo. — cuando escuche que el elevador abrir las puertas, guarde mi celular y me gire, pero me quede paralizada al ver que un hombre bajaba y me miraba.

Demonios, me atraparon.

Aquel hombre comenzó a acercarse, cuando llegó a donde estaba lo examine mucho mejor, es un hombre joven, calculo que tiene la misma edad que Jean, su piel es blanca, es alto, su pelo es negro y acomodado de una forma que lo hace ver bien, lleva un traje negro que lo hace ver sexy con ese cuerpo bien formado y por último esos hermosos ojos celestes verdosos que me miraban fijamente causando que mi corazón latiera como si hubiera corrido millones de kilómetros.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.