Mi Peor Pesadilla

Capítulo 3

Amelia

Ya han pasado tres semanas desde que entré a mi nuevo instituto, a diario soy objeto de burlas y empujones por parte de Austin y su grupito de amigos.
¡Esto es una pesadilla!
Nunca llegué a desear tanto que la tierra me tragara.

**

Que rico pasar el sábado sin tareas, sin preocupaciones, sin ¡Oohh! Gritó al ver la hora en mi móvil eran las dos y veinte, había quedado con Tamara de ir al centro comercial a las tres.
Voy directo a buscar que ponerme, tomo lo primero que veo al fin y al cabo no es que vaya a una cita.
Salgo directo a tomar el autobús por primera vez, no tengo que esperar mucho para que aparezca. Le hago la parada, pago y voy a buscar un asiento disponible a la planta alta.
Después de veinte minutos llego a mi destino. Camino hacia el centro comercial, aún me da miedo perderme de nuevo como la otra vez, veo a Tamara sentada sobre un macetero agitando ambas manos.
—Te retrasaste media hora.
—Hola, Mel ¿Cómo estás?... Hola, Tam estoy muy bien y tú— imitó su voz para luego hablar normal.
—Sí, ajá, como sea. ¿Quiero saber porque me hiciste esperar media hora?— rodó los ojos mientras la ignoro.
—Podrías explicarme qué haremos aquí, por f...— no termine de hablar porque soy arrastrada literal hacia dentro por mi amiga.
Después de comprar lo que ella necesitaba, le pedí ir por un refresco, moría de sed.
—Meli, qué te parece, si vamos a dar un tour en un autobús por Londres, tú nunca te has subido en uno— me voltea a ver mientras tomaba de su jugo.
—De hecho en uno de esos vine— me tape la cara con ambas manos.
— ¡No te creo!— empecé a reírme al ver la expresión de Tamara.
De un momento a otro nos encontrábamos recorriendo la ciudad. Vimos el London Eye quiero subir a esa cosa, quede impresionada con el Big Ben y The Shard, pasamos por enfrente del museo de cera de Madame Tussauds, todo lo que veía me encantaba, también vimos la torre de Londres, tenía toda una vida para poder ir a conocer cada lugar.
Después del recorrido nos bajamos en The Piazza, Euston Station para ir a Nando's, amo ese lugar pero lo que más amo es su comida.
—Amelia, mira quienes están ahí— al mismo tiempo que volteaba a ver.
Acaso el mundo conspiraba en mi contra, a pocos pasos de nosotras estaba Austin y su novia quienes no nos habían visto, o al menos eso pensábamos.
—Vaya, vaya, vaya pero mira amor a quienes tenemos por aquí— me tape los oídos la voz de Nicole era tan chillona.
Espere alguna grosería de parte de él, no sé si ya me estaba acostumbrando o me había resignado a que nunca podríamos ser amigos. Más creo que la primera, si la primera.
—Déjalas, Nicole, no las molestes— ¿había escuchado bien? Austin pidiendo que no fuéramos molestadas por su muñeca de plástico, eso sí era tan extraño.
Entrelace mi brazo con el de Tam y empecé a caminar, no quería que mi día fuera arruinado por ese par de tontos.
Llegamos a Nando's sin saber lo que me encontraría adentro. Buscamos una mesa, nos pusimos cómodas a los segundos un chico sonriente se nos acercó con el menú.
—Buenas tardes, señoritas, ¿ya saben que van a pedir o vuelvo en un momento?— tenía una pelea interna en sí pedía tacos, pizza o hamburguesa.
—Quiero una hamburguesa doble y un zumo de naranja— pedí.
—A mí me trae una hamburguesa de pollo doble, unas patatas y una coca cola— me quedé boquiabierta realmente mi amiga se comería todo eso.
Mientras conversábamos vi como unas chicas lloraban y otras se querían desmayar no les di mayor importancia, a los minutos nos sirvieron nuestra comida empezamos a comer como si nuestra vida dependiera de eso. De vez en cuando le robaba una patata a mi amiga mientras me pegaba en la mano para que ya no le quitara más.
Escuché unos gritos provenientes de unas mesas cerca de nosotras y seguido de un Louis te amo, abrí los ojos a tope por poco ya se me salían cuando vi que se trataba de Nicole ¿pero qué hace aquí?, me levanté tratando de ver quién era ese chico por el que ella gritaba, como no veía empecé a brincar hasta que decidí subirme a una silla, estaba viendo nada más y nada menos que a Louis Tomlinson el ex de los 1D me bajé de un salto de la silla, empecé a caminar abriéndome paso entre la multitud.
Escuché que mi amiga me llamaba lo único que quería era llegar cerca de mi ídolo, la ignoré por completo una oportunidad como esta no se me presentaba a diario, así que debía aprovechar.
—Amelia ven te van a lastimar— voltee a ver cuándo me sujetaron del brazo.
—Suéltame Austin, no ves que voy a tratar de obtener un autógrafo de él— seguí avanzando soltándome de su agarre sin voltearlo a ver.
Por fin estaba frente a uno de mis cantantes favoritos. Quedé embobada era más bello que en fotos, su sonrisa era mágica, sus ojos, sus labios, su nariz todo él era perfecto.
Cuando levanto la vista nuestras miradas se cruzaron, dejando a un lado a Nicole quien justamente iba a tomarse una foto con él.
Se acercó hacia mí con una gran sonrisa, —Hola hermosa, ¿quieres un autógrafo o una foto?— solo veía que movía la boca pero no entendía nada de lo que me estaba diciendo.
Agitó su mano cerca de mi rostro. —Hola ¿hay alguien aquí? —. Tocó con su dedo mi frente. — ¿Preciosa quieres una foto o un autógrafo? — volvió a preguntar.
—Mmm si— sacudí mi cabeza. —Ho-hola soy Amelia, soy tu fan, ¿puedo tomarme una foto contigo?
—Lindo nombre, muñeca, por supuesto ven y estiró su mano para que la tomara, sin dudar tomé su mano. Podrías darle tu móvil a mi amigo para que nos tome la foto, por favor nena— saqué mi móvil y se lo extendí, no sin antes decirle gracias.
Pude ver que la rubia plástica estaba furiosa. Pero no era mi culpa que Louis la dejara a un lado o ¿sí? Lo siento pero es mi única oportunidad, ni en otras siete vidas vuelvo a coincidir con él.
Después de tomarnos la foto platiqué con Louis unos minutos, en realidad era un gran ser humano le dije que mi sueño era conocer a los otros tres chicos también a lo que él sonrió nada más.
—Los sueños se pueden hacer realidad, querida Mel— que me habrá querido decir.
Estaba que no cabía de la emoción. Me siguió en X e instagram, me dijo que trataría de que los chicos también me siguieran. Mi foco de alerta se encendió cuando recordé a Tamara, rápidamente me despedí agradeciéndole lo amable que había sido.
Salí de entre toda la gente la busqué con la mirada hasta que la divisé de brazos cruzados cerca de la entrada, caminé deprisa hacia ahí.
—Por un momento llegué a pensar que me saldría raíz de tanto esperarte— a lo que me encogí de hombros, —hubieras visto la cara de la teñida cuando la hizo a un lado para tomarse la foto contigo— soltó una risa —el que no estaba contento era Austin se enojó mucho cuando vio que estabas prácticamente embobada con ese cantante.
—Ja, alucinaste, además no tendría por qué molestarse, no somos nada. De seguro estaba molesto por su novia y no por mí. ¿Nos vamos? — asintió con la cabeza.
De camino a casa subí la foto a instagram.
Estaba muy feliz nunca pasó por mi mente poder conocer en persona a uno de mis ídolos, fue lo mejor de mi salida, parezco loca sonriendo pero mi yo interno está que brinca de la emoción. Parece que hoy la suerte estaba de mi lado.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.