Capítulo 14

Amelia

Parece que esto es un sueño nunca imaginé que sería novia de Austin. Intenté odiarlo por todo lo que me hizo, pero, él poco a poco se fue metiendo en mi corazón y nunca llegué a odiarlo a decir verdad.
Ahora estaba completamente feliz, hacía ya dos meses que nos habíamos hecho novios. Mis amigas se habían distanciado, sí me hablaban, pero no como antes, los amigos de él ahora eran amigables conmigo excepto Nicole y sus amigas.
Tengo al chico de mis sueños por novio, las mejores calificaciones, una familia que me ama, unas amigas que a pesar de todo siguen siendo mis amigas y que cueste lo que cueste las voy a recuperar al cien por ciento, unas cuñadas y suegros que me quieren, en fin mi vida no puede ser más perfecta de lo que ya es.
Aunque me tiene un poco intranquila que mis padres no ven con buenos ojos mi relación con Austin. No quiero que estén enojados conmigo.
Para salir con Aus digo que voy con Jessica y él me espera a la vuelta de mi casa por sí mis papás espían desde la ventana no lo ven ni descubren mi mentira, sé que no les debo de mentir pero no me dejan opción.
Cómo quisiera que aceptaran mi relación y me hicieran menos complicada las salidas. No hay día en que mi mamá me diga TÚ CREES QUE IDIOTA SOY PARA CREER TUS MENTIRAS EN ESPECIAL TUS SALIDAS CON TU AMIGA JESSICA, LA PERJUDICADA SERÁS TÚ NADA MÁS.
Cuatro meses después
Me desperté de golpe por esa pesadilla de nuevo en donde lo veía con otra chica, estaba sudando así que decidí bajar por un vaso con agua para tranquilizarme. Hacía ya un mes que venía teniendo esos sueños hasta hoy pude verle la cara a la chica.
Baje con cuidado no quería despertar a nadie, al llegar a la cocina encendí luz y en completo silencio vacíe agua por último me senté en el comedor frotando mis sienes después de la pesadilla me quedó un leve dolor de cabeza.
Dirigí mi vista hacia el reloj de pared que había en el comedor apenas era de madrugada. Intentaba descifrar el porqué de mi sueño, si era que me estaban revelando algo o era alguna señal.
Subí de nuevo a mi habitación pero ya no pude dormir, tenía la sensación de conocer a la chica de mis pesadillas. Por más que intentaba recordar me era imposible y me estaba frustrando.
Tomé mi móvil que estaba sobre mi mesita de noche lo encendí para ver la hora cinco y quince de la mañana, me levanté de la cama y con el móvil alumbre para buscar mi ropa seguido me metí a bañar.
Pasada media hora salí del baño arreglada, me maquillé sencillo y me peine haciendo una coleta alta. No me siento nada bien algo en mí, me aprisiona el pecho.
Me senté en la orilla de la cama esperando el tiempo prudente para salir y que todos estén despiertos. Cerré mis ojos intentando ubicar a la chica pero nada, todo era en vano.
Escucho ruidos en el pasillo, me dispongo a salir hoy quería llegar temprano al instituto para ver si era de ahí la chica con la que he estado soñando todo este mes. Vuelvo a revisar la hora seis en punto, me agradezco mentalmente que desde anoche dejé mi bolso listo, agarré mis auriculares, dinero y mi móvil.
Salgo de mi habitación haciendo el mismo recorrido que en la madrugada solo que ahora con iluminación no en la obscuridad. Veo a mi madre en la cocina, de seguro prepara el desayuno y la refacción de mis hermanos. La saludo pero ella se me queda viendo entrecerrando sus ojos, claramente sé que me está examinando de pies a cabeza y viceversa.
Me dirijo al living pongo mi bolso en uno de los sillones y me siento en otro, tomo el mando de la TV y la enciendo empiezo a cambiar de canal hasta que llegó a MTV donde están pasando el vídeo de You & I de mi banda favorita One Direction, esa canción me la dedicó cuando cumplimos tres meses ósea el mes pasado el mismo día que me entregue a él en cuerpo y alma, sonreí al recordar que a su lado he vivido los mejores momentos de mi vida.
Sacudí mi cabeza para desechar cualquier pensamiento negativo con respecto a mis pesadillas.
Mis padres me preguntan si me sucede algo a lo cual niego, me preparo un sándwich de jamón es lo que iré comiendo en el camino porque quiero llegar temprano. Me despido de mis padres dándoles un beso y a mis hermanos los despeinó salgo rumbo al instituto.
Son pocos los alumnos que han llegado. Camino a mi casillero para sacar los libros de mis primeras materias. Regreso a las gradas de dónde puedo ver a todos los alumnos que van viniendo, a lo lejos divisó a mis amigas les hago señas de que vengan pero ellas solo me saludan con la mano, me decepciono porque sé que soy la responsable de que ellas estén indiferentes conmigo.
Veo que entra el auto de mi novio al aparcamiento y mi corazón se acelera, lo veo que baja y camina para adentrarse al instituto cuando me ve sonríe, bajó corriendo las gradas y saltó a sus brazos.
Lo que me preocupa es que no he dejado de sentir todavía esa sensación horrible en mi pecho como si algo malo fuera a pasar.
Suena el bendito timbre para entrar a clases me despido de mi novio para ir a mi respectivo salón.

**

Voy saliendo de física es mi última clase así que ya me puedo ir a casa, siento como que lo malo que percibí desde la mañana está por pasar, intento no prestarle atención. En la hora de la comida logré que mis amigas y yo volviéramos a ser unidas como antes. Sophie se da cuento que llevo mi mano izquierda hacia mi pecho pero no dice nada.
—Mel, te sientes bien— pregunta Skyler.
Me limito a asentir y seguir caminando, pero conforme avanzaba el dolor se acrecentaba y me estaba empezando a costar respirar.
Veo que Jessica viene corriendo hacia mí algo extraña e impide que llegue al aparcamiento pero ¿Porque? Veo que les hace señas a mis amigas y ellas me dicen que debemos ir a la biblioteca pero no llevamos ninguna tarea que requiera información de ahí.
Forcejeo con las cuatro y corro hacia fuera lo que ven mis ojos no lo creo, es Austin y la chica de mis malditas pesadillas casi tragándose en ese instante escuchó como algo dentro de mí se rompe, me doy la vuelta encarando a Jess.
—Esto es lo que evitabas que viera— ella solo agacha la mirada —traidora creí que éramos amigas.
Escucho como Tamara me grita que deje de culpar a un tercero cuando la única responsable de todo soy yo por creer en él mentiroso traidor de Parker. Apretó los puños ella tiene toda la razón, Jess solo quería evitarme un mal momento.
Camino adonde se encuentran ellos que ni se percatan de mi presencia hasta que tocó el hombro de Austin, él al verme palidece pero ella sonríe victoriosamente.
—Amor, no es lo que parece— rodó los ojos.
—Esto tampoco es lo que parece, amor— le susurro, seguido de esto apoyó cada una de mis manos en sus hombros y le dejó ir un rodillazo en su parte íntima.
Cae hincado soltando un quejido seguido de una maldición, doy media vuelta para abrazar a mis amigas.
Escucho cómo la tipa le pregunta si está bien mientras él le dice que por su culpa está en problemas conmigo.