Cap. 10

Autora: M. Esparza

libro 1 Trilogia curvas Impredecibles

***POV ANNIE***

- ¡NIÑOS YA ES TARDE! – no es bueno despertar con un grito así.

Gruñí bajo las sabanas y me tape los ojos con mi antebrazo intentando recobrar el sueño, pero lo gritos de mi madre no dejaban de insistir, desesperada suspire y poco a poco mi vista se fue aclarando para ver el día soleado a comparación de ayer en Oregón. Mire a un lado de la cama y los chicos aun dormían solo que, en una posición algo rara y graciosa, Amely tenía una pierna entre las mías mientras que la mitad de su cuerpo ya hacia arriba de Víctor quien tenía medio cuerpo fuera de la cama. Son una pareja graciosa así que me reí por un buen momento creo que fue muy alto ya que empezaron a moverse de más y Víctor fue a dar de culo al piso.

-Ahg, mierda – me reí más fuerte haciendo que mi estómago doliera un poco – No le veo lo gracioso me duele la cabeza – se paró del suelo y revolvió su cabello.

- Tengo mucho sueño – murmuro Amely debajo de una almohada, reímos por eso.

-Bueno, ya escucharon a mi madre hay que levantarnos y hablar sobre la fiesta de Victoria – me levanté de la cama fui al baño hice mis necesidades.

Me di una ducha rápida, Salí del baño envuelta en una toalla y fuera del baño estaba Amely esperando su turno y Víctor había ido al baño de afuera, por lo que nos dio más privacidad.

-Adentro hay lo necesario – dije mientras escuchaba un "está bien" de su parte.

Camine a las maletas que había traído anoche, con eso que no tuve tiempo para acomodarla en el armario, busque entre toda mi ropa ya que no sabía que ponerme hacia un poco de calor así que opte por unos leggins negros cortos hasta a mistad de las piernas y un blusón celeste con manga tres cuartos y unas Vans, en cuanto al maquillaje solo aplique mascara para pestañas y un lipgloss rosado y mi cabello solo lo cepille y deje al natural.

Al terminar Amely salió del baño con ropa muy veraniega unos shorts de mezclilla, una blusa con estampado de Minnie Mouse estilo Hípster y por supuesto no podía faltar su moño a medio arreglar y sus lentes.

-Estoy lista – declamo saliendo del baño.

Salimos de mi habitación para encontrarnos con el ruido en el living de mi casa, al bajar las escaleras los niños más pequeños corrían con sus juguetes, mis tíos y mis primos estaban hablando cómodamente en los sillones, en la mesa solo se encontraba mi madre y padre desayunando.

-Ya era hora, son los últimos en despertar – nos reprendió mi madre mientras se paraba de su lugar e iba a la cocina.

-Tranquila tía, anoche Annie nos recibió, aunque ya había despertado por un aperitivo nocturno – detrás de nosotras apareció, ya cambiado y fresco.

-Hay que complacer a mi nieto en lo que pida – hablo mi padre, mamá salió de la cocina con nuestro almuerzo que consistía en huevos revueltos con tocino.

-Coman, después platican lo que quieran – puso los platos sobre la mesa y se fue al lado derecho de mi padre.

Los tres no sentamos y disfrutamos de la comida que en este preciso momento era un manjar para mí, el estar embarazada es agotador, comer en las noches, estar sensible, lo bueno de todo esto es que los mareos y vómitos solo fueron los primeros meses ya que no podría seguir con eso, mama le decía a mi padre que debería tomar una semana libre del trabajo de preferencia en la semana que es el cumpleaños de mi hermana a lo que nosotros concordamos, por otra parte Amely aludía la comida de mi madre y ella le prometió enseñarle a cocinar una tarta de manzana.

Después de haber acabado ayude a mi madre a lavar los platos y cubiertos ya usados, mientras ella los secaba una vez ya terminado fuimos a la sala a reunirnos con los demás, los niños en este momento ya hacían en el patio frontal jugando con Boky quien parecía cada vez más agresivo por estar más grande cuando no era así sino todo lo contrario. Me senté en la mecedora que estaba dentro de la sala y los demás estaban hablando animadamente.

-Bueno ya que los niños están jugando, hablemos de la fiesta para Victoria - comento mi madre, a lo que los demás pusieron atención.

- ¿Y ella ya ha dicho en dónde quiere que sea su fiesta? – la verdad es que mi tío Carlos tenía razón.

-Mi tío tiene razón mamá, si ella no ha dicho dónde como le haremos y su cumpleaños está a solo unos días – Comento Ayden que más bien le ponía su atención al móvil mientras tecleaba a toda velocidad con una sonrisa de lado, Jessie.

-Podríamos hacerla en la hacienda, pero no sé qué opinen ustedes – comento mi tío Mauro quien abrazaba a la tía Vanessa.

-Ella dijo que lo mejor sería hacerla fiesta aquí, solo es cuestión de buscar un lugar- viéndolo desde un punto concreto era más fácil de que sus amigos fueran.

-Me parece buena idea, ya que sus amigos podrán asistir – comente mientras todos asentían de acuerdo con lo que había mencionado.

-Todos podemos ponernos de acuerdo para ir organizando las cosas – comento la tía lucia.

-Así tendríamos más tiempo como somos muchos – Aporto mamá – Cada quien se hará a cargo de una cosa, Mauro y Vanessa buscaran un salón que sea lindo, pero no ostentoso, Carlos y Lucia de las invitaciones, Vicktor y yo de la comida y adornos, los chicos pueden buscar un sonido y que hagan la reservación normal y agregar dos horas extra después de la noche – mamá comenzó a hablar y creo que ella estaba más emocionada que la propia festejada.

-Ey, alto ahí cuñada ¿Horas extra? – todos reímos por el acento de mi tía Vanessa y mamá se puso roja como tomate.

-Bueno es que hace falta mover lo que Dios nos dio – comento de vuelta, no puedo creer lo que acaba de decir.

- ¡Mamá! – Oh dios esto es una locura.

- Oh vamos mamá, si bien que anoche lo movías con papá – Dios que vergüenza no quiero saber eso, Ayden solo movía sus cejas de arriba abajo.