Mi pícaro Mate.

Capítulo 11.

Capítulo 11.

•Jade's Pov•

Tania se encuentra tendida en el piso mirando las estrellas, Summer está apoyada en la baranda mirando la ciudad y yo, bueno yo las miro y pienso en lo que he dicho... quizás no tuve que haber dicho que estamos solas y nuestros mates nos han dejado... quizás Tania tiene razón y yo soy la culpable de estar sola ahora y de que Jared se haya ido.

-Tania -Susurro su nombre y está voltea a mirarme de mala gana-. Te acuerdas cuando eramos pequeñas y nos quedamos encerradas en el balcón de tu casa por dos horas hasta que llegaron tus padres.

Tania asiente con la cabeza y ríe, su risa fue bastante contagiosa por lo cual también comienzo a reír.

Summer nos fulmina con la mirada y ambas nos reímos más fuerte.

-¿acaso los vampiros ya se fueron que ríen así?

Con Tania abrimos mucho los ojos... ¡mierda los vampiros!... escuchamos pasos firmes desde la parte baja y podría jugar que hasta me sentí mareada del susto, Tania de puntillas se acerca a nosotras y mira mis pies descalzos.

-Jade te vas a resfriar.

-Este no es el mejor momento para pensar en resfriarse Tania.

El sonido de los lobos aullando se escuchaba cada vez más cerca y me sentí mucho más aliviada, el sonido de sus aullidos venía desde el bosque.

-¡Apresúrate Colín! -se escuchó el grito de un hombre desde abajo.

Con las chicas miramos desde la baranda y vimos que era un vampiro que salía de la casa por la puerta de la cocina.

-Ay voy genio -se escucha otra voz pero esta vez el chico bajaba la escalera de la terraza de la cocina -Esos lobitos se llevaran una gran sorpresa al entrar a su casa.

Los dos vampiros se perdieron en el pequeño bosque que había detrás de la casa de Summer.

-¿tienen dos terrazas? -se escuchó una voz gruesa y varonil detrás nuestro.

Con miedo me doy media vuelta y miró a tres vampiros realmente pálidos parados frente a mí. Summer y Tania aun no voltean por lo que no los ven.

-Parece que si Vincent, estas lobas son astutas -muestra sus colmillos- no creí que se escondería acá.

-Idiota no la asustes... yo pido a la rubia que está de espaldas, se ve deliciosa -habla el rubio que al parecer se llama Vincent.

-Yo a la morena con buen trasero -habla un ojiazul mirando a Tania- se ve dulce.

-Creo que yo me quedo con la de pijama de gatitos... -abro mis ojos y lo miró fijamente-. Huele a Jared.

Tragó con dificultad.

-¡oh por dios! -susurra Summer sin moverse, todavía mirando hacia la ciudad.

Mi cuerpo por alguna razón no reaccionaba a mis mandamientos, quería moverme y darle una buena patada en las pelotas pero no podía, miro como el castaño más pálido que el papel y de unos ojos verdes pálidos se acerca a mí con la boca entreabierta producto de sus colmillos.

-Hueles deliciosa querida -susurra en mi oído una vez que estuvo lo suficientemente cerca.

-¡No la toques bastardo!

Grito Tania antes de lanzarse sobre él, en ese preciso instante Summer se convierte en una gran loba blanca lanzándose sobre el rubio Vincent y con una agilidad increíble lo tiene destrozado.

Mientras yo, bueno, yo no puedo ni moverme, todo va en cámara lenta, Tania se lanza sobre el castaño, Summer se transforma y se lanza sobre el rubio llamado Vincent descuartizando y yo acá parada sin saber qué hacer en medio de una pelea entre lobos.

Miro a Tania la cual ya está transformada y... ¿en qué momento se transformó? Creo que en este instante no es de mucha ayuda mi mente ida que son suerte se da cuenta de las cosas que pasan a mi alrededor.

Vamos Jade no te quedes ahí parada como una verdadera estúpida, vamos Jade piensa ¿transformarse?... ¡No! Las tres veces que ya me he transformado me han dado suficiente dolor y ya no puedo hacerlo, ¿saltar la baranda?, me acerco a la baranda y miró la altura, okey esa no es una opción, a menos que me transforme y logre caer de pie, no.

Un fuerte aullido muy reconocido para mi hace que mi corazón se acelere, miro por el bosque pero no veo nada, mi mirada se posa a Summer la cual estaba algo débil debido a que el ojiazul se mueve con su súper velocidad y la marea, la sangre de Vincent está pegada a su pelaje blanco. El aullido de dolor de Tania me hace desviar mi vista hacia ella y encontrarla tirada en el suelo ya convertida en humana y al castaño muy cerca de ella.

-¿tan rápido te rindes lobita? -le pregunta con sarcasmo y Tania gruñe como puede.

-Aléjate de ella -susurro en el oído del castaño y lo empujó hacia la baranda produciendo que se tambalee en esta y este a punto de caerse.

Miro a Tania y miro su cuerpo desnudo pero no logro encontrar ningún rastro que haya producido que su cuerpo vuelva a la normalidad.

-Perra -gritó el castaño desde las barandas ya incorporándose.

-Ese aullido Jade, el aullido fue de... fue de...

Miro asustada a Tania y dejó de lado al castaño, en este momento él me está valiendo mierda.

-¿De quién era el aullido Tania?

-Es de Tita.

Mi corazón se aceleró al escuchar el nombre de Tita, sé que mi rostro lo dice todo, una sonrisa se refleja en mis labios Tita estaba cerca, y si Tita estaba cerca significaba que mi familia también, muy probable mi padre con mi tío Drago vengan a buscarnos al fin.




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