Vimos un enorme letrero que decía "Bienvenido a Life and Music" miré a Matt y sonreí al igual que él. -Entramos?-pregunté levantando una ceja. -Obvio-contestó agarrando mi mano, no se porque pero siempre que vamos a entrar en un lugar nuevo, nos tomamos de la mano, desde que éramos pequeños, así nos sentimos más seguro. Cruzamos la calle y entramos al lugar. Era muy bonito, parecía un restaurante, pero había muchos jóvenes y adolescentes deambulando por el lugar, de repente se nos acerca un chico alto, muy guapo de hecho, traía puesto una camisa a cuadro rojo, remera, y pantalón negro. En el brazo izquierdo tenía atado una bandana fucsia con rayas blancas, era el mismo color del cartel que estaba afuera. -Buenas tardes!-saludo-Bienvenido a Life and Music. -Buenas tardes- saludó Matt estrechándole la mano. -Me llamó Zabdiel soy unos de los encargados del lugar, ¿son nuevos?-pregunto con una sonrisa que ¡hay Dios mío!, era hermoso, perfecto sería la palabra correcta. -Sí- conteste-Acabamos de mudarnos en la ciudad. Somos de México. -Qué bueno! Oye ¿Quieren conocer el lugar?. -Pues claro- contestó emocionado Matt. -Ah de hecho hacen muy linda pareja-sonrió, yo mire a mi hermano y ambos reímos-dije algo malo?-pregunto ruborizado. -Somos hermanos-contestó Matt entre risas, la verdad es que muchas veces nos confundieron con ser novios ya que ambos somos adoptivos y no nos parecemos mucho. -Ooh perdón!-se disculpó rápidamente. -No te preocupes, ya estamos acostumbrados, Vamos?-pregunté dejando de reír. Fuimos conociendo el lugar, y ¡Guau! Era hermoso, había pista de patinaje, paredes para escalar, y escenario de baile. -Esto es hermoso!-exclame. -Y aún falta un lugar-contestó con su hermosa sonrisa. -En...En serio?-pregunté asombrada. -Sí-y me guiño el ojo, ¡hay Dios creo que me enamoré de este chico!