Capitulo 29

Mi hermano despertó al parecer tuvo una pesadilla, estaba bañado en sudor y temblaba como si hubiera visto el peor masacre del mundo, llame a mis padres asustada ya que no sabía que hacer-¿Qué pasa?-preguntaron mirando a Matt que estaba sentado, con las piernas flexionada y con la mirada perdida-No sé, despertó gritando-contesté                                                                             -Volvieron las pesadillas, ve por un pañuelo y agua fría.                                                       -¿Que pesadilla papá? ¿De qué hablas?- No entendía nada, mis padres nunca me han dicho que Matt tenía pesadillas así.                                                          -No pidas explicaciones ahora cariño- hablo mi madre para luego ir por lo que pidió papá, mire a mi hermano y aún seguía temblando-Él mató... a mi madre-dijo casi en un murmullo, mi piel se erizo y una corriente fría recorrió mi espalda.                                                                                                       -¿Con quién estaba?-pregunto mi padre mirándome.                                                -Con... Con los chicos nada más-después recordé como se puso Matt cuando vio al tío de Zabdiel y pensé lo peor-También conocimos a un hombre-volví a hablar mientras ponían el paño mojado en la frente de mi hermano.                          -¿Qué hombre?                                                                                                                -Un tal Mauricio-su cara quedó pálida mira a mi mamá y ella estaba igual-¿Qué pasa?-pregunte-¿lo conocéis?                                                                    -Tú hermano a mencionado ese nombre un par de veces cuando era pequeño y despertaba así asustado-me quede sin palabras, confusa, ¿Mauricio tendrá algo que ver con el pasado de Matt? Pero lo raro es que ese hombre me resulta muy familiar al igual que su hijo Alex... poco a poco mi hermano volvió a la normalidad y pudo volver a dormir, pero yo no pude conciliar el sueño, daba vuelta a todo hasta que mis párpados no dieron más y todo quedó oscuro...            Joel                                                                                               Desperté por la luz que filtraba por la ventana, al parecer se han olvidado cerrarlas anoche, me incorporé y froté mis ojos para poder enfocar mejor mi vista, me levanto torpemente y choque contra la mesita, tan fuerte que la caja que estaba arriba cayó y varias cosas se esparcieron por el suelo, cuando me arrodilló para recogerlo una pequeña cosita llamó mi atención, extiendo mi mano y la tomo-la cadenita de la suerte-susurre y la imagen de aquella niña sonriendo apareció en mi mente-Nunca te podré olvidar-dije apretando fuerte la mitad del corazón que colgaba de la cadena-¿A dónde has de estar?