-MALDITA SEA! ¡PONTE ESE PUTO VESTIDO!-grito tan fuerte que me asusté, el miro hacia la puerta y después me miro a mi, pude ver arrepentimiento en sus ojos-Tranquila, Ricardo estaba ahí por eso te grite-dijo con voz calmada-¿Cómo sabes que mi nombre es Israel? -Joel tú hermano, me contó la historia justo antes de que me secuestraran. -¿Cómo? ¿Conoces a mi familia? ¿Están vivos? -Obvio que están vivo, todo ellos, tú madre hasta ahora te sigue buscando, al igual que Joel, no han perdido la esperanza de encontrarte- en sus ojos brillaban las lágrimas que no tardaron en mojar su mejilla-todos menos tu abuelo. -No puede ser-susurro-no puede ser, me hicieron creer que toda mi familia había muerto en aquel accidente! Y que no pidieron rescate porque a mi padre lo habían matado poco tiempo después! -¡MENTIRA! ¡TU PADRE ES DUEÑO DE TODA ESTA MIERDA!. -¿Cómo? No, mi papá no puede ser parte de esto, él no es así. Yo nunca lo e visto por aquí!.¿Qué dices? -él dio la orden para que me secuestraran, por que no me aceptaba y quería que tú hermano este con la hija de Ricardo, ¡ellos trabajan juntos!-dije enojada, él se levantó y se apretó la cabeza con la mano mientras cambiaba de un lado a otro. -¿Ricardo? ¿Ricardo el hombre que vino recién? pero él, él me salvó de aquellos secuestradores... ¿Por que no me devolvió a mi familia? -¡EL NO TE SALVO DE NADA! Fue él quien te secuestro! ¡El tiene en la muñeca el tatuaje que me dijo Joel que vio cuando te saco del auto! -Te juro que lo voy a matar-dijo entre dientes, su rostro estaba desencajado y en su mirada había mucho odio. -¡No! No lo hagas-suplique- te mataran a ti y eres lo único que tengo... créeme que yo quise hacer lo mismo pero ese cobarde idiota debe pagar todo lo que hizo en vida, la muerte no es la mejor opción. Calmante por favor! -¿CÓMO QUIERES QUE ME CALME? ¡MALDITA SEA! ESE IMBÉCIL ARRUINÓ MI VIDA! -La mía también-susurre. -¡NO HAY SALIDA! de aquí nadie sale al menos vivos, sólo cadáveres de aquellas pobres chicas que decidieron terminar con su vida antes de seguir viviendo en este maldito infierno... -SALGAN MALDITA SEA!-escuchamos a Ricardo gritar , mi corazón dio un brinco y…