Capitulo 90

➡Maratón 2/5⬅

Mi mamá tenía los ojos lloroso clavado en mí, su barbilla temblaba-¿Qué te dijo tú padre?-pregunto con la voz temblorosa.

-Toda la verdad mamá...

-¿DE QUE VERDAD HABLAN?-grito Gabriela-QUÉ DIJO PAPÁ? CÓMO QUE SECUESTRO A MAMÁ? JOEL HABLA! -Yo no puedo...-conteste-mamá tenemos el derecho de saberlo...-mi mamá comenzó a contarnos todo, desde el momento en que mi padre la secuestro y la razón por la que decidió quedarse con él fue porque le amenazo con quitarle a mi hermano mayor, y como tenía mucho dinero hasta tenia comprado a algunos abogados corruptos, era las acusaciones de mi madre contra las palabras intachable de mi padre, nadie le iba a creer y para estar cerca de su hijo, decidió estar cerca de él, del peor ser humano del mundo.

Emanuel intento ir en busca de mi padre después de saber la verdad pero llego John y lo detuvo, ya que no tenía sentido reventarle la cara a golpe. *Fin del flashback*

-El cuarto ya está preparado para ti-hablo la sirvienta de la casa cuando ingrese en la enorme mansión de mi abuela, es bastante lujosa, iluminada, el piso blanco se extendía a lo largo de la casa, las paredes de color rosa pálido le daba un toque especial, pero el vacío silencioso me daba un poco de nostalgia, mi abuela había decidido ir a México con mi madre, después de saber toda la verdad habían quedado en dejar atrás todo y empezar de nuevo en sus tierras natales, yo fui él único que decidió tomar otro rumbo y ahora sería el dueño de esta casa-Gracias-conteste antes de subir las escaleras, las habitaciones ya no me era extraño, era casi igual que la mía, amplio, con una cama enorme, closet que ocupaba una pared completa y un ventanal enorme que daba al balcón, desde allí tendría una vista espectacular hacia la ciudad... mientras me desprendía la camisa mi mano toco la medallita que traía colgada en mi cuello, lo tome y quede fijo mirando cada detalle, un clave de sol adornada con perlas brillosas, quien diría que algo tan pequeño ocultaría tan grande historia, el rostro de Emily llorando y suplicándome a que me quedara apareció en mi mente, como me duele haberla dejado así pero es lo mejor,