10 - Arruinar el momento

- Por favor, por favor, por favor, perdóname – Iris lleva rogándome la ultima media hora

- Tendrás que esforzarte mucho más si quieres conseguir mi perdón – cruzo mis brazos sobre mi pecho y la encaro.

- Oh vamos, tampoco fue tan malo, lograste besar a Peter – sube y baja sus cejas

Ni siquiera le respondo la veo con mala cara, me giro y me separo de ella lo más rápido que puedo, estoy molesta, no solo me abandonó para irse con Fernando, observó todo el show y no intervino en mi favor, aun sí no lo hubiera evitado, habría sido lindo ver que al menos lo intentaba.

Salgo del salón de eventos en donde para terminar la feria, darán un pequeño show de talentos, cada salón debe presentar un acto para evitar que nos quiten puntos, en el nuestro Claudia se ofreció así que no pasa nada si me desaparezco un momento.

Me siento en una de las bancas del jardín porque necesito un poco de aire fresco, cierro los ojos y me permito relajarme tranquilamente, olvidándome de todo por hoy.

- Así incluso pareces inofensiva, quien diría que puedes ser una perfecta máquina de pelea.

Su voz es simplemente inconfundible, no necesito abrir los ojos para saber que está parado frente a mí con su típica sonrisa arrogante, abro solo un ojo para confirmarlo y luego lo vuelvo a cerrar.

- Soy una caja de sorpresas – me encojo de hombros

- Si te doy cuerda saltará un payaso al final – bromea y se sienta mi lado, me enderezo y lo veo con mala cara

- Que forma tan tonta de arruinar una perfecta metáfora de la caja de pandora – suelta una carcajada enorme

- Es que ya te lo dije beba, eres muy pequeña así que en teoría tendrías el tamaño ideal

Sonrió un poco y decido no responder, el silencio que se forma entre los dos no es incómodo, sino todo lo contrario, se siente agradable poder estar con él en un momento relativamente en calma, sin bromas, sin presiones, solo nosotros dos.

- Gracias – rompo el silencio luego de varios minutos

- ¿Por qué? – pregunta confundido

- Por lo de la capilla

- Ha eso – se recuesta hacia atrás sobre sus manos – no te preocupes, no parecías muy entusiasmada con la idea de besarme y dado a que imagino que tu estatus de "jamás besada" no ha cambiado en los últimos meses, no creí que quisieras que tu primer beso fuera así.

- Tienes una forma tan natural de arruinar un bello momento – él suelta una pequeña risa

- No entiendo por qué aún no has besado a nadie, ¿acaso esperas que sea un momento como en los cuentos de hadas? Porque si es así lamento decepcionarte beba, pero la vida real no es así

- No seas ridículo, no se trata de eso – está vez soy yo la que suelta una risa – solo no ha pasado y ya, cuando pase me gustaría que sea porque quiero, no porque alguien quiera obligarme

- Entiendo – se endereza en su asiento y queda peligrosamente cerca de mi – me aseguraré que nuestro primer beso juntos sea realmente especial

Esa es una afirmación que definitivamente no me esperaba, el calor invade mis mejillas y tengo que girar el rostro para no caer ante la tentación de acortar la distancia entre los dos y besarlo.

- Estás listo para la eliminatoria de mañana – cambio el tema

- Supongo que si – dice despreocupado pero noto un poco de tensión, de nuevo tiene apretado los puños

- No tienes de qué preocuparte, los primeros dos clasifican a la regional, así que solo bastaría con que llegues a la final.

- Clasificar no es suficiente beba, tengo que ganar

- ¿Por qué no bastaría con clasificar?

- Porque no – dice ya algo alterado, pero al ver mi reacción de sorpresa se retracta – lo siento mucho

Suelta un suspiro desesperado y oculta su rosto entre sus manos, como si buscara calma, no sé que le pasa, pero no me siento con capacidad de juzgarlo, así que solamente coloco mi mano sobre su hombro, descubre un ojo y solo le ofrezco una sonrisa de comprensión.

Luego de unos momentos comienza a contarme un poco de su historia familiar, resulta que su hermano mayor también practicó Karate y no solo eso, fue campeón cinco años seguidos, así que su padre pone mucha presión al decirle que debe igualar o superar los logros de su hermano.

También me sorprende el enterarme que su hermano está casado con la hermana mayor de Claudia, por eso siempre están juntos, eso explica muchas cosas para mí, no todo, pero al menos una parte está mucho más clara.

Entiendo el nivel de presión que siente, me animo a contarle un poco de mi historia también, me permito contarle como me afectó la muerte de mi madre y como me sentía con el hostigamiento de mis compañeros en mi antiguo colegio, al terminar de conversar noto que ambos estamos más relajados.

Caminamos de vuelta al auditorio, y cuando estamos entrando escuchamos que anuncian a nuestro salón, pero no es a Claudia a quien llaman, sino a mí.

- Como es posible que se hayan equivocado – estoy al borde de un ataque en estos momentos

- No lo sé, solo parece que hubo un error al colocar los nombres – se excusa Claudia

- Claro, porque Claudia Avellaneda y Ariana Flores suenan demasiado parecidos

- Sea como sea, ya está hecho, sino subes al escenario ahora mismo nos descontarán cinco puntos netos a todos.

No sé como pasó, pero alguien colocó mi nombre en lugar del de Claudia en el acto para el show final, estamos todos los del salón reunidos a un costado abajo del escenario y me rehúso a subir para hacer el ridículo, noto como mis compañeros me observan expectantes a mi respuesta.

- No lo haré – todos comienzan a protestar

- No tienes opción, si no lo haces por ti, hazlo por todos nosotros – la rubia suelta una sonrisa inocente que tengo ganas de borrar con un puñetazo