Mi querido profesor

Capítulo 14

Ya tengo preparada la maleta para comenzar un finde semana junto a la nueva familia de mi padre. Trago fuerte al pensar que voy a estar más cerca de Hunter de lo que necesito en estos momentos. Lo único bueno es que en una semana habré terminado las clases por las vacaciones y podré centrarme y alejarme de todo esto que me está consumiendo. No sé en qué momento ha llegado todo a ser tan complicado. El teléfono suena. Mi padre y su mujer ya están abajo. Me despido de Abby lo más rápido que puedo y pongo rumbo al mismísimo infierno.


 

Tras casi no pronunciar palabra en el coche y evadirme en mi mundo, un nombre que resuena en la boca de Marlen me hace sobresaltarme.


 

-Si Cariño,ya ha salido también de casa, así que tampoco se demorará mucho-sonríe Marlen mientras acaricia a mi padre la mano.


 

Suspiro al llegar allí. Es una casa bastante grande y moderna para estar en mitad de un bosque,aunque no esperaba menos. Mi padre tenía un buen trabajo en una empresa bancaria y Marlen era escritora en una de las revistas más conocidas de nuestro país.


 

Mi padre nos ayuda a bajar las maletas y yo empiezo a inspeccionar todos los alrededores de la casa. La verdad que el paisaje merece la pena. Estamos rodeados de árboles enormes que sobresaltan con el día soleado.


 

Mientras esperamos a Hunter, mi padre y yo hemos decidido darnos un baño en la piscina y así poder disfrutar de un rato juntos.


 

-Elle, me gustaría preguntarte algo-dice serio.

-Dime papá-llamarlo así me hace estremecerme en el agua.

-¿Te ocurre algo hija?¿No será por algún chico?-me mira atento. Y eso me hace tragar evitando que cualquier gesto me juegue una mala pasada. Si se enterara que estoy así porque el hijo de su mujer me gusta cada día más y no puedo frenarlo, me odiaría.

-No papá, es solo cansancio de todos los exámenes y la inquietud de las notas.- intentó notarse segura al decir cada una de las palabras y eso parece que a él le vale. Me sonríe y yo le devuelvo la sonrisa.


 

-Buenos tardes Tom-una voz nos hace separarnos de nuestro momento y hacer frente a quien pronuncia esas palabras. -Hola Elle- dice seguidamente y yo asiento en forma de saludo.

Y ahí está con poca ropa observándonos detenidamente. Y a mi se me vuelve a secar la ropa al ver que se quita la camiseta. Otra vez ese cuerpo digno de un dios me deja sin palabras. Me intento apartar toda idea que me viene de salir de la piscina y comerle esa boca una y otra vez.


 

Mi padre sale de la piscina para ir dentro de la casa con Marlen y nos acaba dejándonos solos. Esto era lo último que quería que pasara este finde semana. Con este hombre me estoy volviendo impulsiva y alocada. Decido no salir y parece que el cede y se mete en la piscina.


 

-¿Como estás, Elle?- una leve sonrisa le sale de su bonito rostro.

-Bien.-sueno más seca de lo que me gustaría y parece que el lo nota.

-Estás mucho más delgada.¿Estás comiendo?-dice preocupado.

-No mucho, no tengo apetito últimamente-digo atravesando la piscina para salir.


 

Se queda ahí dentro observando todos los movimientos que hago. Me tumbo en una hamaca para secarme y no puedo quitarme esos ojos de encima ni en mi mente. Aprieto los ojos cerrándolos con el fin de aparecer en otro sitio, lejos de aquí.


 

Durante la comida Marlen nos cuenta que ha organizado una pequeña fiesta esta noche aquí en la casa. Eso me puede venir bien para no sentirme de esta manera y conseguir olvidar todo esto. La comida está exquisita pero mi apetito es nulo.


 

-Además vendrá Elizabeth, que me dijo que tenía muchas ganas de volverte a ver Hunter.- Dice Marlen entusiasmada. Hunter solo asiente y deja que su madre siga hablando- Creo que es hora de que encuentres a alguien, tienes 26 años y deberías comenzar en mirar en un futuro junto a una familia. Casi me atraganto con la comida por esto último. Y unos celos me atravesaron como una cuchilla afilada al pensar a Hunter junto a alguien que no fuera yo. Aparto un poco el plato de mi en signo de que no quiero más.


 

-Mamá te lo he dicho ya un montón de veces, estoy bien como estoy, no quiero encontrar nada-dice sin quitarme la mirada y eso hace que un alivio me calme estas ansias de pegar a algo. Pero su mirada se fija en mi plato y aprieta sus puños y eso hace que me cohiba ante él.


 


 

******


 

Ya ha caído la noche y se empieza a oír gente abajo. Me he puesto un vestido corto que descubre la espalda al completo a través de unas finas tiras sueltas que forman una x. Me he recogido el pelo en una coleta simple y con un maquillaje un poco marcado. Mi puerta suena con dos pequeños golpes.

-Adelante-gritó un poco para que pase.

-Hola hija. - Mi padre aparece tras abrir la puerta.-Estas hermosa-Sonríe al verme. Él está elegante con un traje azul oscuro sin corbata. Parece desinformal pero el con su forma de menearse es todo lo contrario. Estoy orgullosa en lo que se ha convertido tras los años.

Gracias papá- le doy un abrazo el cual él recoge cálidamente.

-Tenemos que bajar ya-me susurra y yo asiento. Me da un leve beso en la frente lo cual yo disfruto como si fueran minutos.


 


 

                                     ***


 

Buenas tardes lluviosas, es triste lo que está ocurriendo en estos momentos en este mundo tan maravilloso. Este Virus nos tiene inquietos y por eso he decidido relajarme escribiendo y así os dejo unos capítulos por aquí.


 

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