POV/ NARRADOR
Barry no hacía amenazas vacías.
Una noche, Helena encontró una nota deslizada bajo la puerta de su pequeña casa cerca del faro. Decía: "¿Crees que conoces a Rafe? Yo sé quién es de verdad. Y tú vas a pagar por meterte donde no te llaman."
El papel temblaba en sus manos mientras lo leía. No le dijo nada a Rafe. Aún.
Pero él ya lo presentía. Barry no solo quería dinero. Quería venganza. Y lo haría de la forma más sucia posible: lastimando a quien Rafe más quería.
Cuando Helena desapareció por unas horas al día siguiente, Rafe casi pierde la cabeza. Se volvió loco buscándola. Fue al muelle, al café, incluso al taller donde ella revelaba sus fotos. Nada.
La encontró finalmente en el bosque detrás del viejo hotel abandonado, con la cámara tirada en el suelo y el rostro pálido.
—¿Qué pasó? —preguntó, arrodillándose junto a ella.
—Me siguieron —dijo con la voz rota—. No me hicieron nada… pero sé que fue él. Barry.
Rafe se quedó en silencio. El odio lo quemaba por dentro, pero también el miedo. La abrazó fuerte, más fuerte de lo que debía.
—Ya no estás segura cerca de mí —susurró.
—No. No estás entendiendo. Ya no estás solo, Rafe. Así que no me empujes fuera cada vez que tienes miedo. Si vamos a hacer esto, lo enfrentamos juntos.
Esa noche, fue a ver a Sarah. No como el hermano arrogante de antes, sino como alguien que necesitaba ayuda.
—Barry la está amenazando. Y yo sé que no merezco mucho, pero no puedo dejar que le pase algo por mi culpa.
Sarah lo miró por un largo momento. Había odio aún en su mirada. Pero también miedo.
—¿Qué necesitas?
—A los Pogues. Solo esta vez. Después desapareceré, si quieren. Pero si no paramos a Barry ahora, alguien va a salir herido.
Fue Pope quien habló primero cuando Sarah lo reunió con JJ y Kiara.
—Estás loco si crees que vamos a ayudarte.
—No lo hago por mí —dijo Rafe—. Lo hago por Helena.
Kiara cruzó los brazos, dudando.
—¿Y qué pasa si todo esto es una trampa?
Sarah miró a Rafe, con un dejo de dolor.
—Porque esta vez... no creo que esté mintiendo.
Hubo un silencio. Denso. Largo.
Finalmente, JJ soltó un suspiro.
—Está bien. Pero si haces una sola cosa que me dé mala espina… tú y yo vamos a tener una conversación muy distinta.
Y así, por primera vez, Rafe Cameron y los Pogues iban a estar del mismo lado.
Pero Barry no iba a caer sin pelear.
04 CHAPTER