UNA SEMANA

Es sorprendente que luego de tanto tiempo, quiera volver a escribir. Mis manos ya no tenían esas mismas ganas, mi tinta terminó por su partida.

No había sentido tal dolor, el dolor de una semana de llantos sin tu compañía. Frases, momentos, fotos, audios y todo lo demás, me hicieron recordar de tu presencia. Me hacías tanta falta y lo sabías.

Es que mi almohada no me consolaba, necesitaba tus abrazos y me hacía mucha falta poder escucharte.

Hoy llueve, porque mantuve la esperanza de volver a verte, pero ahora sé que el destino no quiere que te vuelva a ver.

Es que mis miedos nuevamente me alejaron de la felicidad. Del dulce sentimiento de un te quiero en mi vida.

Ya no es igual seguir con todo esto, pues nuestra partida queda marcada, porque ya todo termina.

"Sólo puedo ofrecerte mi amistad" me destrozó el alma, pero yo acepté eso. Mis inseguridades de perderlo me llevaron a proponer lo mismo; y perdí.

Perdí caricias y alegrías. Fueron dos meses de alegría y ahora son días de tristeza y soledad.

Pues de mi error no me olvido. Hoy pierdo la esperanza de volver a verte, tengo que aceptar que ya no va ser lo mismo y trataré de dejar que sigas con tu vida.

Entendí que había sido mi error, dejarte ir y actuar en cólera, porque lo más hermoso siempre termina por un pequeño detalle.

Lloré el día que te perdí disculpas y en lágrimas mi corazón me decía que te dijera cuanto te quería.

Lo hice y por eso hoy entiendo. "Quiero enfocarse en mis estudios y velar por mis padres", fue la frase más linda y dolorosa.

Respiré para aceptar que ya no podía luchar contra eso, sólo quedaba agradecer y dejar de molestar.

Una pequeña sonrisa surgía cuando leía una y otra vez aquella frase. Esa misma que no quiero interrumpir.

Confieso que bloquearte era mi opción y eso hice, pero cada vez miraba nuestras conversaciones, tú tan sencillo y amoroso, yo tan ilusionada y con miedo del que se terminara.

Hoy se termina está etapa para mí, dejó dejarte ir, pues es lindo que quieras velar por tus padres; y con eso no puedo competir.

Miro la ventana y las gotas caen sin parar, el cielo grita y mi corazón queda con ese sentimiento.

Me dicen que sea fría y abandone esto del amor. Yo lo pensé, pero quiero ser amada y también entregar amor.

Por ahora queda sanar y pensar en mí, no sé si Volverás, pero espero algún día volver a escuchar los latidos de tu corazón en cada abrazo.

Yo me despido de Ti, y aunque ya no leas este escrito, me sentí bien al recordarte de nuevo. Debo dejar de pensar en ti; pero sé que eso es mentira, porque te pienso en cada acción que realizo y con cada lugar que camino.

"Te quiero mucho"