CAPÍTULO 2

Lía y su nana, llegaron hasta la casa del pariente. Como él no se encentraba dentro porque está trabajando, su esposa. Una chica de piel oscura y cabello negro, les dejo pasar.

Les prepara una bebida y unos dulces para que comieran algo.

Nana –Eres muy amable, María.

María –No tienes que agráceme nada, soy la esposa de tu primo. Somos familia y estoy en la obligación de ser amables, siempre y cuando también lo seas conmigo.

Lía – Esto… solo serán unos días, hasta que pueda encontrar un lugar donde vivir. No quiere ser una molestia, no soy de la familia como mi nana.

María –Carol, te ha criado y eres como una hija para ella. Así que también eres de la familia. No hay prisas, mis hijos estarán encantados de poder pasar tiempo con su tía

Carol (nana) – Sera agradable, estar con esos niños. Hace mucho tiempo que no les veo, solo los he podido ver en fotos.

María les enseño unas fotos a Lía, eran de su boda con Miguel y de los niños.

Lía –Son preciosos, se parecen mucho a ti.

María –Salvo por el color de su piel, que sean blancos. Ayuda a que la gente sepa quién es su padre.

Lía –Solo espero que nadie se meta con ellos, ya sabes por el simple hecho de ser mestizos. Hay gente muy cruel por allí y no tolera ciertas cosas.

María –Mis padres, por ejemplo. Nunca me van a perdonar que me haya casado con un blanquito y mucho menos tener hijos con él. No se quieren dar cuenta que los tiempos han cambiado. La gente es más tolerante o al menos de cara al público. En su vida privada quizás no lo sean.

Después de un rato, unos niño de 9 y 12 años. Llegaron a la casa, abrazaron a María y ella hizo las presentaciones. Los niños estuvieron con su tía y Lía unos minutos, después se fueron hacer los deberes.

Carol – Y dime ¿Cómo va Miguel? Su trabajo es muy peligroso.

María –Es un buen policía, ya ha hecho el examen para ser teniente. Gracias a ese ascenso, mudaremos a una casa mejor. Mi negocio está yendo muy bien, como bien sabe Carol. Me dedico a la piscología, cada vez tengo más pacientes y también ayudo a la policía en algunos casos.

Mientras que las tres mujeres hablan, entra un hombre rubio y muy fuerte.

Miguel –Carol ¿Qué haces aquí? No te esperaba hasta mañana y supongo que esta joven debe ser Lía.

Carol –Es que, las cosas se han complicado y me la tuve que traer antes.

Lía escucha la conversación, ahora le encaja las piezas. Su nana, despareció unos días antes de sus 18 años y nunca más supo de ella. Y ahora sabe que Carol, se la quiso llevar pero debió de pasar algo terrible y comienza a sospecha que la familia Lorre, tuvieron mucho que ver con aquello. Con la información que tiene Lía de su vida pasada, se da cuenta que fue Enzo quien le envió esas cartas en lugar de su nana. Pero no les sirvió para saber la verdad, aunque fue demasiado tarde y no pudo hacer nada para cambiarlo. Ahora con esta nueva oportunidad, la va a aprovechar.

Mientras que su nana, se ponía al día con Miguel, Lía se puso a pensar en su siguiente paso.

No podría olvidar a Enzo, él siempre estuvo a su lado. Hasta que dio su último aliento, él estuvo junto a ella.

En unos días, su supuesto padre hare una fiesta en un gran hotel. Allí estará Enzo, si pudiera ir... se podría acerca a él y habla pero sabe que no será nada fácil poder asistir. Así que está pensando otra manera de poder acercase a Enzo.

Miguel –Lía, Carol me ha dicho toda tu historia. Solo quiero que sepas que si necesita ayuda, puedes contar conmigo.

Lía- Gracias, pero como no conozcas aúna manera de `poder acércame a Enzo Celen. Poco me puedes ayudar, no es que no aprecie tu ayuda.

Miguel –No pasa nada, pero quien te puede ayudar con eso es mi esposa. El padre de Enzo es su paciente, creo que le dio una invitación para un gran evento. Deberías de habla con ella, quizás te de su invitación pero lo dudo. Se ha comprado un vestido muy caro, se ha gastado todo mi sueldo en él y...

María – ¿Te molesta? Te recuerdo que estamos casados y todo lo tuyo es mío lo mío es mío.

Miguel –Ya lo sé, lo dejaste muy clara el día de nuestra boda. Lo dije porque, le podrías dar tú….

María –O se podría venir conmigo, como mi acompañante. No estoy obligada a llevarte, igual que tú. Te fuiste a la fiesta de tus jefes con otra persona.

Miguel –Estabas embarazada de Nico y recuerdo que me dijiste, que me podría ir. Porque teníamos al pequeño Adam y lo quería dejar solo. Pero claro, me lo dijiste para que lo hiciera y de esta manera poder sacarlo en cualquier tema. He aprendido la lección, nunca jamás me iré sin ti a ningún lado.

Mientras tanto……La familia Lorre, están reunida en el salón. Se acaban de dar cuenta que Lía no se encuentra en la casa.

Bibí –Esa maldita ¿Qué voy a hacer? Se ha ido, no podre gradúame sin ella. Es ella quien se presenta a los exámenes y hacer mis tareas.

James –Es una desgraciada. Pero ese no es el gran problema, en breve cumplirá la mayoría de edad y hace falta que firme su cesión de la herencia de su madre. Por eso hacer falta que la encontremos, hay que hacerlo antes de que su padre biológico lo haga.

Cristal –Nuestra pequeña, se puede hacer pasar por Lía. Si ella la ha podido sustituir en algunas ocasiones, también lo podrá hacer con ese hombre.

James –Eso era posible, porque pagaba para que hicieran la vista gorda. Ese hombre, no es un idiota. Se dará cuenta del engaño enseguida, a no sea….quizás exista una posibilidad. Bibí vas a tener que hacer algunos cambios, debes de teñirte el cabello y comenzar a usar lentillas de otro color.

Bibí – ¿Crees que lo podre engaña? Me gusta ser rubia y mis ojos tal como están. Paso de ser una copia de esa bastarda, que ni siquiera puede hacer nada bien.

James –Puede ser, pero no es muy seguro. Creo que lo mejor que puedes hacer, es conquista a Enzo y conseguir convertirte en una gran estrelladle cine.

Cristal –Tu padre tiene razón, es mejor seguir con el plan. De momento vas muy bien, tienes a esa bruja de tu lado. Mientras que la señora Celen, te apoye. Podrás ser la señora Celen tendrás el mundo a tus pies.