capitulo 6 : Me escuche por primera vez

Zuri

Los primeros rayos del amanecer se cuelan a través de los Bordes de mi cortina iluminando la habitación con una luz suave y cálida como una caricia que me despierta sin prisa lentamente abro mis ojos dejando que la suavidad del nuevo día me atrape.

En esta ocasión no percibo el peso habitual en mí pecho ni esa compulsión de querer esconderme debajo de las sábanas buscando refugio en la penumbra .

Inhalo profundamente sintiendo cómo el aire fresco llena mis pulmones , y es en este momento que me doy cuenta que hoy por alguna razón inexplicable sin resistencia alguna a la idea de ponerme de pie y enfrentar el día.

Me levanto de la cama y permito que mis pies se posen sobre el frío del suelo .

Con paso decidido me voy hacia el espejo aquel al que tantas veces he preferido no mirar .

Hoy sin embargo no evito la confrontación luego me observo con una mirada sin emitir juicios sobre lo que veo
Después abro el armario con tranquilidad elijo mi ropa para el día y opto por prendas que son exageradas pero algo dentro de mi está cambiando radicalmente .

Abro el cajón y para mí sorpresa saco una camiseta que rara vez uso aunque es una prenda sencilla posee un estampado vibrante que me recuerda a esa pulsera que me llevé puesta la noche anterior .

Decido ponérmela, al mirarme de nuevo en el espejo una sensación de aceptación que me observo sin miedo .

Esta soy yo auténtica sin máscaras .

Sin demorarme, empiezo a ponerme la ropa.

Sin demorarme empiezo a ponerme la ropa una vez que termino de vestirme comienzo a peinar mi afro .

Lo dejo suelto permitiendo que mi afro se expanda de manera natural sin dominarlo ni controlarlo .

Cada uno de esos rizos representa una parte de mi historia y he decidido que ya no quiero ocultarlos .

Cuando finalizó de peinar acto seguido me miro a el espejo resistiéndome que hoy va a ser un buen día para mí luego agarro los libros y cuadernos que voy a necesitar para las clases de hoy .

Después de guardarlos en mi mochila salgo de mi habitación y camino hacia la cocina .

No veo a mi madre ni a su novio por el momento; supongo que ya han salido. Sin embargo, eso no me afecta demasiado, ya que es parte de la rutina a la que debo acostumbrarme.

Al entrar en la cocina cuelgo la mochila en una silla y decido calentar un poco de leche .

Hoy el silencio que me rodea se siente diferente no es la ausencia que suele acompañarme sino más bien un espacio que siento que es solamente mío .

Luego coloco un poco de leche en mi taza asegurándome de que esté a la temperatura perfecta .

Luego abro un paquete de galletas eligiendo con cuidado aquellas que más me apetecen en este instante .

Después me siento y con tranquilidad para disfrutar de un delicioso desayuno , es un momento para relajarme .

Tan pronto como termino de desayunar me apresuro a lavar mi taza y mi cuchara
Una vez que todo queda limpio agarro mi mochila y me marcho hacia la puerta .

Al abrirla y al cruzarla siento el aire fresco que acaricia mi rostro.

En este momento por primera vez en mucho trabajo tengo la sensación de que no estoy escapando de nada .

Es como si en este preciso instante estuviera avanzado hacia mi verdadero yo .

Mientras me voy hacia el instituto el aire de sensibilidad me atrapa permitiendome apreciar cada pequeño detalle de mi entorno .

Los árboles se mueven con majestuosidad renovada, sus hojas susurran al viento de una manera que antes pasaba desapercibida .

El cielo con sus matices de azul y blanco parece más vivo y lleno de posibilidades.

Los sonidos a mí alrededor, el canto de los pájaros , el murmullo de las hojas y el suave murmullo de la cuidad se entrelazan en un sinfonía que suena en mí corazón .

Esta nueva forma de percibir la vida me ha abierto a una experiencia que antes podrían parecer triviales.

Hay una ligereza en mi , como si la carga que llevaba sobre los hombros se hubiera aligerado.

Las miradas de los demás ya no me pesan en lugar de rechazos o inseguridades siento curiosidad y conexión .

El camino,me cruzo con un compañero del instituto que antes me saludaba con timidez .

Hoy en lugar de la respuesta automática le sonrió con sinceridad dejando que esa simple acción explique la nueva apertura que siento en mi vida .

Esa sonrisa no solo es un gesto sino un reflejo de mi transformación,un puente que acerca nuestros mundos.

Cuando llego , es justo en el momento en que cruzo el umbral del instituto.

Con los hombros escogidos intentando bloquear mis pensamientos y no pensar demasiado en lo que me espera dentro .

Entonces lo veo a Piero está allá apoyando contra la verja su mochila descansa a un lado y en su rostro hay una expresión que no puedo interpretar .

Cuando me acerco y me ve su rostro se ilumina con una sonrisa sincera que parece iluminar todo a su alrededor .

—Hola Zuri —Me dice con una calidez que tiene la capacidad de desarmarme por completo .

—Pensé que quizás no vendrías —Dice con un tono de voz que refleja una mezcla de sorpresa y alegría .

Asiento con una sonrisa una expresión que ya no me da miedo mostrar como si finalmente hubiera encontrado la confianza para ser auténtica .

—No solo vine tal como soy —Respondo con una fuerza renovada en mis palabras .

Él me da el cuaderno que ha estado sosteniendo pero no añade nada más .

Simplemente se queda callado en un silencio expectante como si estuviera esperando que yo tome la iniciativa .

Empiezo a leer y mientras lo hago una ola de emociones indescriptibles comienza a surgir dentro de mi .

Cada palabra parece sonar con mis propias experiencias provocando en mí sentimientos profundos y complejos que no puedo explicar del todo .

Piero no interrumpe en ningún momento simplemente se dedica a mirarme con respeto mostrando un temblor en sus dedos como si también él estuviera compartiendo delicado y vulnerable .