Capítulo 14 ★ Edición especial★

PASADO:

Había pasado un año, desde que Felipe Daniel había llegado a la ciudad de Londres, y todo iba de maravilla.

Le había costado un poco adaptarse a la ciudad, y más a la gente que aún lo veían con algo de morbo, o con burla.

Pero era algo que realmente no le afectaba, ya que el se había aceptado tal y como era y con los años había aprendido, a qué eso no le afectara

Casi todos los días hablaba con Isabella Harris, ella le informaba que todo se encontraban bien. Que Beca lo extrañaba muchísimo, y que contaba los días para que regresara.

También le hablaba de Rafael, diciéndole que se encontraba muy contento en su trabajo, ya que Colin y lo había empleado en sus oficinas, y el muchacho disfrutaba mucho el estar ahí.

Aún no podía arreglarle los papeles para legalizarlo en el país, ya que con su condición especial era un poco más complicado, y Colin Brown estaba haciendo todo lo posible.

—Daniel ¿cómo estás? —le preguntó Lisa, una de sus compañeras.

—Hola, muy bien yo pensé, que hoy no vendrías.

—No me tocaban clases pero la Miss me habló dijo que quería hablar conmigo Por eso estoy aquí.

—¡Que raro!. A mí también me dijo que la esperara, porque quería hablar conmigo, espero que no sean malas noticias, porque yo juro que no hice nada. —mencionó Daniel, viendo el esmaltado que se había colocado en sus uñas, en color rosa pastel, ya que era uno de sus colores favoritos.

—¿No me digas que te ha seguido molestando Brian?.  y tal vez la Miss se dio cuenta, y ya ves que la vez pasada yo lo enfrente. —mencionó la joven muchacha, ya que él era un compañero que siempre se la pasaba burlándose de Daniel, por sus preferencias sexuales.

—Pues quién sabe, pero tú no te preocupes por nada, porque si algo he aprendido es a defenderme y defender a la gente que quiero y está a mi lado. Y tú estás a mi lado y también te quiero. Así que no voy a permitir que la Miss se ensañe contigo, o quiera suspenderte.—pronunció Dany muy seguro, mientras buscaba una lima en su bolso.

En eso se escuchó la puerta que se abrió ingresando la Miss, que traía un portafolio negro y lo colocó sobre su escritorio, ellos dos de inmediato se pusieron de pie por educación, y esperar qué era lo que la mujer les iba a decir.

—Buenas tardes jóvenes, me da gusto que sean puntuales y sobre todo tu Lisa, que hayas venido sin tener clases, la puntualidad es muy importante sobre todo en esta carrera qué es tan complicada, y qué se necesita mucha atención y sobre todo paciencia.

—Pero eso ustedes ya lo saben, a veces hay que sacrificar muchas cosas para llegar hasta nuestros objetivos, el mundo de la pasarela es un mundo maravilloso. Pero también que requiere muchos sacrificios.

Daniel y la muchacha solo escuchaban con atención las sabias palabras de esa mujer, ya que a lo largo de ese año los estaba instruyendo en ese mundo.

—Si los mandé citar, es porque tengo algo importante que decirles. Ustedes saben que estás escuela de modelaje es una de las más importantes, y una de las que mayor oportunidades les da a todos los modelos. Y ustedes dos han sido elegidos para formar parte de un desfile de modas, que se realizará en París, por  Dior alta costura, primavera- verano. —mencionó la mujer con una gran sonrisa, dejando sin palabras a los dos muchachos. Que aún no comprendía nada, de lo que la mujer les estaba diciendo.

—U,u, usted..  ¿nos están diciendo que fuimos elegidos para un desfile? —balbuceo Dany, mientras respiraba con apuro por esas palabras.

—Así es Felipe Daniel, tú y Lisa son los elegidos para que vayan a representar esta escuela en ese desfile de modas. ¡Al menos de que ustedes no les interese!

Los dos muchachos se voltearon a observar, con una enorme sonrisa en el rostro, y pegaron un grito y un brinco de emoción, abrazándose entre ellos dos de la emoción que sentían al saber, que iban a tener su primer desfile de modas y en París.

Daniel después de enterarse de todos los detalles, y de a ver festejado con una comida, al lado de su compañera Lisa, esa con la que había hecho amistad desde el día uno en que llegó ahí, convirtiéndose en alguien importante en su vida, compartiendo el mismo sueño, regreso a su pent-house, directo para comunicarse a Oregón, y darle la buena noticia a su querida amiga Isabella Harris.

Ya que ella le había prometido, que iba a estar presente en su primer desfile de modas, y ese día después de un año llegó y sería en 20 días.

Claro que Isabella cuando se enteró grito de emoción en la bocina, festejando con su querido amigo esa gran noticia, y jurando que estaría presente y en primera fila, junto a Colin Brown para festejar con él y disfrutar de ese hermoso momento, que sabía perfectamente la mujer que le había costado mucho, y que ahora estaba recibiendo el fruto de su cosecha.

Y esos 20 días se pasaron casi de inmediato, y también fueron muy intensos para Daniel, ya que estuvo preparándose día a día hasta altas horas de la noche para ese momento.

—Estoy tan feliz de que estén aquí. Ustedes mi familia de corazón —mencionó Daniel, lanzándose a los brazos de Isabella.

Colin solo los observaba con una sonrisa, esperando su turno para también saludar, a su querido amigo.

—Ratón me da mucho gusto verte. —mencionó también abrazándose a él, con ese abrazo de amistad golpeándose la espalda, por todo ese tiempo que no se habían visto.

—A mi también me da gusto verte. —contestó el rubio.

—Yo sabía que este momento iba a llegar, y me siento muy feliz por ti y también muy orgulloso.—mencionó Brown.

—Todo esto se los debo a ustedes, y siempre voy a estar muy agradecido.—pronunció Daniel, con un nudo en la garganta por la emoción que sentía.

—Deja de darnos las gracias. Es verdad que te ayudamos pero todo esto lo hiciste tú, por tu esfuerzo, y por la dedicación, y lo has logrado por tus propios medios. Así que disfruta de este viaje, y de todos los éxitos que vienen en el futuro, solo espero que cuando seas famoso, no te olvides de mí. —dijo la hermosa mujer con una sonrisa.