Llegué a casa con los nervios de punta, entré corriendo a mi cuarto, cerré la puerta y dejé mi mochila en el piso, pero lo que menos quería que pasara tenía que pasar.
-¡hija! Necesitamos hablar contigo... -gritó mi madre-
-en un momento voy... -grité de vuelta-
Abrí la puerta acomodé mi cabello, mi falda, bajé las escaleras y caminé hacia donde estaban mis padres, en la sala.
-siéntate por favor... -dijo mi madre dejando una taza en la mesita de centro-
-si... -me senté-
-creo que sabes porqué estás aquí... ¿No? -dijo mi padre-
-am... -agarre mis manos-
-bueno, esta mañana nos llegaron tus calificaciones... Pero... No nos gustaron nada de nada... Mira... -dijo mientras me daba una hoja y la empecé a ver-
-bu...bueno, no es tan tan mal... -me interrumpió-
-¿¡no están tan mal!? -gritó mi padre, me espante ante su grito y me encogí de hombros- ¡sube esas calificaciones o si no pondremos castigos!
-si Papá... -agache la mirada-
-ahora, vete a tu cuarto a estudiar...
-sí Papá...
Di una reverencia y salí de ahí directo a mi cuarto, cerré la puerta y me puse a hacer mi tarea... No entiendo porque mis padres se preocupan tanto por mis calificaciones. Al terminar mi tarea, baje a comer, y al terminar subí a escuchar mi música.
-tok tok, ¿hija? ¿Puedo pasar?
-ah, si Mamá... ¿Qué sucede?
-vengo a dejarte estos libros que te compro tu papa para que estudies ahorita...
-¿eh? ¿Pero, porque?
-para que subas esas calificaciones...
-no Mamá, ¿por qué quieren que saque buenas calificaciones?
-por que nosotros queremos una hija inteligente.
-¿eh? Y si no fuera inteligente... ¿No me querrían?
-Como crees hija... Te queremos de todas las formas, pero nosotros queremos que estudies para que llegues hacer una carrera sin tener problemas... Ahora, solo ponte a leer... -dicho esto salió de mi cuarto-
...Al día siguiente...
-hija apúrate si no quieres llegar tarde a la escuela...
-¿eh? ¿Que hora es? -dije viendo la hora- ¿7:35? Diablos, ahora bajo Mamá...
De nuevo tarde... Me levanté a dar una ducha, me lave los dientes, guardé un libro que me dió mi Papá en mi mochila y salí sin desayunar. Llegué a la escuela y caminé por el patio... Llegué al salón y camine a mi lugar, pase por el lugar de Mark quien estaba leyendo algo y me senté en mi lugar. De pronto entro el profesor.
-buenos días alumnos...
-buenos días... -dijimos en coro-
-pasaré lista...
Empezó pasar lista y al terminar guardó sus papeles.
-señorita Dany, necesito hablar con usted.
-¿eh? ¿Po.. Por qué?
-no me pregunte por que, ahora venga por favor.
-esta bien... -me levanté y camine hacia el profesor, éste me hizo señal de que saliera, salí y este salió atrás de mi-
-señorita Dany, creo que sus papás hablaron con usted ¿no?
-ah, sí...
-bueno, pero también hablaron conmigo... Y yo les explique lo que usted hacía... Ahora me pidieron que la pase hasta en frente de la clase...
-ah... Pues está bien hágalo...
-Está bien, ya pase... Le asignare su lugar nuevo...
Entré al salón y el profesor me cambio el lugar con una compañera de hasta enfrente, así le pondré más atención a el profesor... Creo... Pasaron las horas, de vez en cuando volteaba a ver a Mark, pero tenía miedo a que el profesor me regañara o que Mark viera que lo estoy viendo... Salí al receso directo a la cafetería a comprar algo de comer, pues no desayune nada en la mañana...
Me senté en una mesa pegada a la pared para dos personas nada más, yo estaba metida en mis pensamientos mientras comía cuando de repente...
-hola, ¿esta ocupada esta silla? -escuché, voltee a ver y era Mark-
-¿eh? -¿se va a sentar aquí? Pensé-
-¿está ocupada?
-am... No... -pero si quieres siéntate. Volví a pensar-
-a bueno, me la llevaré... Gracias... -dicho esto se llevó la silla y la llevó a la mesa de alado de mi y se sentó junto con sus amigos, que estaban comiendo-
¿Eh? Debo de dejar de ilusionarme.
Al acabar lleve mi charola a la barra y me fui a mi salón. Saque el libro que me dio mi Papá y me puse a leer, en eso...
-hahaha shh ya guarden silencio... -escuche la voz de Mark y enseguida volteé a ver, eran los amigos de Mark y él, estos caminaron hasta atrás del salón y se sentaron en el piso-
Decidí mejor concentrarme en el libro y así fue, leí hasta 3 capítulos, de vez en cuando escuchaba risas de los chicos pero no les tomaba tanta importancia. Al acabar el descanso los amigos de Mark se fueron y este se sentó en su lugar, yo guardé el libro en mi mochila y saqué los cuadernos que iba a usar para la clase que nos tocaba, pero me puse a pensar "estamos solos... Él y yo", pero de pronto el salón se llenó, el profesor entró y dio su clase normal y aburrida.