Capítulo 24

Siempre he dicho que mi mejor amigo es de esas personas que habla hasta por los codos. Theo siempre ha sido hablador y por primera vez en mi vida lo veía muy callado, sin saber qué decir y con un trozo de pizza a medias, extraño porque siempre debo luchar por un trozo de pizza.

Llevábamos al menos treinta minutos comiendo y mi amigo no había soltado palabra alguna, solo se dedicada a ver la pantalla del televisor que mostraba un aburrido documental.

Cansada de ser ignorada tomé el control remoto y apagué la televisión logrando que volviera su atención a mi persona.

_ ¿Me dirás qué te tiene tan callado?

_ No tengo ganas de hablar sobre eso… -Iba a replicar, pero me detuvo- Mejor háblame de la boda y cómo van los preparativos.

_ Sabes que algún día tendrás que hablar conmigo sobre lo que está pasando. –Aseguré, porque simplemente no podía dejar pasar un tema como este-

_ Lo sé, pero todavía no estoy listo… necesito pensar en otra cosa.

_ Está bien –Digo rendida… por ahora- No tenemos nada, solo la fecha.

_ ¿No se supone que ibas a tener una organizadora? –Vuelve a comer de su pizza-

_ ¿Cómo sabes eso si no hemos hablado? –No lo veía desde que se fue triste de mi casa-

_ James me habló un día para preguntar si contratar a una organizadora era una buena idea, por supuesto dije que era la mejor idea del mundo porque tú siempre estabas repleta de trabajo.

_ Es cierto –Le di otra mordida a mi pizza- Pero nunca pensé que una boda necesitaría de tanto trabajo.

_ Para tu suerte como mejor amigo pretendo ayudarte en todo y ser el mejor… “Damo de honor”. –Comencé a toser e intentar de respirar ya que con la última frase de Theo me dio un ataque de risa-

_ Está bien… puedes ser mi Damo de honor.

_ No te lo estaba preguntando… era una afirmación. –Volvió a comer- ¿Cuándo debes reunirte con la organizadora?

_ El miércoles. Resulta que eran muchas preguntas y con James no habíamos pensado en nada realmente así que nos dio algunas cosas en las que pensar.

_ Supongo que la boda será el 13 de diciembre –Lo miré extrañada- El día que James te pidió ser su novia.

_ A veces me asusta que recuerdes todas esas cosas… espero que seas así con las fechas de tus aniversarios.

La mirada de Theo se ensombreció y supe que la había cagado así que de inmediato cambié el tema. Por ser lunes no me quedé hasta muy tarde.

Una vez asegurada de que mi amigo estaba bien me fui directo a casa.

Al llegar solo me encontré a mis padres, tras un corto saludo me fui directo a la cama. Ya acostada tomé el celular y vi que tenía una llamada perdida de Blake. De inmediato le devolví la llamada, aunque fuera tarde era muy probable que estuviera despierto trabajando.

Contestó al segundo tono ratificando mi idea anterior.

_ Hola So –Blake era la única persona que me decía So, por Sophia, ya que, según él, era un nombre muy lindo como para no usarlo o su diminutivo- ¿Qué haces despierta tan tarde?

Despegué la oreja del celular unos segundo para ver la hora, la cual marcaba las doce y media de la noche.

_ Lo mismo me pregunto yo… Esto solo me asegura que eres un hombre obsesionado con el trabajo. Porque no necesito verte para saber que estás trabajando.

_ Has acertado –Ríe sutilmente- quiero volver a Boston así que estoy intentando terminar esto lo más rápido posible… -Pero no sonaba como algo verdadero-

_ Lo entiendo, pero debes descansar. –Hago una pausa- No te quiero muerto por estrés o algo parecido.

_ Eso no pasará –Vuelve a reír- Créeme que hay Blake para rato… No me has dicho qué haces despierta a esta hora.

_ Después del trabajo fui a ver cómo estaba Theo y volví hace poco.

_ ¿Cómo estaba? –Blake no suele preocuparse mucho por los demás, pero siempre muestra una preocupación excesiva por amigos y familiares-

_ Fue bastante extraño. Cuando llegué abrió la puerta Sam y los dos se veían bastante… ¿acalorados? –Reí por lo último-

_ Ellos… -Blake no sabía qué decir- ¿Los encontraste en paños menores?

_ ¡No! –Respondí de inmediato- Dios salve mi mente de tal imagen… simplemente tenían la ropa bastante arrugada, labios hinchados y Theo estaba sin camisa.