Capítulo 11 : Mi ángel

Decido quedarme aquí. Decido no despertar. Decido estar a su lado que sin él. 

Me encuentro rodeada por una inmensa paz, estoy en un hermoso jardín, puedo observar flores de todas las especies, puedo oler su exquisito aroma. Me encuentro sentada en un banco blanco, creo que esperando a alguien...

_ Mi amor.....   -   Sebas está aquí !!!! Volteo a verlo. Se ve tan guapo. Sonríe al ir acercándose a mi.

_ Qué sucede mi vida ??? Que hacemos aquí ??? En dónde estamos ???   -   se sienta junto a mi

_ Yo se porque estoy aquí.... Tú que haces aquí ???

_ No lo sé amor... 

Sebastián toma mis manos entre las suyas.

_ Debes volver mi amor...

_ Qué ??? A dónde ???

_ Debes volver con nuestra hija... Camila te necesita. Prometiste cuidar de ella si algo me pasaba...

_ Pero....   -   no entendía nada.

_ No estés triste mi amor, siempre estaré a tu lado, ambos lo estaremos... 

Daniela observó como él se levanto y se acercó a una hermosa mujer. Esta le tomó la mano, antes de caminar junto a él se giró hacia ella y le sonrió.

_ Cuida de nuestra hija. Tu eres lo único que le queda. Y se feliz Daniela. Te lo mereces. Gracias.... Dile que la amo con mi vida. 

Y ambos se fueron, tomados de las manos, sintiéndose uno al otro. Daniela supo en ese momento que era hora de regresar. Tenía que cumplir con la promesa que habia hecho a Sebastián y sabía que iba a ser doloroso. Pero primero estaba Camila, su dolor podía esperar.  Le habían confiado su tesoro y no los decepcionaria.

Parpadeo varias veces, sentía que le dolía todo el cuerpo, no se podía mover sin sentir dolor. Las máquinas a su alrededor pitaban ensordeciendo su entorno. La habitación era blanca, amplia. Volvió a abrir los ojos, esta vez trató de enfocar bien la vista. Su madre se encontraba durmiendo en una posición algo extraña, quiso sonreír a pesar de todo. Le doleria el cuello cuando se despertará.

La puerta de la habitación se abrió y Nicolás entró casi sin hacer ruido, su madre se acomodó y al hacerlo despertó. Ambas miradas se encontraron. 

_ Hija.... Daniela....

Nicolás se acercó a la cama.

_ Llama al médico y avisa que despertó...

En ese momento entendió que debía enfrentar su triste realidad, varios familiares quisieron entrar a verla, pero ella apenas y podia mantener los ojos abiertos. Nicolás volvió con el doctor. Se miraron por un breve momento, Dani trató de sonreír, todo estaría bien, descansaria sólo un poco más y luego sabía que su vida cambiaría para siempre. También sabía que no estaba sola.