Capítulo 12 : Nuestra realidad

Daniela ya habia abierto los ojos, pero se sentía tullida del cuerpo. El médico volvió a revisarla a la mañana siguiente temprano, los moratones eran casi inexistentes, pero su corazón era el que seguía sufriendo. A pesar que sabia lo que había sucedido en el accidente, porque el sueño que tuvo fue revelador, aún quería que se lo dijeran y como fue que sucedió.

 Su mamá y su papá no sabían como hacerlo. Su hermana todavia no habia llegado y la dejaban estar poco tiempo porque tenia que estar con su bebita, si, hasta eso se había perdido. Su sobrina habia nacido tres días antes de que ella despertara.

Nicolás se ofreció a hacer de puente, no sabía como reaccionaria ella pero trataría que sea lo menos doloroso posible y después de eso traerian a la niña para que la viera.

El médico terminó y lo único que recomendó fue paciencia y mucho amor y entendimiento. Que le contarán todo de a poco que ella entendería. 

Los padres se hicieron a un lado, Nicolás se acercó a la cama donde ella se encontraba.

_ Hola...   -   se miraron.

_ Hola.... Nicolás.... Sólo dilo. Cuentame que fue lo que sucedió y porque Sebastián no esta aquí...

Nicolás tomó aire y relato lo que sabía. Dani lo escuchó atentamente. Sus ojos se llenaron de lágrimas al saber que el había sobrevivido al accidente y que habia luchado por mantenerse con vida un día completo. Al final su corazón no resistió, su cuerpo estaba demasiado lastimado. El impacto lo había recibido de su lado y llevó la peor parte.

Preguntó por Camila, gracias a Dios ella estaba bien. No había sufrido daño. Y le hizo saber que estaba afuera esperando para verla.

Les dijo que la dejarán pasar, necesitaba a la niña, era lo único que le quedaba de Sebas. Y sabía que de allí en adelante sólo se tendrían a ellas mismas. 

Ella sería la mejor madre posible. La vida y los años le habían enseñado que todo sucedía por alguna razón, que al final todo tenía un propósito, la vida quitaba y la vida daba. Ya sería su tiempo de recibir. Agradecía los momentos que pasados al lado de Sebastián y quizás, sólo quizás, su destino ya estaba trazado y necesitaba de alguien que cuidara de su niña y ella fue la mejor opción. 

Cuando Camila entró a la habitación se lanzó a sus brazos, llorando...

_ Mami..

La abrazó fuerte.... Se tomaron su tiempo, ambas necesitaban sentirse otra vez, sus padres miraban la escena con lagrimas en los ojos. No pensaron que su hija significará tanto para la pequeña niña, en ese momento cayeron en la cuenta de que Daniela la quería como su hija y que ellos eran abuelos de una hermosa pequeña de seis años.

 _ Hola mi amor... Cómo estás ???   -    Camila se acostó a su lado

_ Bien mami, papá ya no está....    -   lloraba en silencio.

_ Lo sé mi vida, pero nosotras estamos juntas y eso es lo único que importa. Debemos seguir, tu papá así lo quería.

_ Si mami, mientras te tenga a ti estaré bien.

_ Estaremos bien, no te preocupes.... Ahora tenemos dos Ángeles que nos cuidan...   

_ Te refieres a mamá y papá ???

_ Si, ellos nos cuidan ahora....   -   le sonrió. 

Ambas se quedaron en silencio. Después de unos minutos Camila dormía profundamente a su lado. Sus padres intentaron llevársela pero Daniela no lo permitió, quería que ella se quedara. Nicolás se despidió con la promesa de regresar al otro día.

Sus padres también se retiraron. Sabían que las cosas comenzarían a mejorar ahora que Dani estaba despierta. Su madre sólo pedía que este a la altura de lo que todavía le faltaba por vivir.