La fiesta es hoy y yo no puedo dejar de pensar en Asher.
Mi corazón está más alerta que de costumbre, cuando camino por la calle volteo esperando cruzarme inesperadamente con él pero eso no sucede. Durante mi día en la librería, cada vez que alguien abría la puerta, veía si era Asher pero no era así.
Estoy un poco nerviosa por el hecho que no hemos hablado nada realmente después de esos mensajes que intercambiamos y mi mente se ha llenado con dudas sobre si tal vez, él no llegará.
De regreso en mi casa, me visto con el atuendo que Carter me ayudó a elegir y me obligo a respirar a un ritmo normal para calmarme.
Kyle está esperándome para que nos vayamos y finalmente voy con él luego de revisar mi rostro en el espejo diez veces. Me dice que suba al auto mientras se pasa la mano entre su cabello para despeinarlo más.
Cuando salgo noto que Carter está en el asiento del copiloto y me acerco a la ventana para saludarlo.
—Hola —digo.
Voltea y sonríe. — ¿Lista?
No, para nada, siento que mis rodillas son de gelatina. —Um, sí.
Me subo al auto al mismo tiempo que Kyle, él termina de ajustar los espejos y suelta: —No sé que hiciste para convencer a Carter que fuera.
Lo involucré en mi plan poco lógico y realista. —Ah, nada, solo le dije que sería bueno que él estuviera aquí.
Kyle despeina el cabello de Carter. —Mi chico irá a su primera fiesta.
Carter empuja la mano de Kyle. —Tengo que ir a cuidarte, ¿no?
Kyle y Carter siguieron hablando entre ellos mientras íbamos de camino, yo intentaba distraerme con la vista fuera de la ventana o cerrando los ojos imaginándome las escenas del libro pero esta vez, siendo yo la protagonista.
Tomo mi teléfono y me debato si debería enviarle un mensaje o no. No quiero parecer desesperada por su atención pero también quiero confirmar que estará ahí.
Ya no hay tiempo para pensar pues hemos llegado, la música hace que algunos vidrios tiemblen y las personas están celebrando desde antes de entrar. Esta sin duda, es una de esas fiestas que he visto únicamente en películas, después de todo el chico que hace la fiesta está en la universidad y no será una fiesta para jugar juegos de mesa precisamente.
Incluso antes de bajar del auto, volteo a cada chico rubio que encuentro pero ninguno de ellos es Asher.
Bajamos del auto y Kyle se acerca a mí. —Oye, escucha, no aceptes nada para beber, ¿si?
Asiento. —Lo sé.
Se señala. —Si necesitas algo vas conmigo, si quieres ir al baño me avisas o buscas a Carter que probablemente irá a la biblioteca de la casa.
—Está bien —me siento como una niña pequeña pero lo entiendo.
Kyle suelta una exhalación dramática. —Crecen tan rápido, mírate, en tu primera fiesta también.
Fui a un par de fiestas de cumpleaños antes, pero no como esta. —Basta.
—Vamos entonces —hace un gesto para que empecemos a caminar.
En parte esto es como lo he visto en las películas pero en parte no. No todos están bailando, la mayoría está hablando con alguien, sentados, riendo y tomando bebidas en vasos de plástico.
Kyle sacude la mano para despedirse y se acerca a un grupo de personas donde la mayoría son chicas. Todas ellas le sonríen.
Carter y yo estamos de pie a mitad del lugar, sé que deberíamos intentar mezclarnos con todos pero no veo a ninguna cara conocida y realmente a la persona que estoy buscando es Asher.
Luego de escanear la habitación por un tiempo l encuentro al fin. Está en una mesa cerca de la esquina, al fondo, hablando con cuatro chicos y riendo. Carter nota mi mirada y me da un empujón.
—Ve con él.
Niego, con los pies atados al suelo. —No sé si debería interrumpir.
Sonríe. —Creo que deberías ir, después de todo tenemos que descubrir si es Ashton Smith.
Lo sé pero, no quiero parecer una tonta desesperada por su atención. —Um, ¿Y si no quiere verme?
— ¿Acaso no te invitó él?
Sí lo hizo. — ¿Y si buscamos a la pelirroja antes?
Carter suelta una risa. —Quizás después, además no sabemos si eso vaya a ocurrir, ¿Y si solo es él fuera del libro?
Veo a Asher riendo y sonriendo, luciendo tan guapo como la última vez que lo vi. Cualquier persona diría que estoy loca si pienso que tengo una oportunidad con alguien así, pero si es como en los libros, él será capaz de ver más allá de mi físico y todo lo que no soy.
— ¿Cómo me veo? —pregunto.
Carter levanta un pulgar. —Genial, te ves bien.
Doy un paso pero me detengo. —Ven conmigo, ¿sí? Por favor, por favor.
Carter junta sus cejas. — ¿Para qué me quieres ahí?
En caso algo salga mal y me rechace. —Porque sí, por favor, además tú hiciste la lista y seguro serás mejor notando si hace algo de ella.
Carter no luce emocionado por acompañarme. —Yo…
Tomo su brazo y lo muevo. —Por favor, ven conmigo, por favor.
Suspira y sonríe, negando. —Está bien, vamos antes que sigas con esto.
Sonrío también, aliviada de no enfrentar a Asher sola.
Vamos hasta allá, mientras mi corazón late a un ritmo aún más rápido que la música del fondo. Asher sigue con sus amigos riendo y no me ha notado, estamos muy cerca ahora y me obligo a seguir, a pesar que quiero darme la vuelta y salir corriendo.
Cuando estamos a un metro de él, sube la mirada y encuentra la mía. Mi corazón se detiene por unos segundos y contengo la respiración. Odio como mi cuerpo reacciona, tan torpemente.
—Ah estás aquí —dice, levantando la mano.
Sus amigos giran en dirección a donde yo estoy y me miran intrigados, puedo notar como uno de ellos bajó y subió la mirada. —Hola —le digo.
Asher da unos pasos para acercarse, recordándome lo alto que es. —Me alegra que viniste, te ves bien.
—Gracias —digo, golpeándome en la cara mentalmente por ser incapaz de pronunciar más que una sola palabra.
Asher mueve sus ojos a Carter y luego a mí. — ¿Tu amigo?
—Sí —contesto demasiado rápido—. Es Carter, es mi amigo, ambos trabajamos en la librería.