¿Todas esas cosas que soñamos y pensamos antes de irnos a dormir nos las merecemos? Es decir, ¿Nos merecemos que nos pasen cosas buenas en nuestra vida?
¿Es normal ser optimista con los demás pero no consigo misma?
Esas y muchas preguntas más son las que le carcomen el alma y los pensamientos a Maddie, una chica de 19 años que no cree que la felicidad y el amor tengan cabida en su vida.
No era fácil tener momentos de notoria felicidad y de alta autoestima, y, de un momento a otro sentirse fuera de lugar.
El no tener amor propio y fé en sí misma es el error más grande que pudo cometer y que tendrá que pagar con lágrimas.
El destino juega sus cartas y le brinda una segunda oportunidad, esto sin antes darle una lección que recordará toda su vida.
O mejor dicho, en todos sus sueños...
Creer en las segundas oportunidades siempre fue el propósito en mente.
—¿Michael, eres tú?