Invierno.

SuLay | 499 palabras.

Yixing sentado en el sillón de su sala, mira el exterior.

La nieve congela todo, incluso sus sentimientos.

Es extraño. Desde julio, Yixing cree no sentir nada. Pero, ¿sentirse vacío no es sentir algo?

JunMyeon, su novio de siete años, entra a la sala y se sienta en el sillón.

Mantienen el silencio. Yixing está agradecido. JunMyeon lo ama y se lo demuestra de manera sutil, sin invadir su espacio y sin incomodarlo.

Yixing desea volver a sentir. ¿Eso no es sentir algo?

La blanca nieve cae y se amontona afuera.

JunMyeon se levanta y se sienta en el suelo, acercando cuidadosamente sus manos al fuego de la chimenea.

JunMyeon odia el invierno, es amante del verano.

Y Yixing se ha dado cuenta de que desde julio él es invierno.

—¿Comemos o esperamos a la medianoche?

Yixing ni siquiera tiene hambre.

—A la medianoche.

JunMyeon se levanta y desaparece por el pasillo.

Yixing se para y abre la ventana. La brisa helada acaricia sus mejillas. Cierra los ojos y el pensamiento que ha tenido desde julio aparece. Debe separarse de JunMyeon. No puede asegurar que lo ama, ni que lo odia. No hay motivos para odiarlo, hay miles para amarlo. No debería ser difícil querer a quien lo ha tratado bien. Pero Yixing no siente nada cuando está con él. Sin embargo, ha sido incapaz de decirlo. ¿Y si lastima a JunMyeon?

Aunque, quedarse juntos, en este invierno, parece la peor decisión. JunMyeon se está dando cuenta de sus actos fríos y de su desinterés. JunMyeon ama el calor, el sol, la playa y la arena. JunMyeon será capaz de pronunciar las palabras que Yixing es incapaz de soltar.

Un copo de nieve cae en el cabello de Yixing, quien sonríe. Él ama el frío, la luna y la vegetación abundante como en los bosques.

Ambos son opuestos.

Ambos se amaron.

Uno aún ama.

Yixing gira, encontrándose con JunMyeon, quien trae un regalo.

—Ya es medianoche. —JunMyeon murmura, entregando el obsequio.

Yixing lo abre con el corazón palpitando con rapidez.

Es un álbum de fotos.

Yixing ve su sonrisa brillante de aquellos días cuando sentía.

—No será para siempre. —JunMyeon susurra, acariciando las manos de Yixing.

A Yixing no siempre le gustó el invierno. El invierno llegó en julio sin avisar. Tampoco anunció cuándo se iría. El invierno de julio lo confundió, asegurándole que ya no amaba a JunMyeon. Pero la calidez de ese momento derritió un poco del hielo que había congelado su verano interno.

Sus sentimientos estaban ahí, anhelando ser descongelados.

Yixing sentiría, pero debía reencontrarse con el verano.

—¿Cenamos?

Yixing sonríe, mostrando su hoyuelo.

—Gracias, amor.

JunMyeon sonríe con compasión. Sabe que Yixing se encuentra atrapado en invierno, pero está seguro de que saldrá de ahí.

Al sentarse en la mesa, Yixing recuerda que el invierno llegó cuando fue despedido de la disquera en la que trabajaba. Invierno provocó que dudará de sus capacidades, de su vocación y de su amado. Está decidido: invierno debe irse.

FIN.

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