Avril’s POV:
Al día siguiente, la gente sigue desconfiando en el alma, ya que cuando entro al comedor, escucho voces.
- ¡No podemos seguir arriesgándonos! – grita Elena – Esa cosa sabe demasiado de nosotros y seguro que nos delata a la Buscadora.
- No es esa “cosa” – digo, levantando la voz – Y no todos son iguales.
Las miradas se clavan en mí, llenas de odio.
- ¿Cómo puedes estar tan segura? – me reta Damián, el tío de Iris - ¿Por qué te empeñas en creer que tu amigo sigue ahí?
- Porque me lo ha demostrado.
Un murmullo recorre la sala.
- ¿Y qué pasará cuando ese alma decida entregarnos? – dice otro de los hombres - ¿También lo vas a defender?
- No lo va a hacer, él es distinto.
- Basta – interrumpe Iris – Todos sabéis que soy la primera en odiar a las almas, pero he visto cosas que me han hecho dudar.
El comedor se llena de un silencio cargado de dudas y desconfianza. Sin embargo, nadie más se atreve a responder.
Sunflower’s POV
Escucho cada palabra que ellos pronuncian desde donde me tienen encerrado.
- “Van a echarnos” – me dice Leo, con amargura.
- Puede, pero Avril no lo va a permitir.
- “Eso no bastará. Si la Buscadora descubre este lugar…”
Se calla, pero hace falta que acabe la frase, ya sabemos lo que va a ocurrir.
Iris’s POV
Salgo del comedor después de la discusión. Mientras recorro el refugio, siento las miradas acusadoras de los demás, pues dudan de mí por defender a Sunflower. Sé que él no mentiría sobre Leo, cada minuto que pasa estoy más convencida. Y si Leo está ahí, no pienso abandonarlo.