En la brisa suave de este momento eterno, una petición encuentro en tus palabras tiernas.
"Tengo una petición que hacerte", dices con una voz serena, "Recuerdame para siempre", imploras en la arena.
En el lienzo del tiempo, grabaré tu nombre, en las páginas del recuerdo, te haré eternamente un recuerdo.
Tu presencia, como un susurro en el viento,se desvanecerá en el eco de cada pensamiento. Recuerdame para siempre como una melodía en el aire, que se entrelaza en mi alma, sin cesar.
En cada latido, en cada suspiro, en cada momento, te llevaré conmigo, en un amor eterno.
Tus palabras, como pétalos de una rosa delicada, se posan en mi corazón, nunca serán olvidadas.