Los finales no son lo mejor para las personas, en realidad conozco muy pocas que son devotas de las mismos.
Solamente les gustaba cuando se trataba de un final feliz. Como la culminación de un proyecto, el final de una carrera en la que la persona que concursaba ganaba el primer puesto o el final de un embarazo que tenía más que un final feliz ya que le daba a esa pareja un hermoso bebé, el cuál esperaron por 9 meses.
Pero hay algunos finales que son agridulces, que no son del todo felices, y tienen sus pros y sus contras.Y en mi caso , se trataba de uno de esos.
Mi tiempo en la secundaria había llegado a su fin. Como todo.Años había pasado preparándome para ese momento , después de todo no es que hubiese pasado buenos años ahí.
De hecho fueron los peores años de mi vida , si debía ser sincera. Tuve que soportar ser la chica gorda, la más baja, la ñoña y eso hizo que mis compañeros mi hicieran la vida imposible.
Pocas veces la pasé bien en ese lugar, hasta que Jeremy apareció en mi vida. Eso si que le dio sentido a todo ese dolor y angustia que tuve que soportar durante 6 años. Era como si nada pudiese molestarme cuando lo tenía cerca.
Las chicas malas no me molestaba más , en especial porque se distraían cuando lo tenían cerca a él.
Quiero decir como era posible no distraerse, si era la clara definición de un maldito Dios griego.
No había nada malo respecto a él y tampoco había algo que hiciera mal.
Pero en realidad, si tenía que ser completamente honesta al respecto, había un defecto que podía encontrarle. O dos..
No había manera de que él se fijara en mí, para él solamente era la amiga con la que lo compartía todo, la “freaky” según sus palabras que tenía los mismos gustos que él , con quien podía pasarse horas hablando de las películas de ñoños que él tanto amaba, sabía que yo no lo juzgaría, todo lo contrario, me pasaría horas y horas escuchándolo hablar de ello.
Estaba casi segura de que me sabía los argumentos de “Star Wars”, “Harry Potter”, “El señor de los anillos” y otras más , de memoria. No me hizo falta nunca ver algunas de ellas, Jeremy me contaba sobre que trataban.
-Te ahorraré las interminables horas y horas de aburrimiento.Puedo hacerlo entretenido para ti-solía decirme.
Ese era el problema , que no importaba lo que hiciese , todo era entretenido para mí. Es asi como nos hicimos inseparables.
Hasta el día de hoy.Donde nuestro futuro era incierto. La universidad nos esperaba y aún no sabíamos que camino tomarían nuestras vidas.
Seguiríamos juntos, seguiríamos compartiendo aventuras y seríamos amigos hasta que fuésemos viejos?
O la vida sería tan perra que nos separaría , haciéndonos ir por caminos diferentes haciendo que nos vierámos solamente para las vacaciones de Navidad y Acción de Gracias.
El solo hecho de pensar en eso me destrozaba mi corazón, simplemente no podía imaginarme una vida sin Jeremy a mi lado.
Eso es lo malo de tener un mejor amigo, no sabes en que momento las cosas se pueden complicar y él quizás desaparezca.
-Siempre estaré a tu lado. Lo sabes?-preguntó una tarde mientras estudiábamos para nuestro examen de matemáticas .
-Lo sé-respondí apoyando mi cabeza en su hombro teniendo una hermosa vista de sus pestañas. Envidiaban lo largas y hermosas que eran.
-No importa que decidamos hacer en el futuro , hay algo que tendrás que tener en mente.
-Qué cosa?
-No podrás separarte de mí aunque lo quisieras.
-Seguro?
-Tan seguro como que dejaremos de estudiar para ponernos a buscar una universidad que nos permita estudiar juntos. Qué dices ?
-Digo que es la mejor idea que has tenido desde que te conozco.
-Oye-musitó ofendido.
-La verdad no duele. Tu siempre amaste que fuese honesta contigo , verdad?
-Es una de esas cualidades que más amo sobre ti.
La palabra “amo” desenvolvió viejos sentimientos dentro de mí, las mariposas que alguna vez me había dedicado en asesinar , saliendo con otras personas para olvidar a Jeremy , habían renacido nuevamente y amenazaban con hacer tambalear mi plan de “ser su mejor amiga y nada más”.
La verdad es que nunca había sido del todo sincera con él.
Guardaba dentro mío un secreto , profundo y oscuro. Uno de los peores que alguna vez tuve que guardar.
No era fan de ellos, odiaba hacerlo pero sabía que el día que yo le dijera lo que realmente sentía por él , las cosas se terminarían.
Por la simple razón de que Jeremy y yo no estábamos destinados a estar juntos. Nunca lo habíamos estado.
Éramos buenos el uno para el otro, pero simplemente mi mejor amigo no me veía de otra manera que no fuese de aquella forma.
Como una mejor amiga, como su confidente, como la persona que le daba consejos y le decía que ponerse antes de ir a una cita mientras por dentro moría lentamente al saber que esa chica que pasaría horas y horas de diversión junto a él, no sería yo.
Seguramente las llevaba a un lindo restaurante donde servían las mejores hamburguesas del lugar y los mejores batidos. Luego la invitaría al cine y dejaría de lado su obsesión por las películas de ciencia ficción para dejarle a ella la oportunidad de elegir la película.
Luego se sentarían uno junto al otro y en la oscuridad el aprovecharía para pasar un brazo sobre sus hombros y la acercaría a él para robarle un beso cuando ella estuviese distraída.
Así comenzaría su historia de amor.
Una que no duraría demasiado, lamentablemente para ella y afortunadamente para mí.
Porque las cosas no duraban demasiado con Jeremy, no era una persona que disfrutara de atarse a otra persona.
Él se jactaba de ser un alma libre y eso siempre se lo cuestionaba.
-Algún día crees que sentarás cabeza?-pregunté mientras mirábamos los catálogos de las universidades.